La impugnación de los comicios realizados el domingo pasado se apegará a la legalidad porque está de por medio la defensa de la democracia en México, la limpieza del proceso electoral, que arrojó la compra de millones de votos, expuso ayer Andrés Manuel López Obrador. «Hemos actuado y vamos a seguir actuando de manera responsable, […]
La impugnación de los comicios realizados el domingo pasado se apegará a la legalidad porque está de por medio la defensa de la democracia en México, la limpieza del proceso electoral, que arrojó la compra de millones de votos, expuso ayer Andrés Manuel López Obrador.
«Hemos actuado y vamos a seguir actuando de manera responsable, con apego al procedimiento legal; nadie puede decir que estamos violentando la ley; estamos haciendo uso de nuestros derechos constitucionales, estamos defendiendo la democracia, el voto de muchos ciudadanos que quieren un cambio verdadero, que no quieren que esta situación de antidemocracia, donde gana el dinero, se imponga a través de trampas y graves violaciones a la Constitución».
El candidato presidencial del Movimiento Progresista ofreció ayer una conferencia de prensa en su casa de campaña. En el sitio donde habitualmente se encuentra el retrato de Benito Juárez García, las paredes y muros fueron tapizados con cientos de tarjetas de débito Soriana, las mismas que han provocado la controversia en torno a la compra del voto.
El silencio del PAN…
López Obrador reveló que los dirigentes nacionales del Partido Acción Nacional (PAN) no defienden el voto ni la democracia; ahora negocian -repuso- con el PRI: «Me llama la atención que (los panistas) no están hablando de que se limpie el proceso a pesar de todas estas evidencias. Lo digo de manera respetuosa: en el PAN ha habido muchas traiciones arriba, muchas canalladas, maltrato a la candidata (Josefina Vázquez Mota), todo es del dominio público».
Acompañado por Ricardo Monreal, Jesús Zambrano y Luis Walton consideró lamentable que los dirigentes de Acción Nacional dejen solos a quienes votaron por ellos. «Votaron por el PAN y no por el PRI; votaron por el PAN y muchos no votaron por Peña Nieto… y los dirigentes (panistas) tienen que defender esos votos; no están diciendo absolutamente nada, y estoy hablando del partido de Manuel Gómez Morín, del partido que siempre ha defendido la democracia, que siempre ha estado en contra de estas irregularidades… ¿dónde están? Nosotros sí vamos a defender los votos, sí vamos a defender la democracia».
Los reporteros que asistieron a la casona de San Luis Potosí y Córdoba, en la colonia Roma, preguntaron con insistencia al candidato sobre el tipo de acciones que emprendería si las autoridades electorales confirman el triunfo a Peña Nieto.
«Vamos por partes, éste es un camino largo que desde luego tenemos que recorrer, porque se trata nada más y nada menos que de la democracia en México», les contestó.
-¿Cuántos votos fueron comprados? -se le preguntó.
-Se está haciendo un análisis minucioso y se está sacando toda la información. Son millones de votos. Vamos a buscar una aproximación a partir de un análisis que estamos llevando a cabo. Sin duda no hablamos de miles, hablamos de millones de sufragios.
La conferencia de prensa se inició con una exposición de Ricardo Monreal, quien adujo la insatisfacción del Movimiento Progresista por el recuento de votos realizado en el IFE. «No es un ejercicio completo, suficiente ni claro. Creemos que el instituto ha dejado pasar una gran oportunidad para limpiar la elección».
El coordinador de la campaña presidencial del Movimiento Progresista refirió que las tarjetas de débito Soriana que se encontraban tapizando las paredes de la casa de campaña fueron entregadas por personas que, quizá arrepentidas, reflexionaron «sobre el daño que le infligieron a la democracia nacional».
En seguida, López Obrador dijo que su equipo cercano recaba información y testimonios sobre el significado del uso del dinero para la compra del voto.
-El PRI dice que es montaje…
-Bueno, creo que es mucho cinismo de parte de ellos. Es del dominio público, hablamos de millones de votos comprados, y si se tratara de la compra del sufragio en un municipio o en un pueblo, entonces se podría ocultar el crimen. Pero se trata de la compra masiva del voto a través de tarjetas que no sólo se utilizaron en el estado de México, sino en otros estados. Además, utilizaron otros mecanismos de compra: dinero en efectivo, entrega de despensas, materiales de construcción, artículos domésticos.
«Eso significó una operación bien diseñada, deliberada, desde luego deshonesta y antidemocrática. Sólo les puedo decir a estos señores cínicos y corruptos que nunca nosotros hemos comprado un voto, jamás hemos entregado una despensa a cambio del sufragio».
-¿Cuál es la demanda para la apertura de todas las casillas?
-Que se limpie la elección, porque es una exigencia de los ciudadanos… la compra del voto con tarjetas se dio a conocer desde hace algún tiempo; presentamos una denuncia ante el IFE en febrero sobre este tema, se presentaron pruebas, incluso se propuso un mecanismo para evitar que esto siguiera y las autoridades del instituto y del tribunal electoral no hicieron caso, no se hizo nada y ahora salió todo porque estaban y siguen estando muy nerviosos y desesperados. Esta es una especie de irresponsabilidad, porque pensaron que se tenían que apoderar de la elección.
No faltó la pregunta de si convocará a la movilización social, y respondió. «Están nerviosos porque pensaron que íbamos a actuar de otra manera, y dijimos: ‘vamos a seguir el procedimiento legal’. Quisieran que habláramos hacia el futuro, es decir, que en una conferencia de prensa como ésta les definiéramos la derrota. ¡No! Vamos poco a poco, porque es un asunto muy serio. Hemos decidido buscar la vía legal y en eso estamos».
Por último, insistió en que deben abrirse todos los paquetes y que se limpie la elección, porque «se trata de defender principios, ideales y la dignidad».