La mitad de las páginas web más visitadas por los niños europeos no incluyen medidas de protección de datos ni mecanismos para impedir acceso a contenidos inadecuados, según denuncia un estudio encargado por la Comisión Europea en el marco de la campaña Internet segura, que gestiona la Fundació Catalana per a la Recerca. La investigación, […]
La mitad de las páginas web más visitadas por los niños europeos no incluyen medidas de protección de datos ni mecanismos para impedir acceso a contenidos inadecuados, según denuncia un estudio encargado por la Comisión Europea en el marco de la campaña Internet segura, que gestiona la Fundació Catalana per a la Recerca. La investigación, centrada en 48 páginas en 7 idiomas (tres de ellas catalanas), revela, en cambio, que las páginas catalanas e inglesas son las más responsables respecto a los menores y a su navegación.
«Las webs catalanas aprueban con buena nota, e incluso una tiene en su página principal advertencias para los padres, y otra pide permiso escrito a los padres para que sus hijos participen en los foros, y no les permiten hacerlo si no hay respuesta», asegura Silvia Sánchez, una de las investigadoras de la parte catalana, que comprendía las páginas de un famoso club infantil, una comunidad educativa y un programa de televisión.
En el marco europeo, de las webs analizadas, la mitad incluía enlaces o consejos sobre cómo navegar en condiciones de seguridad y sólo una cuarta parte aconsejaban que no se citaran con alguien que conocieran en la red sin ir acompañados de un adulto. Otras 8, con chats y fórums, no incluían ningún mensaje sobre seguridad y otras 11 disponían de contenido considerado inadecuado, como juegos e imágenes violentas, juegos de azar, apuestas o incluso enlaces a páginas de contactos.
FOTOGRAFÍAS
El estudio, que pretende sensibilizar a los proveedores de internet sobre la necesidad de proteger a los menores en la red, denuncia el caso de una ONG europea que fomenta que chicos de distintos países se conozcan a través de la red permite a los menores enviar información personal con direcciones reales, de correo electrónico y fotografías sin ningún control.
Los autores de la investigación, pertenecientes a la European Research into Consumer Affairs (ERICA), recomienda que en estos casos «la información publicada dificulte la identificación de la persona (por ejemplo, no poniendo los apellidos) en la vida real, y que se pongan moderadores en las salas de chat y los foros a fin de evitar a los pederastas.