Bolivia está expuesta a cinco impactos principales como consecuencia del cambio climático y en la mayoría de los casos carecen de los medios necesarios para enfrentar el embate de éstas, según revela un informe de Oxfam Internacional. El documento titulado «Cambio climático, pobreza y adaptación en Bolivia», que será presentado este jueves en un acto […]
Bolivia está expuesta a cinco impactos principales como consecuencia del cambio climático y en la mayoría de los casos carecen de los medios necesarios para enfrentar el embate de éstas, según revela un informe de Oxfam Internacional.
El documento titulado «Cambio climático, pobreza y adaptación en Bolivia», que será presentado este jueves en un acto en la ciudad de La Paz, señala que el país está expuesto a la disminución de la seguridad alimentaria, menor disponibilidad de agua debido a la desaparición de los glaciares como ya ocurrió con el Chacaltaya, desastres naturales más frecuentes y de mayor intensidad, incremento en la incidencia de enfermedades transmitidas por mosquitos y mayor número de incendios forestales.
El informe presenta tres casos sobre eco-regiones claves de Bolivia: Trinidad en Beni, los valles cochabambinos y las comunidades localizadas al pie del Illimani. Se confirma que los pobladores locales, sobre todo las mujeres, ya están experimentando formas de adaptación, como se evidencia en Trinidad donde la población femenina están haciendo uso de tecnología ancestral, llamados «camellones», para adaptarse a las inundaciones, y asegurar sus cultivos.
Responsabilidad de los países ricos
El reporte subraya lo que está en juego esta semana en las negociaciones sobre cambio climático de las Naciones Unidas en Barcelona, la última oportunidad en las negociaciones antes de que se cierre un acuerdo en Copenhague en diciembre, 2009.
Oxfam Internacional hace un llamamiento a los países ricos para que reconozcan sus responsabilidades: que reduzcan sus emisiones al menos en un 40% hacia el 2020 respecto a los niveles de 1990 y proporcionen al menos 150.000 millones de dólares cada año en recursos frescos para ayudar a los países pobres como Bolivia a reducir sus emisiones y a adaptarse al clima cambiante. Este dinero debe ser adicional al 0,7% del PIB ya comprometido para la ayuda oficial al desarrollo.
«Es una gran injusticia que las familias y las comunidades pobres de Bolivia tengan que pagar un precio tan alto por una situación en la cual, históricamente no tienen ninguna responsabilidad», dijo Simon Ticehurst, representante de Oxfam Internacional en Bolivia.
«La responsabilidad histórica reside con los países ricos e industrializados. Sin embargo, estos países resisten los compromisos necesarios para reducir drásticamente sus emisiones y al mismo tiempo apoyar a los países vulnerables a adaptarse a las implicaciones del cambio climático», añadió.
Recomendaciones
Al mismo tiempo el reporte de Oxfam Internacional recomienda al gobierno boliviano la implementación de políticas y prácticas efectivas para coadyuvar en el proceso de adaptación, incluyendo:
– La integración de medidas legislativas para enfrentar el cambio climático en el marco de la Nueva Constitución Política del Estado.
– El desarrollo e implementación de una Estrategia Nacional de adaptación, que sea adoptada y coordinada por los ministerios vinculados con la temática.
– La elaboración de un seguro agrícola para los pequeños productores agrícolas ante el riesgo climático.
El reporte también resalta el papel clave de los movimientos sociales y la sociedad civil. Iniciativas, como la Plataforma de las Organizaciones Sociales Frente al Cambio Climático, deberían desarrollar propuestas concretes sobre las políticas nacionales, y poner sus perspectivas en la agenda climática. Al mismo tiempo deben contribuir a ampliar el conocimiento del público y la importancia de cambios en los comportamientos individuales, como el uso sostenible de la energía y transporte.
http://www.erbol.com.bo/noticia.php?identificador=2147483920613