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Los movimientos sociales, una vez más, escriben historia

Bolivia digna avanza hacia su refundación

Fuentes: Alai-amlatina

El viejo reloj del Palacio Legislativo de La Paz marca las 12h55 horas de ayer. El Presidente de la República, Evo Morales Ayma, no puede contener la emoción y llora, los dirigentes de los movimientos sociales se confunden en un abrazo, los miles de marchistas gritan de júbilo y hacen flamear sus banderas y wiphalas, […]

El viejo reloj del Palacio Legislativo de La Paz marca las 12h55 horas de ayer. El Presidente de la República, Evo Morales Ayma, no puede contener la emoción y llora, los dirigentes de los movimientos sociales se confunden en un abrazo, los miles de marchistas gritan de júbilo y hacen flamear sus banderas y wiphalas, los mineros hacen detonar sus dinamitas y los campesinos hacen escuchar sus pututus. Es un día histórico para Bolivia porque el Congreso Nacional aprobó por dos tercios la convocatoria a referéndum sobre la Nueva Constitución Política del Estado para el 25 de enero de 2009.

«A partir de este momento todos empezamos la campaña para aprobar con el cien por ciento la nueva Constitución Política del Estado», dijo el Jefe de Estado, ante miles y miles de personas que luego de marchar hicieron vigilia toda la noche en la plaza Murillo.

El Presidente de la República destacó que con una nueva carta magna se constitucionalizarán varios beneficios como la Renta Dignidad, el Bono Juancito Pinto o la Nacionalización de los Hidrocarburos.

Las autonomías departamentales -como indígenas y municipales- están garantizadas y constitucionalizadas y, en un acto de justicia se reconoce a Bolivia como un Estado Unitario Social de Derecho, Plurinacional, Comunitario, Soberano, Intercultural y con Autonomías.

Al saludar la lucha y compromiso de los movimientos sociales, Morales Ayma, expresó: «La refundación de Bolivia nos ha unido…Saludo la decisión de la COB de unirse a la CONALCAM».

La marcha desde Caracollo (Oruro) hasta La Paz estuvo encabezada por los principales dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB) y la Coordinadora Nacional para el Cambio (CONALCAM); en torno a ellas, participaron más de 95 organizaciones sociales de todo el territorio nacional.

Se hace camino al andar

Después de caminar 190 kilómetros en ocho días, pasar hambre y sed en comunidades ubicadas por encima de los cuatro mil metros sobre el nivel del mar, dormir a la intemperie en el altiplano frígido y soportar una campaña mediática satanizándolos como los «cercadores» de la democracia, miles y miles de bolivianos y bolivianas, arribaron ayer a La Paz.

Como si se tratara del despertar de un gigante dormido, orgullosos de su cultura, luciendo sus vestimentas y acompañados por su música y tradiciones, los representantes de los movimientos sociales a su paso no sólo recibieron comida ni bebida, sino sobretodo, solidaridad.

La marcha, la más grande de la historia democrática del país -en pleno centro neurálgico de la política boliviana- se convirtió en una fiesta multicultural y multiétnica que deslumbró a propios y extraños.

Hace una semana, ningún político, mostraba el interés de encontrar soluciones concertadas, buscaban -una vez más- la polarización del país para que exista enfrentamientos y mayor división, pero los pasos de los marchistas mostraron el único camino: diálogo urgente.

«Este es un gran triunfo de Bolivia porque están construyendo un proyecto que incluye a todos… Este no es un proyecto del gobierno o de la oposición, es un proyecto de los bolivianos», afirmó el delegado de la Organización de Estados Americanos (OEA), Raúl Lagos.

A través de una ley especial interpretativa del artículo 233, el Congreso Nacional acordó convocar a referéndum constitucional el 25 de enero de 2009 y a elecciones generales para diciembre del próximo año.

«Los pueblos indígenas, campesinos y originarios, así como todos los movimientos sociales no vamos a agredir a ningún parlamentario ni a ningún ciudadano como hicieron los autonomistas con acciones racistas. Nosotros defendemos la cultura de la vida», señaló el dirigente de la CONALCAM, Fidel Surco.

