La caracterización del Estado boliviano y de sus autonomías será la matriz que ordenará la nueva Constitución Política del Estado. Y aunque la prensa y los analistas pierdan de vista este debate, la controversia principal en las deliberaciones que comienzan a calentarse en la Asamblea Constituyente girará en torno a la principal propuesta del MAS: […]
La caracterización del Estado boliviano y de sus autonomías será la matriz que ordenará la nueva Constitución Política del Estado. Y aunque la prensa y los analistas pierdan de vista este debate, la controversia principal en las deliberaciones que comienzan a calentarse en la Asamblea Constituyente girará en torno a la principal propuesta del MAS: la constitución de un Estado Plurinacional con autonomías indígenas.
La bancada del MAS en la Asamblea presentó el fin de semana su propuesta en borrador de la nueva Constitución que contiene 200 artículos. En líneas generales, se plantea un Congreso Unicameral; la creación de un «cuarto poder fiscalizador» de los otros tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial); autonomías provinciales, municipales e indígenas en el marco de un Estado Plurinacional, y la reelección del Presidente de la República.
Todas las fuerzas políticas desean constituir un Estado democrático plural con soberanía popular, unitario autonómico, con división de poderes, defensor de la libertad, con la igualdad y la justicia como valores fundamentales. Los disensos aparecen al momento de definir la democracia (representativa o directa y deliberativa); caracterizar el Estado social y democrático de derecho, y concebir las autonomías (indígenas versus departamentales).
Con el riesgo de caer en el esquematismo, pugnarían dos visiones, la del Estado democrático liberal representativo defendiendo la propiedad privada como valor supremo y la del Estado plurinacional, comunitario y deliberativo, que promueve la propiedad estatal, social, comunitaria y cooperativa. Lo que queda claro para todos es que la propiedad privada individual no es la única forma de propiedad que debe ser protegida por la Constitución.
Sólo el MAS plantea un «Estado comunitario plurinacional» que reconoce múltiples nacionalidades y comunidades indígenas, con territorio propio y con competencias administrativas, económicas y culturales. Este Estado admite el derecho a la libre determinación y, por tanto, a la autonomía política pero dentro de los marcos del Estado boliviano.
Las fuerzas opositoras observan que al reconocer nacionalidades se valida al mismo tiempo sus demandas de territorio, lo que abre la posibilidad de que varias naciones-territorio, en el corto o largo plazo, reclamen también el derecho internacionalmente reconocido a constituir Estados.
«Se ha entrado en una querella de palabras, cuando en realidad están en juego categorías político constitucionales del derecho internacional con efecto jurídico propio. Se confunde autonomía y autodeterminación, que son categorías distintas: la autodeterminación es el derecho a la secesión y a la independencia, mientras que las autonomías pueden funcionar en un Estado unitario», opina Jorge Lazarte, asambleísta independiente elegido por Unidad Nacional.
Para Lazarte, se embrolla también las categorías de nación con grupo étnico diferenciado culturalmente, multiculturalismo con plurinacionalismo. «Puede haber multiculturalidad en un Estado unitario, pero no puede haber un país con Estado plurinacional y al mismo tiempo unitario. Estas diferencias no están claras para muchos analistas y dirigentes del MAS».
En resumen, la primera gran confrontación que aparece sobre la visión de país es si el Estado debe ser Plurinacional o no. De esta definición se derivaría todo lo demás, incluyendo las autonomías que cambiarían el sentido del Estado unitario.
En general, las reacciones de la oposición a la propuesta del MAS presentada el fin de semana han sido negativas, pero no precisamente por el planteamiento de plurinacionalidad sino por el velado interés de prolongar el mandato del Presidente Evo Morales.
El vocero del opositor Poder Democrático Social (Podemos) José Antonio Arequipa y el constituyente y jefe de Unidad Nacional (UN) Samuel Doria Medina declararon que la propuesta oficialista está destinada a buscar la reelección de Morales. «Ahora me doy cuenta que todos esos grandes discursos de refundación del país, de hacer una nueva República y de comenzar de cero es un discurso para buscar la reelección de Evo Morales», comentó Doria Medina.
Días antes, el jefe de la bancada de Podemos en la Asamblea Rubén Darío Cuellar advirtió que el proyecto de Estado Plurinacional apunta a la «colonización aymara del territorio nacional». El asambleísta alertó que «las autonomías indígenas y campesinas que el oficialismo quiere imponer, y que no estarán enmarcadas en ninguna instancia departamental, generarán conflictos y enfrentamientos en las provincias y municipios».