La Paz, junio 1, 2004.- Fuerzas combinadas del ejército y la policía arremetieron hoy contra campesinos y colonizadores que bloqueaban las vías de acceso a la ciudad de Trinidad, en el extremo norte del país, dejando un saldo inicial de dos muertos, un militar y un campesino, y decenas de heridos de ambos lados.Los enfrentamientos […]
La Paz, junio 1, 2004.- Fuerzas combinadas del ejército y la policía arremetieron hoy contra campesinos y colonizadores que bloqueaban las vías de acceso a la ciudad de Trinidad, en el extremo norte del país, dejando un saldo inicial de dos muertos, un militar y un campesino, y decenas de heridos de ambos lados.
Los enfrentamientos se produjeron, el primero, en el tramo caminero de Quiquibey y Yucumo, y el segundo en el puente de San Pablo, ambos en la carretera que une las ciudades de Trinidad y Santa Cruz.
Los efectivos militares y policiales utilizaron armas de fuego para desbloquear las rutas, pero los colonizadores y campesinos respondieron con bala, según informaron dirigentes de los trabajadores agrícolas y autoridades de la zona, que había quedado aislada por la contundencia de los bloqueos.
Colonizadores y campesinos, apoyados por la Central Obrera Departamental del Beni, exigían la renuncia del prefecto del Departamento, la electrificación de la región, la atención a demandas socioeconómicas regionales y una nueva política de hidrocarburos que beneficie a los bolivianos.
Según fuentes militares y gubernamentales, los colonizadores y campesinos habrían disparado armas calibre 22 y otras de caza, muy usuales en la zona selvática del oriente boliviano, hiriendo a ocho efectivos de la Policía y del Ejército, y causando la muerte del subteniente Saúl Coronado.
«El fallecido es el subteniente, Saúl Coronado y siete soldados heridos de la Sexta División y el subteniente de Policía, Edwin Mallea. Todos recibieron impactos de bala calibre 22 y de escopeta. No hay ninguna baja entre la población civil», dijo el subsecretario de Régimen Interior, Saúl Lara.
Entre los campesinos y colonizadores también se reportó la existencia de por lo menos un muerto y varios heridos graves. En el Hospital de Trinidad se confirmó la gravedad del enfrentamiento y el deceso del agricultor aún no identificado. «Hay muchos heridos, están llegando cada vez más», dijo uno de los médicos de turno.
Hasta el mediodía de hoy tampoco se habían reportado sobre incidentes ni enfrentamientos en otros puntos de bloqueo en el norte de La Paz, en los Yungas, ni en los caminos del Altiplano ni los valles, donde colonizadores y campesinos han tomado las carreteras exigiendo la atención a demandas socioeconómicas y la nacionalización del gas y el petróleo.
En los Yungas de La Paz, los colonizadores usaron incluso tractores para bloquear con piedras y tierra el camino que une el norte con la sede de gobierno. En Santa Cruz, otros tres grupos de colonizadores mantenían cercados los campos petroleros Víbora, Sirari y una planta de hidrocarburos. En Cochabamba, los campesinos cortaban la vía que une esta región con Oruro y Sucre. Los bloqueos se registraron a la altura de Parotani, en el Valle Bajo, y otro en proximidades de Paracaya, en el Valle Alto.
Hasta el cierre de este despacho (12:00 am) tampoco se habían registrado nuevos enfrentamientos entre la policía y maestros urbanos y rurales, que se han convertido hasta ahora en el eje de la lucha de la COB por reconquistar el dominio y la propiedad sobre los hidrocarburos, hoy en manos de las transnacionales. En la víspera, los educadores, que habían realizado bloqueos de calles y avenidas, soportaron la arremetida policial, que dejó un saldo de cuatro maestros hospitalizados (uno de ellos operado de emergencia) tras ser impactados con balines y gases, y la detención en celdas policiales de otros cinco.
Los enfrentamientos se produjeron, el primero, en el tramo caminero de Quiquibey y Yucumo, y el segundo en el puente de San Pablo, ambos en la carretera que une las ciudades de Trinidad y Santa Cruz.
Los efectivos militares y policiales utilizaron armas de fuego para desbloquear las rutas, pero los colonizadores y campesinos respondieron con bala, según informaron dirigentes de los trabajadores agrícolas y autoridades de la zona, que había quedado aislada por la contundencia de los bloqueos.
Colonizadores y campesinos, apoyados por la Central Obrera Departamental del Beni, exigían la renuncia del prefecto del Departamento, la electrificación de la región, la atención a demandas socioeconómicas regionales y una nueva política de hidrocarburos que beneficie a los bolivianos.
Según fuentes militares y gubernamentales, los colonizadores y campesinos habrían disparado armas calibre 22 y otras de caza, muy usuales en la zona selvática del oriente boliviano, hiriendo a ocho efectivos de la Policía y del Ejército, y causando la muerte del subteniente Saúl Coronado.
«El fallecido es el subteniente, Saúl Coronado y siete soldados heridos de la Sexta División y el subteniente de Policía, Edwin Mallea. Todos recibieron impactos de bala calibre 22 y de escopeta. No hay ninguna baja entre la población civil», dijo el subsecretario de Régimen Interior, Saúl Lara.
Entre los campesinos y colonizadores también se reportó la existencia de por lo menos un muerto y varios heridos graves. En el Hospital de Trinidad se confirmó la gravedad del enfrentamiento y el deceso del agricultor aún no identificado. «Hay muchos heridos, están llegando cada vez más», dijo uno de los médicos de turno.
Hasta el mediodía de hoy tampoco se habían reportado sobre incidentes ni enfrentamientos en otros puntos de bloqueo en el norte de La Paz, en los Yungas, ni en los caminos del Altiplano ni los valles, donde colonizadores y campesinos han tomado las carreteras exigiendo la atención a demandas socioeconómicas y la nacionalización del gas y el petróleo.
En los Yungas de La Paz, los colonizadores usaron incluso tractores para bloquear con piedras y tierra el camino que une el norte con la sede de gobierno. En Santa Cruz, otros tres grupos de colonizadores mantenían cercados los campos petroleros Víbora, Sirari y una planta de hidrocarburos. En Cochabamba, los campesinos cortaban la vía que une esta región con Oruro y Sucre. Los bloqueos se registraron a la altura de Parotani, en el Valle Bajo, y otro en proximidades de Paracaya, en el Valle Alto.
Hasta el cierre de este despacho (12:00 am) tampoco se habían registrado nuevos enfrentamientos entre la policía y maestros urbanos y rurales, que se han convertido hasta ahora en el eje de la lucha de la COB por reconquistar el dominio y la propiedad sobre los hidrocarburos, hoy en manos de las transnacionales. En la víspera, los educadores, que habían realizado bloqueos de calles y avenidas, soportaron la arremetida policial, que dejó un saldo de cuatro maestros hospitalizados (uno de ellos operado de emergencia) tras ser impactados con balines y gases, y la detención en celdas policiales de otros cinco.