Una versión cubana de distribución de software libre diseñada por especialistas de la UCI, nombrada Nova, y las conferencias especiales sobresalieron en el evento
Cientos de personas en toda Cuba, fundamentalmente jóvenes, protagonizaron este sábado la edición nacional del Festival del Software Libre (FLISOL), donde se expusieron las bondades de esta tecnología, imprescindible para una nación como la nuestra.
El movimiento de software libre, cuyo sistema operativo más conocido es el GNU/Linux, nació a mediados de la década de los 80 como respuesta al software privativo, y se basa en cuatro principios o libertades fundamentales: la libertad de usar el programa con cualquier propósito; de estudiar el funcionamiento del programa y adaptarlo a las necesidades; de distribuir copias con las cuales ayudar a otros, y de mejorarlo y hacer públicas las mejoras de modo que toda la comunidad se beneficie.
Este movimiento ha ido ganando fuerza en el territorio nacional, donde ya existe una importante comunidad de adeptos, que integra a miembros de la Universidad de Ciencias Informáticas, los Joven Club de Computación y Electrónica, ingenieros, estudiantes y usuarios de la informática en general, quienes protagonizaron esta edición de FLISOL.
Conferencias especiales como la del profesor Arnaldo Coro o la presentación de una versión cubana de distribución de software libre diseñada por especialistas de la UCI, nombrada Nova, sobresalieron en el Palacio Central de Computación, sede del evento en la capital.
Igualmente hubo intercambio de experiencias entre organismos que han ido migrando al software libre, como la Red Telemática de Salud de Cuba, Infomed; la Aduana General de la República, el Centro de Información para la Prensa, e instituciones de salud y educación.
Los participantes señalaron la importancia de ganar conciencia sobre el tema a todos los niveles.