¿Se pueden unir el agua y el aceite? El Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) se autoproclamó en voz de Andrés Manuel López Obrador (AMLO): «la principal fuerza del movimiento de transformación nacional […] la vanguardia en la lucha por la democratización de México.» Esta afirmación la fundaron en el crecimiento en número de votos para el […]
¿Se pueden unir el agua y el aceite?
El Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) se autoproclamó en voz de Andrés Manuel López Obrador (AMLO): «la principal fuerza del movimiento de transformación nacional […] la vanguardia en la lucha por la democratización de México.»
Esta afirmación la fundaron en el crecimiento en número de votos para el MORENA en todas las elecciones de junio y en el número de Comités que dicho partido ha creado en todo el país.
AMLO y los delegados al tercer congreso extraordinario de MORENA realizado el 11 de junio de 2017 en la Ciudad de México manifestaban optimismo y confianza en sus fuerzas a pesar de que pocos días antes el gobierno priista hiciera otro fraude en las elecciones para gobernador en el Estado de México, les robara la elección y miles de personas estuvieran enojadas o frustradas por ese hecho.
Así pues, en ese congreso extraordinario no sólo evaluaron lo sucedido en las elecciones de junio en tres estados, sino que fijaron su posición política respecto al fraude, a las elecciones presidenciales del 2018 y a las alianzas que establecerán, en otras palabras, fijaron su táctica.
¿Y los socialistas-comunistas tenemos algo que decir frente a esos posicionamientos y los hechos que los motivan? Por supuesto que sí, aunque en realidad tenemos más cosas que hacer frente a esto.
Comenzaremos diciendo que los socialistas-comunistas buscamos la unidad de todo el pueblo explotado y oprimido para luchar contra el neoliberalismo, pero también contra el capitalismo; en este sentido no creemos que a los empresarios se les «ablande el corazón» y dejen de robar a los trabajadores o que nada más roben un poquito no más porque se los pedimos.
Los grandes empresarios son quienes han sostenido el capitalismo, el neoliberalismo y a los gobiernos que los protegen; ellos son los responsables de lo que vivimos, incluso los empresarios que hoy se dicen «arrepentidos»: OHL, Cemex, Femsa, Telmex, todos se han beneficiado del neoliberalismo, ¿cambiarán no más porque se los pidamos? Cambiarán si les decimos como dice Morena «que lo único que buscamos es erradicar la corrupción y los privilegios.»
MORENA hace un llamado a la unidad, nos dice que transformar el país, «requiere de la suma de esfuerzos de ciudadanos de distintas clases sociales, credos y ocupaciones, de organizaciones de diversas ideologías y de distintas regiones.»
¿Se puede unir el agua y el aceite? ¿Se puede unir en sana convivencia al león y al borrego? ¿Se puede unir al empresario que roba al trabajador y al trabajador robado si sus intereses son opuestos?
Reiteramos: nosotros queremos la unidad, pero entre el pueblo trabajador explotado y oprimido del campo y la ciudad, entre el profesionista y el obrero, entre el pequeño tendero y el pequeño comerciante que es la unidad por la que luchamos sin importar que el pueblo milite en otras organizaciones; pero es nuestro deber advertir que los empresarios tienen por interés principal la ganancia, el capital, el dinero, y que si confiamos en ellos nos puede pasar lo que le pasó a los campesinos de Morelos que confiaron en Madero para que les restituyera sus tierras y lo único que obtuvieron fue el ataque militar del ejército federal encabezado por Victoriano Huerta.
Así fue, el empresario de buen corazón Francisco I. Madero, dueño de cientos de miles de hectáreas de tierras en Coahuila, aquél que llamó al levantamiento armado el 20 de noviembre de 1910, ese «demócrata» apacible y de «buen corazón» prefirió, ya siendo presidente de México, combatir al ejército campesino dirigido por Emiliano Zapata con el ejército federal dirigido por porfiristas antes que devolverles las tierras robadas por otros empresarios.
Conocemos el resultado: Madero confió en su clase: la burguesía, misma que lo asesinó a traición. ¿Por qué deberíamos confiar hoy en los empresarios?
Nosotros no confiamos en los empresarios, no confiamos en los burgueses que, resentidos con su propia clase, hoy se pegan a MORENA para recuperar sus riquezas perdidas y el control político que tuvieron antes; no confiamos en quien los invita a su mesa perdonando sus crímenes del pasado.
Para nosotros el objetivo fundamental de nuestra actividad es lograr la unión del pueblo explotado y oprimido como única fuerza del cambio y la transformación real de nuestra sociedad, y por eso, sin sectarismos, seguiremos trabajando con todos aquellos que sin importar su filiación luchen contra el neoliberalismo y contra el capitalismo.
Unidad para superar el capitalismo, para terminar con el neoliberalismo, para defendernos de la explotación y la opresión de los empresarios, unidad y confianza en nuestros hermanos de clase. Esos son los principios de nuestro trabajo. Sólo apegándonos a estos principios podremos lograr la victoria de nuestro pueblo contra este sistema de explotación y muerte.
Nota:
Este artículo fue publicado como parte de la sección DEBATE del No. 27 de FRAGUA , órgano de prensa de la Organización de Lucha por la Emancipación Popular ( OLEP ), Julio-Agosto 2017.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.