El entusiasmo con el que grupos sociales de México y América Central impulsan el Llamado Mundial a la Acción contra la Pobreza (GCAP, por sus siglas en inglés), a realizarse el martes y el miércoles próximos, no alcanza para remontar el escaso interés de la población en la iniciativa.
En la zona mesoamericana, que conforman México y los países vecinos centroamericanos, habrá manifestaciones callejeras, foros académicos y estudiantiles y diversos actos culturales. Sin embargo, no se espera que se reúnan contingentes masivos, como sí sucede periódicamente con otro tipo de expresiones de corte político o sindical.
El bajo impacto del GCAP se origina en «condiciones políticas e institucionales» y en la actitud de «unos medios (de comunicación) y un mercado que no se mueven por la pobreza», dijo a IPS Karin Slowing, coordinadora para Guatemala del Informe de Desarrollo Humano del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
La mayoría de los principales medios de comunicación de la región dieron hasta ahora poco o nulo espacio al GCAP, mientras que los gobiernos y los dirigentes políticos prácticamente han ignorado el tema. Algo similar sucedió hace un año en toda América Latina.
«No hemos logrado que la población y especialmente los jóvenes se apropien de la iniciativa, pero no nos desanimamos y seguiremos adelante», señaló a IPS Mariaoliva González, portavoz en México de la Red Global de Acción Juvenil, que convocó para el miércoles próximo a jóvenes a rodear con una manta blanca el monumento a la Independencia erigido en la capital del país.
La región mesoamericana, que los gobiernos identifican como los nueve estados del sudeste mexicano más Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, tiene un millón de kilómetros cuadrados y es habitada por unos 70 millones de personas, en gran parte pobres.
«Propuestas como el GCAP no calan porque son demasiado generales, no tienen un contenido político claro y no tocan la piel del ciudadano», indicó a IPS Humberto Zapata, un politólogo recién egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México
A pesar del escaso impacto que podría tener la iniciativa en la región este año, se espera que en conjunto se movilicen en el mundo cerca de 50 millones de personas, lo cual será registrado en el libro Guinness de los récords. La fecha de los diversos actos se hace coincidir con el 17 de este mes, que es el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza.
El GCAP es impulsado desde el año pasado por agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero su origen está en el Foro Social Mundial de 2005, celebrado en la meridional ciudad brasileña de Porto Alegre.
La propuesta, que se mantendrá vigente hasta 2015, apunta a llamar la atención sobre el cumplimiento de los ocho grandes Objetivos de Desarrollo de la ONU para el Milenio, definidos en 2000 y tomando como base los indicadores de 1990.
Ente las metas a alcanzar están la de reducir a la mitad la proporción de indigentes y hambrientos del mundo, así como lograr mejoras en materias de alimentación, salud, educación, ambiente, desarrollo e igualdad de género.
En los países mesoamericanos, diversas organizaciones hacen esfuerzos por dar al GCAP un contenido local con la intención de que trascienda.
Por ejemplo, la coalición salvadoreña del GCAP, integrado por una 30 agrupaciones sociales, demanda «el combate a la evasión fiscal de la gran empresa y la corrupción».
El grupo presentará la semana venidera un anteproyecto de ley al respecto, luego realizará una concentración en la Alameda Juan Pablo II, una de las arterias más transitadas de San SAlvador. Se reclamará «una reforma tributaria que garantice la persecución de la evasión fiscal», y que el Estado asigne fondos para quienes «viven en pobreza», señalaron sus portavoces.
Jeannette Alvarado, directora de la Fundación Maquilishuatl, que integra el GCAP, declaró a IPS que en su país existen suficientes recursos económicos, pero adujo que «están concentrados» y que «la evasión fiscal contribuye a mantener los niveles de pobreza».
La agrupación asegura que la corrupción y evasión alcanzó unos 2.000 millones de dólares en 2006, mientras que la inversión en salud y educación programados por el gobierno para este año apenas supera los 831 millones de dólares.
En Nicaragua, considerado el segundo países más pobre de América Latina después de Haití, las acciones en el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza estarán a cargo de la no gubernamental Coordinadora Civil, que aglutina a más de 300 organizaciones no gubernamentales.
Georgina Muñoz Pavón, una de las portavoces de ese grupo, declaró a IPS que realizarán los días 16 y 17 varios encuentros académicos y culturales en Managua.
De uno de ellos saldrá un pronunciamiento dirigido a los gobernantes, empresas privadas y grupos económicos, que será repartido en las calles por voluntarios. En el documento llamarán a solidarizarse con los más pobres de este país centroamericano, donde más de 45 por ciento de sus 5,1 millones de habitantes sobreviven con menos de dos dólares diarios.
«La propuesta es seguir fortaleciendo la idea de que sólo juntos podemos derrotar la pobreza», expresó Muñoz.
En Guatemala, donde poco más de la mitad de la población es pobre, se convocó a una caminata en la capital, que desembocará en la sede del gobierno. Allí se programa hacer una «lectura de testimonios» por parte de representantes de familias en extrema pobreza, indicó a IPS el francés Paul Marechal, de la organización Movimiento Cuarto Mundo.
«El corazón del día serán los testimonios de las personas, porque ellos son los expertos en pobreza», subrayó Marechal.
Para el día 17 y bajo el lema «Allí donde hay hombres condenados a vivir en la miseria, los derechos humanos son violados», se realizará un taller con personas que viven en situación de extrema pobreza.
En otras localidades de Guatemala, como Escuintla, Quetzaltenango, Solola (sur), Puerto Barrios (norte) y Chimaltenango (centro), están previstos actos culturales y exposiciones.
En México, la iniciativa CGAP incluirá talleres en varios centros de educación y en algunas oficinas privadas. Además, habrá conciertos de música y otros actos culturales. La mayoría de las actividades se realizará en la capital.
* Con aportes de Inés Benítez (Guatemala), Raúl Gutiérrez (El Salvador) y José Adán Silva (Nicaragua)
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