A los golpes llegaron este martes los parlamentarios del oficialista Partido Acción Nacional (PAN) y del opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD), para tomar la tribuna del Congreso mexicano, donde el viernes será investido como presidente Felipe Calderón.
En México, se mantiene la toma de la tribuna del Congreso por parte de los diputados del gobernante Partido Acción Nacional (PAN) y el opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD), quienes protagonizaron este martes un intercambio de empujones y golpes con el objetivo de ganar el control del estrado legislativo.
Según el reporte de la corresponsal de TeleSUR en México, Laura Simón, alrededor de la una de la tarde de este martes, diputados del PAN se precipitaron al estrado ante el rumor de que un grupo de legisladores del PRD iban a tomar posesión de la tribuna para impedir el acto de investidura del presidente electo, Felipe Calderón, el próximo viernes primero de diciembre.
Ante la sorpresiva acción de los legisladores oficialistas, los congresistas del PRD reaccionaron inmediatamente e intentaron tomar a su vez ese espacio, con lo que se inició el intercambio de empujones e incluso de algunos puñetazos.
»Lo único que estamos haciendo es defendiendo y protegiendo que esta tribuna no sea tomada. Ellos (los diputados del PRD) empezaron a subir a tomar la tribuna entonces los propios diputados, decidimos protegerla», expresó la diputada del PAN, Sofía Castro.
Los diputados »hemos protestado (jurado) respetar la Constitución, guardar y hacer guardar la Constitución y la Constitución dice que el presidente electo debe protestar ante el Congreso y estamos tratando de que no se cumplan las amenazas», afirmó Castro.
La congresista aseguró que su grupo parlamentario no tenía previsto permanecer en el estrado hasta el viernes y que esperaban resolver la situación »a través del diálogo» con las otras fuerzas políticas.
Sin embargo, Simón comentó que existen rumores que los diputados del PRD pretenden mantener el plantón el la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, hasta el día viernes.
Tras desatarse la trifulca, en medio de la sesión plenaria, el presidente de la Cámara de Diputados, el panista Jorge Zermeño, ordenó el desalojo de la Cámara y decretó un receso, pero los legisladores no han obedecido y se mantienen firmes en el lugar.
Ante la actitud de los parlamentarios, Zermeño canceló la sesión programada para mañana miércoles 29, a las 11 de la mañana.
Se espera que, según explicó Laura Simón, los coordinadores parlamentarios se reúnan para decidir las acciones a tomar para encontrar una solución al impase.
Sin embargo, los legisladores del PAN se niegan a abandonar el estrado hasta tanto los diputados del PRD desalojen la tribuna, mientras que los parlamentarios de la oposición mexicana aseguran que no dejaran el lugar hasta que sus colegas oficialistas abandonen el Congreso.
Durante la tarde se escucharon consignas por parte de los legisladores que apoyan al presidente electo, Felipe Calderón, y quienes se oponen a que se realice el traspaso de gobierno, por considerar que las elecciones del pasado 2 de julio fueron fraudulentas.
Los diputados opositores ya impidieron que el presidente saliente de México, Vicente Fox, entregara ante el Congreso su sexto y último informe de gobierno, e incluso han amenazado con boicotear la investidura de Calderón, prevista para este viernes primero de diciembre.