El reconocido grupo cubano Hoyo Colora’o vuelve a ser noticia. La propuesta de esta ocasión es Johnny la mula, su más reciente producción audiovisual exhibida por la televisión cubana y nominada a dos categorías al Festival del video clip cubano: rap, hip hop y dance y animación. Johnny la mula se escribió inmediatamente después de […]
El reconocido grupo cubano Hoyo Colora’o vuelve a ser noticia. La propuesta de esta ocasión es Johnny la mula, su más reciente producción audiovisual exhibida por la televisión cubana y nominada a dos categorías al Festival del video clip cubano: rap, hip hop y dance y animación.
Johnny la mula se escribió inmediatamente después de encontrarnos en una cafetería con uno de esos personajes que a menudo aparecen con sus dientes de oro, acento importado y pocas neuronas nos comentó Karoll Williams Pérez Zambrano, director, cantante y compositor de Hoyo Colora’o en entrevista exclusiva para Cubasí.
El también creador del clásico antibelicista Di que no, confesó que lo más importante para Hoyo Colora’o es que el público además de mover los pies reciba los textos, «esto es pa´que bailes pero pa´que entiendas».
VEA MULTIMEDIA DE HOYO COLORAO
Para conocer más de las ambiciones y trayectoria musical de Hoyo Colora’o esta reportera les propone un encuentro digital con Karoll Williams.
-Explica el tránsito de tus estudios de pintura, tu afición a las nuevas tecnologías y el diseño, el proyecto doble 9, tu trabajo como caricaturista y finalmente Hoyo Colora’o.
-En realidad no ha sido una sucesión de aficiones. Yo cursé la carrera de Pintura en la Academia San Alejandro desde el año 93 al 96, mientras tanto tuve la oportunidad de colaborar con los Joven Club de Computación como diseñador y realizador de animaciones cortas. Las cosas se fueron mezclando, hasta el punto de graduarme con una tesis atípica para la Academia, que mezclaba los conocimientos plásticos con el uso de las nuevas tecnologías.
«También por esa época me divertía haciendo caricaturas y colaboraba esporádicamente con Palante, el periódico El Habanero, DEDETÉ, entre otros.
«Tengo un amigo de la infancia, Yordi Hechevarría, con el cual pasaba las noches inventando canciones. Siempre que nos preguntaban por el nombre de nuestro dúo decíamos Doble nueve, ya que los vecinos nos peleaban tanto por no dejarlos dormir, que éramos como la ficha de dominó que nadie quiere tener. Así, como en un juego, salieron unos cuantos temas que de pronto las personas tarareaban. Algunos de ellos me marcaron tanto que los he arreglado y hoy son parte del repertorio de la banda.
«Un buen día se me acercó Humberto Escuela, que tenía algo así como una discoteca móvil y me propuso hacer algo más en serio con todas esas canciones. Les pusimos algo de música en la computadora y empezamos a experimentar.
«En nuestro barrio viven muy buenos músicos, así que tuvimos siempre mucha colaboración en cuanto a arreglos, instrumentaciones… Así vino al mundo Di que no. Un tema que no imaginamos alcanzaría la popularidad que tiene y que hizo que nos planteáramos nuestro experimento más en serio y conformáramos lo que es hoy Hoyo Colora’o».
-Háblame de los integrantes actuales del grupo.
-Tenemos una banda muy completa, donde todos somos amigos y hay una verdadera «democracia musical». Cuando montamos algo nuevo todos los músicos aportan, cosa que nos complace, pues cada cual se siente autor de lo que ejecuta y eso hace que se ejecute bien. Por lo general suelo escribir los temas que hacemos, aunque también hay excelentes canciones de Ivette Pacheco (guitarrista y cantante). Además de ella, están Humberto Escuela (co-director, DJ), Mitzkin Rivero (bajo), Manuel Cabrales (saxos), Ronel Aguilera (trompeta), Robiesky Álvarez (drum), Albertico (teclados) y Alain Ayestarán (voz led y tres).
-¿Qué te mueve a llevar un tema a video clip?
-Sucede que cuando terminas de grabar algo, en ocasiones ya sabes que ese tema necesita un video o que se enriquecería artísticamente apoyado con imágenes. A mi modo de ver, cuando un creador se propone una composición pensándola musicalmente y a la vez visualmente, el resultado es mucho más genuino y coherente.
«Hay otras canciones con los que uno se siente en deuda. Eso me, pasó por ejemplo, con Di que no, un tema que siempre me complació, pero que luego de un año de grabada sentía que no había cumplido su cometido en los medios radiales. Así que pensé que quizás un clip podría darle algo más de atractivo y de esa forma hacer que el mensaje llegara a más personas. Por suerte así sucedió y nos dio la felicidad del aplauso de la gente».
-¿Cómo es el proceso de creación de Hoyo Colorao desde que tienen en mente una letra para una canción hasta que vemos ese producto acabado en un excelente video clip como este último del Johnny?
