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El día Lunes por la mañana, miles de pobladores de la ciudad de «El Alto» rodearon el edificio de la embajada de los Estados Unidos en Bolivia. La protesta fue[1] en contra de la impunidad plasmada en el asilo político que el gobierno de los Estados unidos concedió al ex ministro de defensa Carlos Sánchez Berzain, acusado en Bolivia junto con el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y otros, de genocidio en grado de masacre sangrienta, atentar contra la libertad de prensa, daños económicos al Estado Boliviano, emitir disposiciones contrarias a la Constitución Política del Estado, etc, etc, etc.
El jueves 5 de Junio, Sánchez Berzain, en una entrevista desde los estados Unidos a una radio local, dijo que gozaba de asilo político desde hace un año y que por esa razón no retornará al país para defenderse en la justicia Boliviana[2]. En la entrevista, Berzain dijo ser un «perseguido político» del actual gobierno y acusó al presidente Evo Morales de ser el responsable de la masacre de 2003.
Carlos Sánchez Berzain y el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, actualmente declarados «prófugos» de nuestra justicia, son acusados formalmente por el Estado Boliviano de tener responsabilidad en los hechos suscitados en Septiembre y Octubre del 2003, que dejaron 67 muertos y alrededor de 400 heridos principalmente en la ciudad de El Alto, cuando la población exigía la nacionalización de los hidrocarburos y la expulsión de las transnacionales petroleras.
Se calcula que 80,000 personas participaron en la movilización del lunes rumbo a la embajada de los Estados Unidos, que desde muy temprano estuvo resguardada por efectivos policiales. Según la prensa local, la movilización partió de la ceja de El Alto a las 8:00 de la mañana, y después de descender aproximadamente 12 kilómetros hasta ciudad de La Paz llegaron al punto previsto cerca de las 10:30. El lugar estaba resguardado por vallas metálicas que fueron colocadas a tres cuadras del edificio diplomático. Habían muchos policías antimotines, perros y los carros llamados «Neptunos», que lanzan agua para dispersar a las personas en caso de enfrentamientos[3]
Más o menos a la 1 de la tarde, después de una serie de «desencuentros» entre los manifestantes y la policía, los gases lacrimógenos comenzaron a volar por todo lado, provocando que la gente se disperse y se retire del lugar. Por suerte no se registraron mayores incidentes, aunque la represión, como no debía ser de otra manera, fue calificada de incesaría por el ministro de Gobierno, que cambio al comandante departamental de la policía por esa razón[4]. Por el contrario, la embajada de los Estados Unidos en un comunicado oficial, agradeció el resguardo policial y dijo que espera «mejorar las relaciones con Bolivia».
El embajador Goldberg no sabe nada
El canciller David Choquehuanca, que se reunió la mañana del Martes con el embajador Philip Goldberg para pedirle explicaciones sobre el asilo a Sánchez Berzain, dijo no estar satisfecho con las explicaciones del jefe de la diplomacia Estadounidense, y que el gobierno Boliviano hará los esfuerzos necesarios para que se revierta el asilo político del que goza Berzain[5].
Por su lado, el embajador Goldberg, en la única oportunidad que se dirigió a la prensa y cuestionado sobre el asunto, evitó referirse explícitamente al tema y solamente se limitó, primero a decir que no sabia nada, y segundo que el «asilo político» y la «extradición» en general, son temas legales, jurídicos y administrativos. No son temas políticos, por lo que no puede decir nada al respecto[6]. Hecho que por su puesto generó muchas criticas.
Con que argumentos consigue el asilo político Sánchez Berzain?
La Embajada Bolivia en los Estados unidos, que por supuesto investiga el tema, anunció que Sánchez Berzain no solamente habría conseguido el refugio político alegando ser perseguido político de Morales, sino que también lo acusó de apoyar el Narcotráfico[7].
En ese sentido la embajada emitió un comunicado de prensa el 10 de junio, en el que confirma por un lado el asilo político de Sánchez Berzain, y denuncia por otro, los argumentos por el que los Estados Unidos le concedió el asilo. Esos argumentos, según las propias palabras de Sánchez Berzain al momento de solicitar asilo, son:
«(…) si lograría sobrevivir un proceso que no tenga garantías legales ni de debido proceso, independencia judicial, y transparencia, me dejarían sin protección para que me pueda defender de organizaciones criminales de cocaína, que son notoriamente violentas en Colombia y en Bolivia y que están prosperando bajo el fuerte apoyo público de Evo a la producción de coca ilegal y que mantienen su presencia en Bolivia».
«(…) una vez más me encuentro bajo amenazas renovadas de un envalentonado Presidente Morales que, claramente mantiene esa vendetta en mi contra y su deseo de perseguirme en base a mis acciones en anteriores gobiernos y mi posición en contra de su apoyo a productores de coca y el narcotráfico».
