Las juntas vecinales de la ciudad de El Alto, al igual que en las jornadas de la denominada Guerra del Agua II que se desarrollo en enero y marzo del año pasado, insisten que después de que echen a la empresa Aguas del Illimani Sociedad Anónima (AISA) se conforme una empresa social y pública, cuyos […]
Las juntas vecinales de la ciudad de El Alto, al igual que en las jornadas de la denominada Guerra del Agua II que se desarrollo en enero y marzo del año pasado, insisten que después de que echen a la empresa Aguas del Illimani Sociedad Anónima (AISA) se conforme una empresa social y pública, cuyos objetivos apunten a resolver el déficit del servicio de agua potable y alcantarillado y la reducción de las taridas de consumo.
De traidor volvieron a acusar los representantes de varias juntas vecinales al actual titular del Ministerio de Aguas, Abel Mamani, por no haber asistido al seminario donde tenía que hacer conocer formalmente su propuesta de la creación de la empresa pública, a la cual consideran como opuesta a los planteamientos que hacia Mamani en su condición de ex presidente de la Fejuve en las jornadas de enero y mayo, donde las juntas vecinales en asambleas y cabildos decidieron la expulsión de AISA.
De los cuatro expositores que fueron invitados por la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), entidad que organizó el seminario, sólo asistieron el representantes de los ex trabajadores del Servicio Autónomo Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Samapa), Reynaldo Ballón y Arturo Baltazar de las juntas vecinales que correspondían al municipio de Laja.
Severo Chambi, secretario de Defensa del Consumidor de la Fejuve, informó que el seminario fue convocado para democratizar la información hacia los representantes de las juntas vecinales, con la finalidad de que puedan conocer las propuestas que se formulan para sustituir a AISA, en la cual hay acuerdo en los alteños.
Los ex trabajadores y los vecinos que participaron en el evento convocado por la Fejuve, coincidieron en señalar que a través de la Fundación Solón, el actual ministro de Aguas ha decidido actual protegiendo los intereses de AISA, subsidiaria de las transnacional Suez. Asimismo, exigieron a los actuales dirigentes que de una vez por todas hagan cumplir la resolución del congreso de las juntas vecinales, donde determinaron que se eche del mencionado ministerio de Abel Mamani.
Las propuestas
De la exposición de la propuesta de los ex trabajadores del Servicio Autónomo Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Samapa) que fue expuesto por el Sr. Reynaldo Ballón y de la propuesta de las villas del sector ex Laja que fue expuesto por Arturo Baltazar, se coincide que se debe establecer un empresa social y pública.
Sin embargo, el representante de los ex trabajadores de Samapa plantea una empresa donde se tenga participación de las juntas vecinales de La Paz y El Alto en el Directorio, cuya presidencia debe ser alterna entre los alcaldes de la ciudad sede de gobierno y El Alto. Planteó también el establecimiento de una gerencia regional en El Alto, el cual solucionará el déficit de instalación del servicio del agua potable y la reducción de tarifas.
En cambio, la propuesta de Baltazar se diferencia en que plantea la conformación de una empresa autónoma de El Alto, al margen de la ciudad de La Paz, con su propio directorio donde las juntas, a través de representantes de los distritos, garantizarán una mayoría.
Se recomendó al comité ejecutivo de la Fejuve que envié una carta de molestar por la ausencia del titular del Ministerio de Aguas, Abel Mamani, quien en su condición de supuesto representantes de El Alto, no dio la cara ante los alteños.
Se sugirió también al comité ejecutivo de la Fejuve, la democratización de la información con la organización de seminarios que se deben realizar en todos los distritos de El Alto, donde se haga conocer la propuesta de organizaciones y dirigentes sobre el futuro organismo que se hará cargo del servicio de agua potable y alcantarillado. Asimismo, se pide que la organización matriz que agrupa a las juntas vecinales, haga los esfuerzos para imprimir boletines donde se hagan conocer los proyectos de solución al problema del tipo de organismo que remplazará a AISA.