El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó hoy que su gobierno apuesta por autonomías que unan al país, y ratificó a grupos opositores su disposición a un diálogo que conduzca a preservar la integridad territorial. En declaraciones a la prensa desde el Palacio de Gobierno, el mandatario se dirigió a la nación para subrayar la voluntad […]
El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó hoy que su gobierno apuesta por autonomías que unan al país, y ratificó a grupos opositores su disposición a un diálogo que conduzca a preservar la integridad territorial. En declaraciones a la prensa desde el Palacio de Gobierno, el mandatario se dirigió a la nación para subrayar la voluntad de llegar a acuerdos con comités cívicos y prefectos (gobernadores) interesados en los procesos autonómicos. En ese sentido, se refirió a una reciente reunión de los cívicos y las máximas autoridades de cuatro departamentos en el sureño departamento de Tarija y afirmó que sus propuestas sobre reordenamiento territorial deben ser valoradas por la Asamblea Constituyente. También recordó que el pasado 4 de diciembre, en presencia del cardenal de Bolivia, Julio Terrazas, en el oriental departamento de Santa Cruz, con motivo de la firma de un pacto con la Iglesia católica, el ejecutivo lanzó una convocatoria a la mesa de conversaciones que no ha sido respondida. En ese sentido reiteró la siempre abierta posibilidad de negociación y adelantó que el gabinete está en disposición de garantizar autonomías no solo departamentales, sino además regionales, municipales, también para los pueblos indígenas. Para ese fin, dijo, estamos dispuestos a firmar un acuerdo a nombre de los movimientos sociales y garantizar el proceso autonómico en Bolivia. El gobierno boliviano, agregó el jefe de Estado, va a respetar el proceso autonómico, pero en el sentido de que autonomía no es división, no es separación, sentenció. Morales recordó que el gabinete mostró su disposición de dialogar con la oposición y las autoridades departamentales, incluso se citó para un encuentro a orillas del Lago Titicaca, con la participación de la sociedad civil, lo que fue desechado por los adversarios de su gobierno. Según el líder del gobernante al Movimiento al Socialismo (MAS), también la Asamblea Constituyente espera que los representantes de los partidos tradicionales acudan para debatir el polémico artículo 70, que ellos mismos han cuestionado referente a la modalidad de votación. Invitado por la red radial Erbol, que lo eligió como personaje del 2006, Morales preciso hoy también que el mayor logro de su gestión fue cumplir con las expectativas de la mayoría del pueblo boliviano. A juicio del estadista, entre esos fines sobresales la recuperación de los recursos naturales. También entre los primeros pasos del joven gobierno popular, se distingue la nueva ley de tierras. El estadista, quien reconoció que ha ido aprendiendo poco a poco de energéticos y finanzas, comunicó que los ingresos aumentarán paulatinamente con la industrialización del sector a partir del 2007, hasta alcanzar cuatro mil millones de dólares al año. Asimismo se refirió a la recientemente promulgada ley de reforma agraria, la cual distanció en alcance y calidad de la dictada en 1952, que sólo propició la creación de minifundios en el altiplano y latifundios en el occidente. En tono reflexivo, Morales indicó que para la gente que no tiene donde cultivar, adquirir un pedazo de suelo es como acceder a un puesto de trabajo, por lo que consideró fundamental este proceso para acabar con la pobreza en Bolivia. Reconoció que ha sido un tema positivo en el que participaron algunos senadores patriotas, y opinó que queda mucho por andar todavía en esa dirección, pues no ve la reforma agraria como la simple distribución de parcelas.