A cuatro días de la asunción de un nuevo mandatario en Bolivia, la cúpula militar se encuentra en crisis tras la renuncia del ministro de Defensa y la destitución del jefe del Ejército por la destrucción de un lote de misiles enviados a Estados Unidos. El presidente interino del país, Eduardo Rodríguez, dijo el martes […]
A cuatro días de la asunción de un nuevo mandatario en Bolivia, la cúpula militar se encuentra en crisis tras la renuncia del ministro de Defensa y la destitución del jefe del Ejército por la destrucción de un lote de misiles enviados a Estados Unidos.
El presidente interino del país, Eduardo Rodríguez, dijo el martes que aceptó la renuncia del ministro Gonzalo Méndez y destituyó al comandante del Ejército, general Marcelo Antezana.
Rodríguez, quien entregará el poder a Evo Morales el próximo domingo, dijo que Méndez dimitió para permitir la investigación de su actuación. Antezana, en cambio, fue destituido por indisciplina al formular polémicas declaraciones y urgir al gobierno a esclarecer el caso.
El propio presidente enfrenta una demanda de juicio de responsabilidades por una presunta traición a la patria, planteada por el Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales.
El presidente Rodriguez aclaró que él autorizó la destrucción de los misiles con asistencia militar de EE.UU. por tratarse de un material en desuso con potenciales riesgos. Sin embargo, insistió en no había autorizado el traslado del armamento a territorio estadounidense.
Los 28 misiles tierra-aire NH5, de fabricación china, fueron trasladados en octubre pasado a EE.UU. para ser destruidos. Sus restos ya fueron regresados a Bolivia.
Declaraciones polémicas
El general Antezana declaró la semana pasada que la destrucción de los misiles había sido impuesta por Estados Unidos ante el inminente triunfo de Morales en los comicios de diciembre.
Según el militar, la embajada de de EE.UU. estaba preocupada por el peligro que podría representar para la seguridad global y la lucha contra el terrorismo que un gobierno de izquierda estuviera en posesión de los misiles de fabricación china.
Tras ser amonestado por sus declaraciones, Antezana se retractó, pero poco después emplazó públicamente al gobierno, exigiéndole que informara claramente sobre el caso.
Otros militares
El presidente Rodríguez dijo que la destrucción de los misiles se realizó sin respetar los procedimientos militares establecidos.
El mandatario ordenó al comandante general de las Fuerzas Armadas, almirante Marco Antonio Justiniano, que instruya un sumario informativo para determinar cómo tuvo lugar la entrega de los misiles a una misión militar estadounidense.
El sumario también buscará determinar el grado de responsabilidad en el caso no sólo del general Antezana, sino de otros tres militares: los generales Marco Antonio Vázquez, Víctor Hugo Cuéllar y David Torrico Vargas.
Rodríguez también solicitó al canciller, Armando Loaiza, que pida a la embajada de EE.UU. un informe sobre la actuación de sus militares en el caso.