El ministro argentino del Interior, Aníbal Fernández, calificó ayer de «despreciable» un texto en el que el ex dictador Reynaldo Bignone exhortó a la juventud a terminar lo que su generación no pudo. Un abogado presentó hoy una denuncia ante la justicia por «apología del crimen» e «incitación a la violencia» contra el último presidente […]
El ministro argentino del Interior, Aníbal Fernández, calificó ayer de «despreciable» un texto en el que el ex dictador Reynaldo Bignone exhortó a la juventud a terminar lo que su generación no pudo.
Un abogado presentó hoy una denuncia ante la justicia por «apología del crimen» e «incitación a la violencia» contra el último presidente del régimen militar que gobernó el país de 1976 a 1983, informaron fuentes judiciales.
Bignone admitió hoy haber escrito una carta que fue publicada en el sitio web de la agrupación Argentinos por la Memoria Completa, que convocó para mañana a un acto para recordar a las víctimas de la guerrilla en la década de los años 70.
«No puedo negar haberla escrito, pero niego terminantemente que tenga algo que ver con el tema del jueves», señaló el ex dictador, quien en declaraciones a la emisora local Radio 10 dijo que no pretendió «alentar nada» con su misiva.
«Qué difícil nos resulta a los que ya no somos y nos quedan pocas fuerzas decirles a estos chicos: ¡sigan adelante! Terminen lo que nosotros no supimos ni pudimos terminar», dice Bignone en su carta.
El mensaje, que no específica qué tarea es la que se debe terminar, está dirigido a los jóvenes que «arremeten» contra «personas de carne y hueso que, cargadas de odio, deformaron la moderna historia argentina».
Luego de presentar una denuncia penal contra Bignone por la carta, el abogado Ricardo Monner Sans sostuvo que «el objetivo de esta presentación es romper con la doctrina del miedo y demostrar que en materia de derechos humanos no sólo hay que predicar, sino también seguir haciendo».
El ex dictador está procesado por el robo de bebés de personas desaparecidas durante la «guerra sucia» y por su responsabilidad en el Plan Cóndor, como se llama al plan coordinado por las dictaduras del Cono Sur para eliminar opositores políticos en los años 70.
El polémico escrito de Bignone se conoce cuando crece la preocupación por Jorge López, quien desapareció hace más de dos semanas, después de declarar en el juicio contra el represor del régimen militar Miguel Etchecolatz.
López, de 77 años, es buscado por en todo el país y mientras las autoridades no descartan que haya sido secuestrado, su hijo insistió hoy con que su padre puede haber sido víctima de una «crisis emocional».
El testimonio del septuagenario fue considerado clave para que el mes pasado un tribunal condenase a prisión perpetua al ex policía Etchecolatz por seis casos de homicidio y dos de privación ilegal de la libertad y aplicación de tormentos durante la dictadura.
En los últimos días más de 20 jueces, fiscales y defensores de los derechos humanos han recibido amenazas de desconocidos para que no sigan investigando causas relacionadas con los crímenes de la dictadura, entre ellos los magistrados que condenaron a Etchecolatz.
El ministro de Justicia, Alberto Iribarne, condenó hoy las intimidaciones y dijo que «más allá de cualquier actitud o amenaza, el servicio de justicia continúa desempeñándose con total plenitud».
Por su parte, dirigentes de agrupaciones defensoras de los derechos humanos se reunieron con el presidente argentino, Néstor Kirchner, para comunicarle que el próximo viernes volverán a exigir la «aparición con vida de López» en una marcha por las calles de Buenos Aires