Según el mencionado comunicado, «Sánchez Berzaín convierte su solicitud de asilo político en una acusación al gobierno del Presidente Morales: lo acusa de apoyar el narcotráfico». En ese sentido la diplomacia boliviana también manifiesta su profunda preocupación, y textualmente manifiesta: «si el Departamento de Seguridad interna de ese Gobierno admite la solicitud de asilo político a Carlos Sánchez Berzaín en base a los argumentos que el ex ministro presenta en dicha solicitud, el gobierno de los Estados Unidos asume como suyas no sólo las razones y argumentaciones del Ex ministro, sino sus acusaciones. El gobierno del señor Bush le ha otorgado asilo político a un individuo que acusa al gobierno del Presidente Morales de apoyar y promover el narcotráfico y «organizaciones criminales de cocaína». Esto es algo que el gobierno del Presidente Bush debe aclarar.»
Porque no se supo antes que Berzain tenia un asilo político?
La embajada Boliviana en los Estados Unidos, en su boletín 15/8 titulado «Descubierta la protección del Gobierno de los Estados Unidos a Sánchez Berzain y a Sánchez de Lozada«, informa que no se supo del estatus de «refugiado político» del individuo en cuestión, sino hasta el pasado 30 de Mayo. En esa fecha, Sánchez Berzain y Sánchez de Lozada presentaron a un tribunal de Miami una solicitud conjunta para desestimar un juicio civil que recae en su contra – juicio interpuesto en tribunales Estadounidenses por lo familiares de las victimas de Octubre de 2003, con la colaboración de juristas y activistas de los DD.HH. de ese país -, y así quitarse un obstáculo más en su camino hacia la impunidad.
Esta solicitud conjunta tiene los siguientes argumentos: el primero es que Evo Morales sería el responsable de la caída del gobierno de Goni el año 2003, y el segundo es que existió un apoyo de los Estados Unidos a Sánchez de Lozada, antes, durante y después de Octubre de 2003.
Pero un tercer argumento muy relevante en la solicitud, y que fue el motivo principal para que miles de Alteños por poco «incendien» la embajada «gringa», es que el año 2007, el gobierno de los Estados Unidos concedió el «asilo político a Sánchez Berzain» quien mantuvo la noticia en secreto, justamente hasta este 30 de Mayo.
Mentira, engaño y embauco. Por algo le dicen a Sánchez Berzain el «Zorro».
El abogado de Sánchez Berzain y Sánchez de Lozada, es asesor de Barack Obama.
El boletín de la embajada también informa que, Greg Craig, actual asesor en asuntos internacionales del candidato por el parido Demócrata, Barack Obama, (famoso también por haber sido asesor de Bill Clinton y abogado de Juan Miguel Gonzáles en la lucha por recuperar la custodia de su hijo cubano Elian), es el abogado defensor de Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berzain. Es la persona que tramitó el asilo político. Apropósito el boletín afirma «Es muy raro que un abogado que, en general, ha defendido varias causas de derechos humanos, esté ahora del lado contrario»
Craig, el 25 de Marzo participó en un seminario titulado «La política de EEUU hacia América Latina en la era post-Bush», auspiciado por el «Programa de Estudios Hemisféricos y de América Latina de la Universidad George Washington».
En este evento recibió una pregunta -que explícitamente no tenía que ver con el contenido del seminario- de un activista solidario con el juicio a Goni. La pregunta decía: «Señor Craig: el ex presidente de Bolivia Gonzalo Sánchez de Lozada (Goni), huyó de su país inmediatamente después de una masacre en la que 67 personas fueron asesinadas y más de 400 heridas. Desde entonces él vive en Chevy Chase, Maryland tratando de evitar procedimientos legales sobre su responsabilidad en este caso. Entiendo que usted está sirviendo como abogado de Goni en el juicio civil que se sigue en su contra por los familiares de algunos de los que fueron asesinados. El gobierno de Bolivia ha enviado un exhorto de extradición del ex presidente y su ministro de Defensa que será puesta a consideración del Departamento de Estado en breve. En el marco de la política hacia América Latina que usted plantea, mi pregunta es si usted cree que el gobierno de los EEUU debería honrar el tratado de extradición con Bolivia y extraditar a Goni y su ministro»
A lo que Graig respondió: «Estoy seguro que no ha hay aún ninguna solicitud de extradición presentada por el gobierno de Bolivia ante el gobierno de los Estados Unidos, pero diría que si esta solicitud de extradición se presentara, no cumple con el requisito fundamental de la doble incriminación. Porque lo que ocurrió en Bolivia, aunque trágica y por su propia naturaleza, triste debido a la pérdida de vidas humanas, se trató de la pérdida de vidas humanas como resultado de un esfuerzo -armado- para derrocar a un gobierno elegido democráticamente. Fue el resultado de ataques de manifestantes armados cuando se las fuerzas militares trataron de reabastecer la ciudad de La Paz que había estado sitiada durante varios días, o para rescatar a turistas cuyo regreso se había impedido. Por tanto, creo que, al respeto, tenemos un desacuerdo fundamental en cuanto a que si el si los términos de «masacre» -palabra que usted utiliza- o genocidio o crímenes de lesa humanidad, se pueden aplicar en este caso»
Declaraciones que hacen dar cuenta que Craig, por supuesto, tiene la verdad solamente de sus clientes y claro, que otra verdad más le puede interesar a este señor, a parte de la verdad de los que le pagan sus honorarios?
