El Congreso Nacional boliviano, la Cámara de Diputados, así como la Asamblea Constituyente entraron en receso desde finales de esta semana hasta el próximo año, con varios temas polémicos aún por resolver. En el caso de la Constituyente boliviana, sus miembros se fueron de vacaciones navideñas desde la víspera sin lograr acuerdo en torno al […]
El Congreso Nacional boliviano, la Cámara de Diputados, así como la Asamblea Constituyente entraron en receso desde finales de esta semana hasta el próximo año, con varios temas polémicos aún por resolver. En el caso de la Constituyente boliviana, sus miembros se fueron de vacaciones navideñas desde la víspera sin lograr acuerdo en torno al polémico artículo 70, que establece la modalidad de votación para aprobar la nueva Constitución política del país. Después de varios días de analizar las propuestas sobre el asunto provenientes del gubernamental Movimientos Al Socialismo (MAS) y de la oposición, la comisión revisora decidió que no había solución aún al conflicto. De una parte, el MAS propone una formula mixta de votación, mientras los asambleístas de Poder Democrático Social (PODEMOS) y Unidad Nacional (UN), principalmente, exigen que casi todas las decisiones se adopten con dos tercios de votación. Si bien en las ultimas horas ambos bandos habían flexibilizado su posiciones, finalmente faltó tiempo y voluntad por parte de los asambleístas «podemistas» y «unionistas» que objetaron algunos aspectos técnicos y la posibilidad del referéndum. El plenario de la Asamblea, que solamente deliberó con la presencia de los representantes MAS debido a la ausencia de los demás partidos, determinó retomar sus actividades el próximo 8 de enero. Acordaron, además, continuar con la apertura al diálogo y respaldar el trabajo de la Comisión. La Asamblea Constituyente boliviana fue instaurada el 6 de agosto pasado con un aforo de 255 asambleístas, quienes tienen el mandato popular de redactar y presentar una nueva Carta Magna en el término de un año. Después de cinco meses, el ente constitutivo no ha podido concluir su reglamento interno, debido al conflicto de los dos tercios promovido por la oposición, que -de acuerdo con el gobierno- intenta obstruir los trabajos del foro. Asimismo, el Congreso cerró sus puertas en la tarde de ayer -horas después que lo hiciera la Cámara de Diputados- con la toma de algunas decisiones de última hora y tras la intervención del vicepresidente y jefe de esa instancia senatorial, Alvaro García. García anunció que el 2010 Bolivia generará gas y petroquímica para toda América Latina, meta que se logrará gracias a la firma de los 44 contratos de operación suscritos en octubre con una docena de transnacionales. Esté gobernando quien esté en el 2010, tendrá un país que será el motor que genere energía para el continente latinoamericano, subrayó García Linera. El Vicepresidente señaló que Bolivia tendrá la capacidad de venderle más gas a Brasil y a Uruguay y Paraguay, así como al resto de países latinoamericanos que requieran los hidrocarburos. En una breve evaluación de las sesiones del Congreso Nacional, García habló también de la aprobación de la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), que en adelante dará tierra a campesinos e indígenas carentes de este recurso. Quedan temas pendientes, reconoció al tiempo de anunciar que apenas comiencen las sesiones legislativas del 2007, se convocará a los jefes de bancada de todos los partidos. En el asunto de las autonomías departamentales, afirmó que irán adelante, empero sin pensar siquiera en la independencia de Bolivia por lo que explicó que este régimen estará sujeto a reglamentación. Respecto de los dos tercios en la votación de la Asamblea Constituyente, García Linera dijo que este problema es un «tema político» cuya solución está en manos de los asambleístas.