El ex ministro de Sánchez de Lozada cobra 2.500 dólares al mes sin asistir a las sesiones del Congreso. Su suplente impulsó la alianza entre Cochabamba y Santa Cruz para sabotear las elecciones del 4 de diciembre con el pretexto de exigir más escaños. En este juego entraron también candidatos y diputados del MAS. Alberto […]
El ex ministro de Sánchez de Lozada cobra 2.500 dólares al mes sin asistir a las sesiones del Congreso. Su suplente impulsó la alianza entre Cochabamba y Santa Cruz para sabotear las elecciones del 4 de diciembre con el pretexto de exigir más escaños. En este juego entraron también candidatos y diputados del MAS.
Alberto Gasser Vargas, ministro de Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada cuando se produjo la matanza de policías amotinados en febrero del 2003, continúa cobrando su dieta parlamentaria como diputado del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) desde hace dos años, sin asistir a ninguna sesión del Congreso boliviano.
DATOS & ANALISIS verificó esta información en planillas de la Cámara de Diputados, donde el nombre de Gasser figura entre los casi 300 congresistas (incluidos suplentes) que cobrarán su dieta de octubre el próximo martes. La dieta es el emolumento que perciben los parlamentarios por sesionar tres veces a la semana y alcanza a una suma mensual, para titulares, de 20.000 bolivianos (que equivalen a 2.500 dólares/mes) sin contar otros estipendios como gastos de representación, viáticos, pasajes aéreos gratuitos y subvenciones diversas.
Gasser desapareció de la escena desde el 17 de octubre del 2003, cuando el presidente Sánchez de Lozada huyó a Estados Unidos tras la revuelta aymara de El Alto.
El ex ministro, que también es diputado por Cochabamba, no retornó nunca más al Congreso y aplicó la argucia de solicitar una injustificada «licencia» cada tres meses para seguir cobrando su dieta mediante un apoderado en La Paz. Entre octubre del 2003 y octubre del 2005, Gasser estafó al Estado aproximadamente 60.000 dólares correspondientes a 24 meses de la legislatura actual.
El suplente Majluf
Durante los dos años en que Gasser brilló por su ausencia, su suplente Oscar Majluf Covarrubias tampoco se hizo presente en las sesiones congresales; aunque también Majluf cobró como los demás suplentes una dieta mensual de 9.000 bolivianos (equivalentes a 1.100 dólares) desde el año 2002, sin haber realizado ningún trabajo efectivo en el Parlamento.
Sin embargo, Majluf apareció la semana pasada en las reuniones de la Brigada Parlamentaria de Cochabamba una vez que estalló el conflicto de los escaños y tras la resolución camaral que «mejora» las dietas de los suplentes.
Junto con el presidente del Comité Cívico Tito Vargas, el diputado suplente Majluf encabezó la delegación cochabambina que viajó al oriente para respaldar la intransigente propuesta separatista de cuatro nuevos escaños para la bancada de Santa Cruz y dos para Cochabamba, restándole sies curules a Potosí, Oruro y La Paz en conjunto. Entretanto el diputado Gasser continúa cobrando su dieta titular desde la clandestinidad.
MAS: doble discurso
Lo curioso del hecho es que parlamentarios del Movimiento al Socialismo (MAS), que conforman el 50% de la bancada cochabambina con dos senadores y ocho diputados efectivos, tenían conocimiento sobre los cobros indebidos de Gasser y más aún cuando el diputado masista Jorge Alvarado ejerció la presidencia de esta Brigada en la pasada gestión.
Los diputados del MAS no sólo pasaron por alto la argucia de Gasser sino que ahora siguen su ejemplo, incluyendo el diputado Evo Morales Ayma que postula a la Presidencia de la República. Los parlamentarios masistas de Cochabamba que son candidatos en el actual proceso electoral -como Jorge Alvarado aspirante a Prefecto junto con Edmundo Novillo y Jorge Ledesma que aspiran a la reelección en sus circunscripciones- no renunciaron a sus curules para dedicarse a sus campañas, sino que, a lo Gasser, usaron la argucia de pedir «licencia» con el fin de seguir cobrando dietas en pleno proselitismo, pese a que la Corte Electoral dispuso para el MAS, como fuerza con alta votación en las elecciones del 2002, una partida del presupuesto fiscal para gastos de campaña.
Por si fuera poco, el MAS votó para imponer como nuevo presidente de la Brigada Parlamentaria de Cochabamba al diputado suplente de la Nueva Fuerza Republicana (NFR) Néstor Bravo, ahora militante masista. De hecho, la bancada «suplente» del MAS se sumó a la estrategia que inviabilizó el viernes las elecciones del 4 de diciembre, aliándose con la bancada de NFR cuyos diputados, a la cabeza de Eloy Luján y su suplente Rina Maiz, intentan forzar la prolongación de su mandato mediante la suplantación de las elecciones generales con la Asamblea Constituyente (recién a mediados del 2006) además ante la inminente desaparición de la NFR, según las encuestas, en caso de que los comicios se lleven a cabo en diciembre.
Así pues, el MNR, el MAS y la NFR impidieron que Cochabamba, como región clave, contribuya a la solución del conflicto de los escaños, manipulando al Comité Cívico para respaldar la estrategia separatista de Santa Cruz que derivó en la postergación de las elecciones previstas para el 4 de diciembre.
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