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Razones para luchar por la Secundaria Popular

Fuentes: Rebelión

La Universidad tiene como finalidad esencial servir al pueblo, contribuyendo con su quehacer diario a la formación de hombres calificados en la ciencia, la técnica y la cultura, que eleven cualitativamente los valores y costumbres sociales.

Ley Orgánica de la UMSNH

En el año de 2021, la rectoría de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), principal centro educativo de nivel superior en el estado de Michoacán, México, inició un juicio para despojar de su histórico edificio a la Secundaria Popular “Carrillo Puerto” que, desde su fundación en 1976, ocupa el inmueble ubicado en el ala norte del Colegio de San Nicolás de la UMSNH (Preparatoria 1). En el año de 2023, la universidad reitero la amenaza de despojo y desalojo del edificio, pero ahora con opción de utilizar la fuerza pública contra estudiantes, profesores y padres/madres de familia.

La Secundaria Popular es un proyecto de educación autogestivo del nivel medio básica. “La Popular”, como se le conoce, atiende en el actual ciclo escolar a 170 estudiantes provenientes de colonias populares y marginadas de la ciudad de Morelia, Michoacán. Un porcentaje importante de la matrícula de la secundaria está conformada por adolescentes segregados, expulsados o rechazados del sistema público de educación por sus condiciones socioeconómicas o perfiles psicopedagógicos. La Secundaria no recibe ningún tipo de apoyo económico, subsidios ni financiamiento de organismos públicos, privados, ONGs o Asociaciones Civiles. Se mantiene por el trabajo voluntario tanto de la planta docente y administrativa, así como por el modelo escolar que involucra a los estudiantes en la organización de los deberes escolares.

Pese a la gran labor social y educativa que ha desarrollado la Secundaria Popular por casi medio siglo, las autoridades de la UMSNH intentan justificar el despojo de las instalaciones argumentando que la Secundaria Popular utiliza el inmueble de forma indebida. El segundo argumento de las autoridades universitarias arguye que la Dirección Coordinadora de la secundaria lucra con la posesión del edificio. El tercer argumento pretende responsabilizar a la comunidad de La Popular por el deterioro de la infraestructura del inmueble. Por último, se argumenta que el Colegio de San Nicolás, ubicada a espaldas de la Secundaria, requiere mayor cantidad de aulas derivado de un incremento de la matricula del bachillerato.

Sin embargo, en dos años de litigio, la autoridad universitaria no ha logrado demostrar ni uno solo de sus argumentos. Primero, es de conocimiento público que la Secundaria Popular utiliza el edificio en su posesión para impartir clases matutinas y vespertinas de nivel medio básico a estudiantes de escasos recursos. En otras palabras, las labores sustanciales de la secundaria son la docencia y el desarrollo de actividades académicas, lo cual no contraviene los fines de la Universidad Michoacana. Además, la secundaria tiene por objetivo poner al alcance de los sectores populares el derecho a la educación, es decir “servir al pueblo”, tal como lo apunta la Ley Orgánica de la UMSNH en su artículo 4.

En segundo lugar, se sabe que durante los 47 años de historia la Secundaria Popular no cobra ningún tipo de cuota o cooperación para su sostenimiento, ya que se reconoce que las erogaciones económicas de las familias representan mecanismos de exclusión de los estudiantes de orígenes populares. En cambio, la Secundaria Popular se mantiene por medio de llevar a la practica el principio guevarista del trabajo voluntario. Profesores, personal de apoyo o talleristas contribuyen de forma solidaria con las labores y actividades académicas, administrativas, deportivas o culturales. Decenas de activistas, profesionistas o pasantes de licenciatura se forman no solo como educadores y educadoras en las aulas de La Popular, también se reeducan en el espíritu de la solidaridad de clase. Las y los educadores de la Secundaria reconocen con su labor que las y los egresados de las universidades públicas tienen una deuda con la clase trabajadora que es quien produce la riqueza con la que se paga su formación universitaria, de aquí que su trabajo pretenda retribuir un poco a la clase trabajadora por medio de hacer accesible el derecho a la educación a las hijas e hijos de los trabajadores.

