El jefe de la NFR Manfred Reyes Villa desistió de su candidatura presidencial tras una prolongada reunión sostenida con el embajador estadounidense Greenlee en La Paz, quien habría convencido al ex alcalde cochabambino limitar sus aspiraciones a la Prefectura de Cochabamba para permitir el ascenso de Jorge Quiroga a la Presidencia de la República. Los […]
El jefe de la NFR Manfred Reyes Villa desistió de su candidatura presidencial tras una prolongada reunión sostenida con el embajador estadounidense Greenlee en La Paz, quien habría convencido al ex alcalde cochabambino limitar sus aspiraciones a la Prefectura de Cochabamba para permitir el ascenso de Jorge Quiroga a la Presidencia de la República.
Los jefes del Movimiento de la Izquierda Revolucionaria (MIR) Jaime Paz Zamora y de la Nueva Fuerza Republicana (NFR) Manfred Reyes Villa, serán los candidatos a prefectos por los departamentos de Tarija y Cochabamba respectivamente, y en las próximas horas se definirá entre los miristas Guido Añez y Hormando Vaca Diez la candidatura prefectural por el departamento de Santa Cruz dentro el esquema presidido por el ex mandatario Jorge «Tuto» Quiroga Ramírez, el mismo que cuenta con el padrinazgo directo del embajador norteamericano David Greenlee.
La información recogida por «Datos & Análisis» en fuentes altamente confiables, establece que en la víspera el jefe de la NFR Manfred Reyes Villa desistió de su candidatura presidencial tras una prolongada reunión sostenida con el embajador Greenlee en La Paz, quien habría convencido al ex alcalde cochabambino limitar sus aspiraciones a la Prefectura de Cochabamba para permitir el ascenso de Jorge Quiroga a la Presidencia de la República, en los marcos de un acuerdo que Quiroga y Reyes Villa suscribirán en los próximos días.
Dicho acuerdo es similar a un pacto alentado por el jefe del MIR Jaime Paz Zamora para controlar la Prefectura de Tarija -primer Departamento productor de gas natural en territorio boliviano-, dentro la misma estrategia orientada a garantizar la victoria electoral de «Tuto» Quiroga.
Insólitos realineamientos
En esa línea, Paz Zamora intenta reforzar su posición «tutista» al interior del MIR (donde surgió una corriente crítica ante la decisión de la cúpula mirista de abstenerse en la elección presidencial para allanar el triunfo de Quiroga Ramírez) posicionando un candidato vicepresidencial mirista y de Santa Cruz, que en tal caso podría ser el controvertido ex presidente del Senado Hormando Vaca Diez; aunque Paz Zamora tendría más preferencia por el activista de la «Nación Camba» Guido Añez. En caso de que Vaca Diez sea el acompañante vicepresidencial de Quiroga, Añez sería el candidato a Prefecto por Santa Cruz, o viceversa. Así, el MIR pretende garantizar un cerrado control partidario al menos en las estratégicas regiones de Santa Cruz y Tarija.
En el caso de Cochabamba, el realineamiento de Reyes Villa supone el ingreso a la NFR de grupos oligárquicos familiares tradicionalmente vinculados a Acción Democrática Nacionalista (ADN) del ex dictador Banzer. La familia Soriano-Cortés-Baptista se convierte en articulador del eje Tuto Quiroga – Reyes Villa mediante acciones que despliegan la ex ministra de Justicia Ana María Cortés Baptista y su hermano el ex concejal del Movimiento Bolivia Libre (MBL) Mario Cortés, otrora enemigos acérrimos de Reyes Villa a quien sindicaron de apadrinar la corrupción eneferista en la Alcaldía cochabambina. Los Cortés se retractaron de sus acusaciones y hoy aspiran a ejercer nuevamente cargos públicos esta vez bajo el padrinazgo de Reyes Villa.
Esta estratagema se consolida desde el momento en que José Orías, ex prefecto y correligionario de Quiroga, aceptó renunciar a su postulación como candidato prefectural para facilitar la campaña de Reyes Villa.
Compromisos de «Tuto»
Estas concesiones forman parte del plan elaborado por el Departamento de Estado y otros organismos internacionales influidos por Estados Unidos para impulsar la victoria electoral Jorge Quiroga, quien, además de llevar a sus últimas consecuencias la erradicación forzosa de cocales en el Chapare y la liquidación política del candidato cocalero Evo Morales -amen de impulsar el trasvase del gas natural al norte de Chile- tiene el compromiso de desactivar el juicio de responsabilidades contra el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y sus cómplices en los genocidios del 2003, razón por la cual «Tuto» cuenta también con respaldo del partido de Sánchez de Lozada, el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), además de ADN, el MIR y la NFR; es decir la misma «megacoalición» que co-gobernó hasta el 2003, paradójicamente, desmantelando el proceso de institucionalización de cargos públicos que Quiroga había impulsado durante su mandato iniciado en 1999 como sucesor de Banzer.
Bajo este esquema, Quiroga tendría bajo su control pleno, tras las elecciones de diciembre, al menos a los departamentos más importantes del país política y económicamente hablando, es decir Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, además de La Paz que es sede de gobierno.
A esta estrategia se oponen desde la misma derecha la Unión Nacional (UN) de Samuel Doria Medina con dificultades en su articulación interna; desde la izquierda un Movimiento al Socialismo (MAS) acaudillado por Evo Morales notoriamente incapaz de concertar una unidad izquierdista como exige el académico Alvaro García Linera -potencial candidato vicepresidencial-; y desde el centro un movimiento municipalista encabezado por el alcalde de Potosí René Joaquino cuya propuesta comunal es aún imperceptible como discurso alternativo.