– Yo no me propongo una letra. Me considero un cronista social que toma del medio circundante todo aquello que pueda ser convertido en un producto artístico. Tenemos canciones que hablan lo mismo de las guerras que de las suegras o los chismes del barrio.
«Humberto y yo conversamos mucho y en varias ocasiones las letras han salido de situaciones comunes en las que terminamos diciendo a esto hay que hacerle una canción. Así pasó con Johnny la mula, que se escribió inmediatamente después de encontrarnos en una cafetería con uno de esos personajes que a menudo aparecen con sus dientes de oro, acento importado y pocas neuronas diciendo que son esto y lo otro, y que Tom is a boy, Mary is a girl.
«Luego viene el largo proceso de la producción del video, que consume varios meses antes de que pueda verse el producto terminado en la tele. En la medida que avanzamos vamos organizando ideas, corrigiendo el guión y casi siempre terminamos borrando y rehaciendo escenas hasta sentirnos complacidos.
«Los primeros jueces de nuestros videos son los propios músicos de la banda. Ellos van y vienen, aportan, critican. En fin que pasamos un período de gestación colectivo ante cada reto que nos trazamos».
-Hoyo Colora’o es un grupo que ve más allá de sus narices, por ello entre sus creaciones se encuentran temas que se cuestionan la realidad y no permiten una visión complaciente del mundo (Di que no, Johnny la Mula y otros). ¿Por qué esa necesidad en tus composiciones?
– Nosotros no creamos Hoyo Colora’o para pegar la canción del verano, ni aparecer en un video rodeado de mujeres semidesnudas sobre un descapotable alquilado. Para nosotros es muy importante que el público reciba nuestros textos y si en el proceso se le mueven sus pies mejor aún. Nuestras canciones simplemente aparecen, solo basta abrir la puerta y mirar afuera para encontrar, como dijera Guillén, muchos Motivos de Son.
«Claro, la realidad no siempre suele ser de terciopelo y no se puede estar de espaldas a fenómenos como las guerras contra personas indefensas o acciones que laceren la dignidad individual. En Di que no somos muy claros en que no es solo criticar, sino abrir los ojos a la gente en que ‘chamaco tuyo puede ser el que salió en primera plana esta mañana, muerto e´bala…’, y esto vale tanto para la victima como para el victimario.
«Hay también realidades locales que cuestionamos en nuestras canciones, como la burocracia, la corrupción, ese racismo subterráneo que aún marca a nuestra sociedad. Nosotros somos, en fin, personas que sufrimos, reímos, aprobamos o cuestionamos, solo que por medio de la música. Eso sí, nunca hacemos una canción por encargo, como algunos piensan».
-En mayo del 2006 lanzaron un CD titulado Todo se sabe. Comenta sobre los resultados de este álbum. ¿Tienen pensando otra producción discográfica?
-Todo se sabe fue nuestra ópera prima. En ella recogimos casi todos los temas nacidos de los experimentos iniciales que te comentaba.
«Tuvimos la suerte de que, en cuanto se produjo el álbum, la casa discográfica alemana Plaene Records lo obtuvo bajo licencia y lo ha estado promocionando y comercializando con creciente éxito en Europa. A partir de eso la disquera decidió producir también un sencillo con Johnny la Mula, tanto en CD como en Vinilo.
«Nosotros estamos muy contentos con todos los cortes que allí quedaron y ya estamos trabajando en los temas que conformarán una segunda entrega de Hoyo Colora’o».
¿El centro de expresión de Hoyo Colora’o sigue siendo el hip hop?
-Sí, utilizamos el hip hop como centro de todo nuestro trabajo, aunque preferimos denominarnos una banda de fusión.
«Cuando escuchas nuestros arreglos, que incluyen percusión cubana, cuerda de metales y voces soneras te das cuenta de que no estás ante lo que pudiera denominarse como puro hip hop, sino el resultado de su mixtura con nuestro legado musical. Yo creo que Hoyo Colora’o está más cerca de Faustino Oramas que de la música urbana norteamericana».
-¿Qué piensas del regaetón cubano?
-Yo pienso que hay valiosos artistas enfrascados en hacer un regaetón cubano. No soy de los que lo discrimina como género musical, aunque comparto con quienes critican la poca calidad de algunos textos. Hemos tenido en nuestro país muchísimos autores que hay coqueteado con la picardía criolla en sus temas sin tener que rozar la vulgaridad. Tampoco es saludable utilizar patrones importados, ni poses que nada tienen que ver con nuestra idiosincrasia.
«Lo que no podemos olvidar los músicos cubanos es que tenemos una de las herencias musicales más ricas del mundo. A nosotros nos copian, así que no hay necesidad de que copiemos a los demás»
http://musica.cubasi.cu/DesktopDefault.aspx?SPK=160&CLK=175204&LK=1&CK=90186&SPKA=38