En tercer lugar, después de 47 años es natural que el edificio de la Secundaria Popular se encuentre deteriorado, sin embargo, es la propia Universidad Michoacana por medio de las distintas regencias del Colegio de San Nicolás de Hidalgo o de la oficina de Patrimonio Universitario quien se ha negado a restaurar el edificio donde se alberga La Popular. El objetivo de la alta burocracia universitaria es claro, premeditadamente permitir el desgaste del edificio para justificar el desalojo.

Finalmente. Sobre la necesidad de aulas para ampliar la matrícula de la preparatoria 1, también es del conocimiento público que Michoacán atraviesa una crisis de demanda en el nivel de bachillerato o medio superior, y el bachillerato universitario no es la excepción. Según el director de Educación Media Superior del Instituto de Educación Media Superior y Superior (IEMSyS) dependiente de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE), Ricardo Álvarez Mosqueda, entre los años de 2021 y 2022, 35 mil jóvenes dejaron de estudiar en la entidad, lo que representó el 20 por ciento de matrícula en educación media superior en Michoacán. Además, las mismas autoridades universitarias han reconocido que desde el año de 2018, el bachillerato universitario se encuentra en una crisis de demanda[1]. El 27 de abril del presente año, la directora de Control Escolar de la UMSNH, Josefina Valenzuela Gandarilla, informó que aun existían 5 mil 400 espacios disponibles para el nivel medio superior, esto después de cerrar la primera convocatoria de ingreso al presente ciclo escolar[2].

¿Cuál es la motivación real para intentar despojar a “La Popular” de su histórico inmueble? Aunque es complicado tener certeza sobre los motivos reales de las autoridades universitarias, estamos convencidos de que estos se encuentran enraizados en sus concepciones neoliberales de la educación. Pese a ser funcionarios emanados del gobierno de la autonombrada Cuarta Transformación (4T), es palpable que sus concepciones sobre la función social de la educación y la universidad están preñadas con visiones y principios empresariales.

En la práctica los altos funcionarios universitarios conciben a la educación como un negocio o una fábrica de títulos o bien un espacio de formación de “capital humano”, de ahí la simpatía y promoción de la idea de la excelencia o calidad educativa, las acreditaciones o evaluaciones del sistema público de educación por organismos privados como el Ceneval, o la administración de las escuelas públicas como empresas privadas, todas estas practicas inauguradas con el modelo educativo neoliberal.

La lucha por la secundaria popular significa la disputa entre dos proyectos. El primero, entiende la educación como instrucción, como una herramienta enajenante para formar los engranajes que requiere la acumulación de capital: el segundo, entiende que la educación es un derecho humano que permite, como lo diría José Martí,
 “depositar en el hombre [y mujer] toda la obra humana que le ha antecedido; es hacer a cada hombre resumen del mundo viviente, hasta el día en que vive: es ponerlo a nivel de su tiempo, para que flote sobre él, y no dejarlo debajo de su tiempo, con lo que no podrá salir a flote, es prepararlo para la vida”. Es evidente que la burocracia universitaria defiende el primero, y que los 47 años de la Secundaria Popular son consecuentes con el segundo, que no sobra decirlo, se inscribe dentro de los principios del verdadero nicolaicismo.

Para más información consultar la siguiente página: https://www.facebook.com/SecuPopular

Notas:

[1] Consultado en https://www.lavozdemichoacan.com.mx/morelia/crisis-en-el-bachillerato-de-la-umsnh/

[2] Consultado en https://www.lavozdemichoacan.com.mx/michoacan/umsnh/universidad-michoacana-mantiene-abierta-su-convocatoria-para-el-ciclo-escolar-2022-2023/

Lenin Contreras-Piña es miembro activo del proyecto autogestivo de educación popular Secundaria Popular “Carrillo Puerto” y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria-México 

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.