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El carácter demagógico y autoritario del gobierno chiapaneco

Fuentes: Frente Nacional de Lucha por el Socialismo

El gobierno chiapaneco le caracteriza la demagogia ante una realidad que se contrapone diametralmente a su discurso, dado que en los hechos persiste la represión como política de gobierno, el cometido de crímenes de lesa humanidad, fenómenos que expresan autoritarismo, éste es otro rasgo que define a la administración actual. El carácter demagógico del gobierno […]

El gobierno chiapaneco le caracteriza la demagogia ante una realidad que se contrapone diametralmente a su discurso, dado que en los hechos persiste la represión como política de gobierno, el cometido de crímenes de lesa humanidad, fenómenos que expresan autoritarismo, éste es otro rasgo que define a la administración actual.

El carácter demagógico del gobierno chiapaneco estriba en su insistencia por afirmar su sujeción a los planes del representante del Ejecutivo federal. Verbigracia la expresión «(…) Hoy sabemos que contamos con todo el respaldo de un presidente patriota y honesto»; expresión que incurre a la verdad.

La estrechez política del gobernador de la entidad es tal que sus horizontes se constriñen en replicar al pie de la letra los designios del régimen, por lo que aseverar que el ocupante de la silla presidencial es honesto es un acto puramente demagógico, así pretende limpiar su imagen, presentar un rostro humano ante los reflectores, pero en la práctica, lo único transparente de su actuar, es que reprime al pueblo que ejerce su derecho a disentir.

Una prueba más es la ejecución extrajudicial de nuestro compañero Mario Moreno López, ¿qué hay de honesto en ese abominable crimen? ¿No incurre en deshonestidad a la ciudadanía al callar por este y otros crímenes que se cometen contra defensores de derechos humanos, activistas políticos y luchadores sociales? ¿Acaso no incurre el gobernador en un acto falaz al no responder a las interrogantes del pueblo respecto a quién o quiénes dan las órdenes de desangrar con esa barbarie a los hijos del pueblo? Ese mutismo es cómplice, característico de gobiernos fieles al capital monopolista transnacional.

La ejecución extrajudicial de nuestro compañero tiene motivaciones eminentemente políticas, por tanto, la honestidad de la que habla el ejecutivo estatal está manchada con la sangre del pueblo. Crimen ocurrido tras la culminación de la Jornada Nacional: Perdón ¡Nunca! Olvido ¡Jamás! Por exigir la presentación con vida de los detenidos desaparecidos, por solidarizarnos con los familiares de los revolucionarios Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya en particular por la exigencia de que el Estado mexicano acate a cabalidad la sentencia final del juicio de amparo 942/2013-2.

El crimen de lesa humanidad cometido contra nuestro compañero ocurre en el contexto de militarización del sureste mexicano. Por mucho que la retórica del gobernador refiera que se respetarán los derechos humanos, como vemos, la presencia militar en la entidad permite el actuar impune de los grupos paramilitares, por lo tanto, de la muerte de nuestro compañero es corresponsable el Ejecutivo estatal, el presidente municipal de Venustiano Carranza y del grupo paramilitar los coyotes.

En otras declaraciones, el gobierno chiapaneco una vez más recurre a la fraseología del presidente de la República para expresar que éste último «(…) vela por las personas más necesitadas y atiende las solicitudes más apremiantes». Este comportamiento es típico de los políticos de oficio, opacar la realidad con discursos optimistas en su intento por atenuar las consecuencias de la represión y el terrorismo de Estado.

En el país no existen personas necesitadas, sino una inmensa masa de trabajadores en condiciones de miseria y pobreza con necesidades apremiantes que la clase explotadora no es de su interés resolver a fin de garantizar los intereses del capital monopolista transnacional. Ese discurso es verborrea pura al franco estilo de los políticos de oficio.

Que atienden las solicitudes más apremiantes, es otra enorme falta a la verdad. La ejecución extrajudicial del compañero Mario Moreno López no es la forma de atender una solicitud, mucho menos la indolencia cuando en los escritorios y archivos de gobernación existen las demandas más sentidas del pueblo que a la fecha son ignorados, más no las demandas de su patronal, la oligarquía nacional y extranjera, cuando éstos exigen la represión contra los sectores populares movilizados.

El representante del Ejecutivo chiapaneco, en otra de sus recientes arengas manifestó que «(…) Basta de tanta injusticia, imposición, rezago y de no tomar en cuenta a la población». En efecto, basta de tanta injusticia, es la exigencia de amplios sectores populares, pero escuchar eso de un político de oficio es el reflejo del cinismo a flor a de piel, cuando ese fenómeno tiene su génesis en un régimen que se fundamenta en la explotación del hombre por el hombre y la violencia que se ejecuta a través de las fuerzas policíaco-militares y paramilitares con la venia de los voceros de la burguesía.

¡Basta de imposición! Es otra demanda del pueblo, porque los gobiernos neoliberales son fieles sirvientes de quienes detentan el poder económico y político para imponer sus designios, empero, quien espeta esa consigna con ropaje de Estado opresor es un insulto a la dignidad del pueblo organizado, porque son los políticos proempresariales quienes imponen a sangre y fuego la dictadura del capital.

El autoritarismo es la objetivación de la imposición del mandato oligarca en la entidad como en el resto del país. Las ejecuciones extrajudiciales, los casos de desaparición forzada, el incremento del hostigamiento de los grupos paramilitares, la represión como respuesta a las demandas del pueblo son fenómenos que prueban ese rasgo del gobierno chiapaneco, se criminaliza y estigmatiza el derechos a disentir, entonces, en eso consiste la expresión ¿»basta de no tomar en cuenta a la población»?

Si nos atenemos a la máxima marxista de que la práctica es el criterio de la verdad, nos daremos cuenta del carácter demagógico y autoritario del titular del Ejecutivo estatal. Sus palabras se sustentan con la sangre derramada de hijos del pueblo, su gobierno en los hechos atiende a los «más necesitados» pero con balas, toletes, la bota policíaca, sujetos desclasados agrupados en los grupos paramilitares.

En este contexto, quien no analice la realidad tal cual se manifiesta y sin la ciencia del marxismo, será absorbido por la vorágine de su desarrollo y seremos presa fácil de los discursos engañosos de los políticos de oficio que aparentan benevolencia ante los amplios sectores populares que vivimos en condiciones de pobreza y miseria.

Ante el autoritarismo y demagogia del gobierno de la entidad, la organización independiente es la alternativa, de este modo el pueblo tiene el legítimo derecho a defenderse y desplegar acciones políticas de masas con carácter combativas, en la exigencia de sus demandas más sentidas, entre ellas, la exigencia de justicia para las víctimas.

¡Justicia por la ejecución extrajudicial del compañero Mario Moreno López!

¡Por la unidad obrero, campesino, indígena y popular!

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.