Umberto Eco señala que el principio regulador de los conflictos e inconformidades humanas es la negociación. Aceptemos que es una buena conseja para resolver el conflicto entre el Estado mexicano y los maestros. Nombro a las partes en conflicto por los conceptos más amplios, porque no se trata de un conflicto personal entre el Secretario […]
Umberto Eco señala que el principio regulador de los conflictos e inconformidades humanas es la negociación. Aceptemos que es una buena conseja para resolver el conflicto entre el Estado mexicano y los maestros. Nombro a las partes en conflicto por los conceptos más amplios, porque no se trata de un conflicto personal entre el Secretario Nuño y la dirigencia de la CNTE. Ni tan sólo entre dos instituciones: la SEP y la CNTE. Si atendemos al hecho de que corresponde al Estado garantizar la calidad educativa a todos los mexicanos, como lo mandata la Constitución y que este no es el punto de confrontación con los maestros, sino la reforma que ideó. El punto de conflicto es la reforma y en ella la evaluación y las afectaciones a los derechos laborales de los maestros.
Desde antes de que hubiera iniciativa de ley los afectados reclamaban su derecho a participar en el diseño de la reforma. Reclamo totalmente legitimo en un estado democrático. Negación totalmente arbitraria y de abuso de poder de un estado autoritario. Más en el contexto en que se dio de un pacto de intereses entre las fuerzas políticas llamado eufemísticamente pacto político, que no consideró el bien público ni las dimensiones técnicas y profesionales de la educación. Una reforma que obedeció a intereses ajenos a la educación y que se aprobó con votos de quienes ni la leyeron, según se ha publicado.
A tres años de que el reclamo se ha expandido y endurecido por ambas partes: militarización de las evaluaciones, represión de manifestantes, encarcelamientos injustos, desapariciones y muertes, por la parte gubernamental; y plantones, manifestaciones y bloqueos, que afectan derechos de terceros, por parte de maestros. Trayecto que ha endurecido el distanciamiento de las partes. Nuño: «diálogo sí, pero no de la reforma. La reforma no se negocia».
Este lunes la CNTE entregó un documento a la SEGOB donde plantea: «la suspensión definitiva de la Reforma Educativa y todas sus implicaciones, en tanto se modifican los artículos 3 y 73 constitucionales y las leyes secundarias»… «resolver las consecuencias y costos de la reforma, relacionados con las víctimas, presos políticos, cesados, y suspensión de pagos». Y «un amplio debate nacional cuyos resultados serán parte del nuevo modelo educativo».
La SEGOB, por su parte entregó un documento a la CNTE, donde plantea: «El proceso de diálogo sobre el modelo educativo debe de estar guiado por principios compartidos, primordialmente el del interés superior de la infancia, entendido como un conjunto de acciones y procesos tendientes a garantizar un desarrollo integral y una vida digna».
Y acordaron volver a reunión el lunes 11.
Hacemos votos porque después de tres años de confrontación en torno a la reforma, iniciemos lo que debimos haber iniciado hace tres años: la negociación para resolver el problema de lamentable calidad educativa, con la participación de los interesados.
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