El Ministerio de Comunicaciones de Finlandia está redactando un proyecto de ley que otorgaría a la patronal el derecho de controlar, guardar y analizar las direcciones del correo electrónico usadas por sus empleados, así como la regularidad de tal correspondencia. Hasta el momento, esa función es prerrogativa de la Policía y únicamente cuando se trata […]
El Ministerio de Comunicaciones de Finlandia está redactando un proyecto de ley que otorgaría a la patronal el derecho de controlar, guardar y analizar las direcciones del correo electrónico usadas por sus empleados, así como la regularidad de tal correspondencia.
Hasta el momento, esa función es prerrogativa de la Policía y únicamente cuando se trata de investigar algunos delitos de máxima gravedad. En los demás casos, la legislación finlandesa protege el secreto de la correspondencia y puede castigar a quien lo haya infringido con pena de prisión de hasta tres años.
Con todo, el nuevo proyecto de ley contempla que la patronal ha de tener motivos serios para vigilar la correspondencia electrónica, por ejemplo, la sospecha de que un empleado pasa los datos confidenciales a la competencia.
Según la prensa finlandesa, son las grandes corporaciones como Nokia, para las cuales tiene importancia vital la confidencialidad de los datos, las que han propuesto introducir las respectivas enmiendas en la legislación.