Pero esta situación le preocupa mucho a Rogelio Mayta, abogado del comité Impulsor del Juicio a Gonzalo Sánchez de Lozada, que afirma que será muy difícil extraditar a Sánchez de Lozada y a Sánchez Berzain si es que asume la presidencia al gobierno Estadounidense el candidato Demócrata Barack Obama, ya que Creig, se encontrará en un circulo de poder muy cercano al posible futuro presidente[8], que en última instancia tiene la competencia de decidir si Goni y Berzain pueden ser extraditados.
Al respecto, activistas que apoyan el juicio de responsabilidades de Goni, ha puesto en circulación un boletín titulado«Traigan a Goni a la Justicia» cuyo texto dice «Al parecer, el señor Craig no cree que el genocidio en forma de masacre sangrienta, provoca lesiones muy graves y que la privación de libertad, el abuso y la tortura, los ataques a la libertad de prensa, y hacer las reclamaciones y resoluciones contrarias a la ley (delitos por los que se acusa a Goni) son delitos en los Estados Unidos. Si el Senador Obama es elegido, el conflicto de intereses del Sr. Craig en este caso, invalidarán su asesoramiento»
Una vez más la sociedad civil y la solidaridad, demuestran ser los únicos aliados en la lucha por erradicar la impunidad.
Algunos comentarios en Bolivia sobre este «asilo político»
Pamela Ledezma, miembro de la Asamblea de Derechos Humanos y una de las impulsoras para el juicio de estas ex autoridades, con una clara impotencia, nos comentó lo siguiente
«Realmente es una falta de respeto al pueblo Boliviano que conoce los hechos que se han suscitado, y que está sorprendido porque una persona que esta acusada por delitos en contra de los derechos humanos no puede estar gozando del estatus refugiado político. Simplemente porque los hechos por los cuales se está juzgando a Gonzalo Sánchez de Lozada y sus colaboradores no tiene nada que ver con hechos políticos, sino con hechos delictivos»
El domingo en la Red de Televisión Boliviana de propiedad estatal, El Viceministro de Justicia y Derechos Humanos, Wilfredo Chávez, dijo que esta situación perjudica el proceso de extradición de Berzain a Bolivia iniciado por la Cancillería boliviana, pero que no todo está perdido.
Afirmó que existe la posibilidad de revertir el estatus de refugiado político que Berzain goza. Según su explicación, esto es posible porque el asilo político solo se da cuando existe persecución política. Y en este caso, Goni, Sánchez Berzain y todos sus colaboradores, no están siendo perseguidos por delitos políticos… están siendo perseguidos por delitos «comunes», como la violación de los derechos humanos, y por delitos económicos, como el robo de aproximadamente 2 millones de bolivianos (300,000 dólares) del Banco Central de Bolivia. Dineros que poco después fueron encontrados en poder del ex ministro de gobierno Yerko Kukoc en Santa Cruz.
«Son delitos no solamente de lesa humanidad sino que también son delitos de orden económico que ya convierten a estos señores en prófugos «comunes» de la justicia. Entonces existe bastante fundamento para que por ese tipo de delitos el señor Berzain no goce del privilegio de refugiado político» concluyó el Viceministro.
Pero el juicio en Bolivia continúa
Si bien Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ex ministros Carlos Sánchez Berzain y Jorge Berindoague, aún no pueden ser juzgados en Bolivia hasta que sean extraditados de los Estados Unidos, el juicio para los otros 14 acusados de tener responsabilidad en los hechos de Septiembre y Octubre de 2003, no se detiene. Entre estos «Enjuiciables» figuran 9 ex ministros de Goni y 5 miembros del Alto Mando Militar que ya pueden ser sentados en el banquillo de los acusados.
Todos los procedimientos requeridos por ley ya están cumplidos. Solamente falta que la Corte Suprema de Justicia Boliviana llame a juicio oral. Un último paso que se necesita para comenzar a romper una historia de impunidad no solamente en Bolivia, sino en América Latina toda.