Prefectos y Comités Cívicos opositores conformaron en el año 2007 el Consejo Nacional Democrático (CONALDE), con el objeto de darle una dirección visible a la sedición orquestada gracias al apoyo del gobierno norteamericano a través de la embajada y su brazo operativo USAID, convirtiéndose dicho Consejo como sustituto a los partidos desgastados de la derecha […]
Prefectos y Comités Cívicos opositores conformaron en el año 2007 el Consejo Nacional Democrático (CONALDE), con el objeto de darle una dirección visible a la sedición orquestada gracias al apoyo del gobierno norteamericano a través de la embajada y su brazo operativo USAID, convirtiéndose dicho Consejo como sustituto a los partidos desgastados de la derecha boliviana.
A manera de recordar, CONALDE no solo liderizo todos los afanes golpistas en los departamentos de la media luna, donde desarrollaron masacres, como en el departamento de Pando, saqueos, incendios, atentados terroristas, sino que además desconocieron al gobierno democrático de Evo Morales, es decir desafiaron la institucionalidad democrática.
Sólo la posición firme del pueblo movilizado y la aplicación de las leyes vigentes por parte del gobierno, impidió que los afanes golpistas desatados por la derecha boliviana, se consumaran.
Sin embargo, como siempre, temerosos al pueblo que avanza en sus reivindicaciones históricas contra las minorías, que llevaron al descalabro nacional por su entreguismo a intereses externos, otra vez volvieron a arremeter contra la estabilidad democrática, contratando a mercenarios extranjeros para persistir en su afán de defenestrar a Evo del Gobierno legítimamente electo con una gran mayoría nacional, y así crear un estado dentro del Estado boliviano.
En esta nueva apuesta con fines claramente terroristas, la derecha boliviana volvió a perder y hoy cuando esta en pleno avance una investigación judicial, se va esclareciendo ante la opinión pública, detalles y entretelones sobre los responsables, ejecutores materiales como intelectuales, así como los financiadores, tanto extranjeros como criollos, los implicados comenzaron a temblar y su crujir de dientes, no se escucha hasta el norte, ni siquiera hasta la otra parte del país, pues tanto gringos como sus cómplices de la derecha nacional, han optado por darles la espalda momentáneamente.
Los partidos de la derecha ahora le cobran la factura al CONALDE que pretendió suplantarlos y se hacen a un lado, ésa gambeta tramposa no funciona para el pueblo que como dijimos en una entrega anterior ya tiene su sentencia. Los atrabiliarios de ayer, hoy tienen rostros de ovejitas, y claman y reclaman inocencia. Apostaron y perdieron, seguro volverán pero antes la derecha tiene que pagar por todo su accionar sedicioso, logiero y terrorista pues el pueblo no perdona ni olvida y siempre los estará esperando para responderles resueltamente con la fuerza popular unidos como una sola nación, prospera y soberana.
José Justiniano Lijerón es ex Dirigente de la Central Obrera Boliviana (COB)