Más de un centenar de investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en-viaron una carta a la Cámara de Diputados para solicitar a los legisladores que discuten el presupuesto federal del próximo año que garanticen suficiencia presupuestal de las dependencias sustantivas del área cultural.
Aseguran que la asignación de 3 mil 508 millones de pesos del presupuesto federal 2021 al proyecto centralista de Los Pinos-Bosque de Chapultepec no tiene sustento ni transparencia, y equivale a la cuarta parte del total fijado a la Secretaría de Cultura, a costa, además, de fondos indispensables pa-ra entidades tan imprescindibles como el INAH y el (Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), ya sometidas a recortes presupuestales desde sexenios previos y hoy en una situación precaria que impacta objetivamente su desempeño.
Argumentan que el Estado “tiene responsabilidades públicas que son irrenunciables. Los criterios en la asignación de recursos deben corresponder con el mandato popular de transformación del país orientado al bien común y a la construcción de ciudadanía.
En esa tarea, la cultura es elemento esencial y no mero espec-táculo e insumo turístico. Hacemos un firme llamado a los integrantes de la Cámara de Diputados para que garanticen la suficiencia presupuestal de las dependencias sustantivas del área.
Entre los académicos que firman se encuentran los investigadores eméritos Eduardo Matos Moctezuma, Jorge Ángulo, Noemí Castillo, Consuelo Maquivar y Antonio García de León, además de Laura Filloy Nadal, Iván Franco, Carlos García Mora, Leonardo López Luján, Bolfy Cottom, Sergio Gómez, Lina Odena Güemes, Javier Guerrero, Paul Hersch Martínez, Gilberto López y Rivas, Antonio Machuca, Carlos Viramontes, entre otros.
Lo que está sucediendo con el INAH es un desastre, señaló el antropólogo firmante López y Rivas.
El ex director de la Escuela Nacional de Antropología e Historia recordó que este año el instituto sufrió el recorte de 75 por ciento de su presupuesto, “lo cual ha afectado todo el trabajo sustancial pues, al mismo tiempo, los recursos autogenerados, que se dan por las visitas a museos y zonas arqueológicas, están suspendidos por la pandemia.
Hay una deuda acumulada que el INAH arrastra desde hace meses, lo cual hace de ésta una situación catastrófica. Por eso vemos de manera muy crítica que del próximo presupuesto que se va a destinar al sector cultura, una buena parte se va a ir al proyecto consentido en el entorno presidencial: Chapultepec, ¡es indignante!
Gilberto López y Rivas explicó en entrevista con La Jornada que en algunos centros del INAH ya se dio la instrucción de apoyar a lo mucho un proyecto de investigación, de la veintena que normalmente se tienen pendientes.
“Centenares de investigadores se encuentran en precarización, particularmente quienes están con esos contratos que se suspenden cada determinado tiempo para que no tengan prestaciones, son los adscritos al llamado capítulo 3 mil.
“No hay dinero para prácticas de campo o para las escuelas que tienen un gran prestigio por ser el alma mater de especialistas de toda América Latina. No se pueden contratar profesores, hay desconcierto y total incertidumbre.
Desgraciadamente, las autoridades, tanto del INAH como de la Secretaría de Cultura, brillan por su ausencia en cuanto a la defensa de esos presupuestos y obedecen los recortes. No ha habido ninguna actitud digna ni decorosa.
Todo lo anterior, afectará también el empleo de las futuras generaciones de arqueólogos, antropólogos y de todas las disciplinas.
Aseguró que la campaña para hacerse escuchar continuará con la publicación de más cartas y artícu-los donde denuncian la situación y se oponen activamente a otros megaproyectos como el Tren Maya.
Fuente: https://www.jornada.com.mx/2020/10/14/cultura/a05n1cul