Hasta La Paz llegaron marchistas de Santa Cruz y Oruro, Tarija y Potosí, Beni y Chuquisaca, Pando y Cochabamba, representaban a las organizaciones del campo y la ciudad que buscan y apoyan el proceso de cambio.

Más de cien artículos

El paso difícil, pero firme de los marchistas, hizo que tanto la oposición y el oficialismo aprendan a dialogar, se despojen de intereses políticos y personales y lleguen a acuerdos concretos.

La sesión congresal se extendió por más de 16 horas continuas.

Las posiciones intransigentes de hace días atrás, como: «ni una coma se moverá del nuevo proyecto, salvo el capítulo de las autonomías» o «no aprobaremos la constitución manchada con sangre», quedaron atrás.

De acuerdo al Vicepresidente de la República, Álvaro García Linera, son más de 100 los artículos modificados, algunos de forma y otros de fondo.

«Las fuerzas políticas acordaron más de 100 correcciones que se aplicaron al nuevo texto constitucional, referido a temas electorales, autonómicos, justicia comunitaria y ordinaria, entre otros», remarcó.

Entre los acuerdos alcanzados, se encuentra el tema de la tierra, de enorme preocupación para los sectores productivos, estableciéndose que los resultados del referendo dirimidor, sobre la tenencia de 5 mil o 10 mil hectáreas, no afectará a quienes posean estas tierras hasta antes de la consulta y mientras cumplan con la función económica y social.

Respecto a las autonomías, se logró un capítulo mucho más completo, sólido y de mayor vinculación con las expectativas de las regiones de Tarija, Beni, Santa Cruz y Pando.

En estas cuatro regiones se realizaron referéndums autonómicos, calificados de ilegales.

«Bolivia ganó. Esto corona un esfuerzo que arrastra dos años de nuestra vida política…Estamos satisfechos por varios motivos, porque culmina una etapa de un país que peleó décadas por la inclusión social», preciso García Linera.

Aunque existen algunos disensos de carácter regional, sobretodo de los parlamentarios de Santa Cruz y Chuquisaca, la mayoría de las cuatro agrupaciones políticas (MAS, MNR, UN y PODEMOS) establecieron un acuerdo que, en el fondo, fortalece el sistema democrático boliviano.

Cavando sus tumbas

Con la fuerza de los movimientos sociales, la oposición no sólo quedó presionada sino debilitada y, al final, quedó derrotada.

Hasta ayer, desplegando una estrategia comunicacional por todos los medios comerciales, los opositores afirmaron que «sólo pasando por sus cadáveres aprobarían la constitución masista».

Hoy algunos lloran su derrota, otros aún no pueden aceptar el duro golpe y los más tratan de justificar lo injustificable.

La prefecta de Chuquisaca, Savina Cuéllar, ex masista, dijo. «Los que apoyaron en el Congreso Nacional son traidores. No podemos aprobar esa constitución venezolana, haremos campaña por el no»; «No fuimos tomados en cuenta…el tema competencial
las autonomías no fue definido plenamente», argumentó el diputado opositor, Pablo Klinsky; el Comité Cívico de Santa Cruz rechazó los acuerdos congresales y declaró estado de emergencia y el jefe de PODEMOS, Jorge Quiroga, aceptó que en su partido existen discrepancias.

«Los neoliberales deben cavar su tumba para ser enterrados. El pueblo boliviano ahora ha triunfado y debemos organizarnos y prepararnos para gobernar y tomar el poder en los próximos 20 años», aseveró el dirigente de la COB, Pedro Montes.

Los parlamentarios de la oposición que otrora manejaron a su antojo este país acabaron derrotados, los movimientos sociales que apoyan el proceso de cambio salieron fortalecidos: Bolivia camina hacia su refundación…

– Alex Contreras Baspineiro es periodista y escritor boliviano, ex vocero de gobierno.