Se considera una marxista, centrada en la educación popular. Aunque no se siente doctora ni asesora del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, es una de las personas que está más cerca del mandatario caribeño. También trabajó con Fidel Castro. Le apasiona el periodismo. – El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo el miércoles que en […]
Se considera una marxista, centrada en la educación popular. Aunque no se siente doctora ni asesora del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, es una de las personas que está más cerca del mandatario caribeño. También trabajó con Fidel Castro. Le apasiona el periodismo.
– El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo el miércoles que en Bolivia se está gestando un movimiento separatista. ¿Cuáles son las bases para hacer esa afirmación?
– En la propia Venezuela surgió una intención similar en el estado Zulia, una región petrolera muy rica, y sabemos que en Brasil también se planteó separar el sur, que es la zona más importante y desarrollada del país, del norte, que es la más atrasada. La autonomía es una bandera de los movimientos indígenas, de los sectores progresistas y, también, del proyecto de sociedad que se pretende construir para permitir gestiones locales menos burocráticas. No obstante, debemos diferenciar que una cosa es la descentralización, por medio de las autonomías, y otra es querer debilitar al Estado nacional.
– En su criterio, ¿en cuál de las dos se encuentra Santa Cruz?
– Creo que todos los países que han levantado las banderas sobre este intento autonomista es con la intención de debilitar el Estado central. En nuestro proceso (de izquierda) es fundamental un Estado fuerte, respetando las autonomías y promoviendo que la descentralización sea capaz de dar una línea estratégica de desarrollo del país. ¿A quiénes les interesa debilitar el Estado central? No es a los gobiernos progresistas, sino más bien a los gobiernos de las potencias, en especial el de Estados Unidos porque, evidentemente, un Estado fuerte de un gobierno progresista es mucho más peligroso para sus intereses que un Estado débil.
– ¿Cómo explica que países como Argentina, Brasil, incluso Venezuela, sean estados federales y con gobiernos centrales fuertes?
– La diferencia está en que si hay regiones dentro de esos países con grandes riquezas naturales, esos recursos son utilizados para impulsar un desarrollo más armónico nacional, no para la región específica. Eso es lo que ocurre en Venezuela, por ejemplo, que el petróleo está en manos del Estado nacional y gracias a eso se ha decidido destinar una gran parte de las ganancias para hacer labores sociales en los lugares más desvalidos del país. Eso no pasó en Yugoslavia, donde las regiones se desarrollaron muy desigualmente. Hay que ser solidarios.
– El presidente Chávez habló de la ‘kosovización’ de Bolivia, ¿cuál es el análisis que se ha hecho en Venezuela sobre Bolivia?
– Muchos analistas que han estudiado los procesos históricos y por la presencia del embajador de Estados Unidos en Bolivia (Philip Goldberg), que fue el artífice de la división de Yugoslavia, podemos temer de que ocurran esas cuestiones. Es evidente que la intención del imperio es debilitar Bolivia, así como lo podría hacer con Ecuador, Venezuela u otros países de América Latina. Aparentemente aquí hay un eslabón débil y trabajan en ese aspecto.
-¿Por qué cree que EEUU intenta debilitar alguno de los países que mencionó?
– Porque son los nuevos gobiernos que están haciendo políticas de interés para nuestra América Latina y, obviamente, ponerle freno al ALCA (Acuerdo de Libre Comercio para las Américas) es un golpe para Estados Unidos. Ellos perciben que en América Latina están surgiendo gobiernos que no son súbditos de la política de Estados Unidos, sino que tienen su propia línea de acción, su coordinación para tratar de resolver sus problemas de forma humanitaria y solidaria entre los países.
-Lo que usted considera apoyo y solidaridad, algunos sectores lo califican como injerencia externa. ¿A qué se debe esa diferencia de enfoques?
– No me imaginaba que eso es un argumento, porque si los gobiernos se ponen de acuerdo para hacer proyectos en común y que rindan frutos para todos, no veo que haya injerencia. ¿Qué hay de malo que compañeros de otros países vengan a alfabetizar a los bolivianos? Bienvenidos sean los que hagan esas tareas.
Perfil
Asesora de la revolución
Aunque es vista como una de las principales asesoras del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ella asegura que trabaja con el Gobierno venezolano. Asesoró al Gobierno de Cuba y estuvo casada con el comandante Piñeiro (‘Barbarroja’), uno de los líderes históricos de la Revolución Cubana. Es psicóloga de profesión y se define como educadora popular. Es autora de más de 70 libros, entre ellos Los conceptos elementales del materialismo histórico y de los cuadernos de educación popular. En Francia fue discípula de Louis Althousser. En Chile, donde nació, fue docente universitaria y educadora popular de obreros y campesinos. Fue editora de una revista política en la época de Salvador Allende.