El Instituto Federal Electoral de México decidió recontar a partir de hoy el 54,5 por ciento de los paquetes con votos de los comicios presidenciales celebrado el pasado domingo, con el objetivo de contar cada papeleta y otorgar certeza sobre los resultados. «Se trata del ejercicio de apertura, transparencia y máxima publicidad más grande en […]
El Instituto Federal Electoral de México decidió recontar a partir de hoy el 54,5 por ciento de los paquetes con votos de los comicios presidenciales celebrado el pasado domingo, con el objetivo de contar cada papeleta y otorgar certeza sobre los resultados.
«Se trata del ejercicio de apertura, transparencia y máxima publicidad más grande en la historia electoral de México», dijo el secretario ejecutivo de esa institución pública, Edmundo Jacobo Molina.
La decisión se tomó después de que el líder centro-izquierdista Andrés Manuel López Obrador, que quedó segundo en los comicios a 6,51 puntos de Enrique Peña Nieto, solicitara un nuevo escrutinio total de los 49 millones de votos.
Peña Nieto, del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), obtuvo el 38,15 por ciento de los votos según el recuento oficial preliminar del domingo.
López Obrador le sigue con el 31,64 por ciento, la oficialista Josefina Vázquez Mota con el 25,40 y el ambientalista Gabriel Quadri con el 6,24.
Molina informó que se abrirán para el recuento los paquetes de 78.012 centros de votación, sobre un total de más de 143.000 locales instalados. No se precisó a qué número de votos equivale esa cifra.
En el caso de las elecciones para diputados se abrirá el 60,3 por ciento de los paquetes y en las elecciones para senador el 61,3 por ciento.
Los 300 distritos electorales de México iniciaron hoy el cómputo final de las elecciones generales en base a los resultados asentados en las actas de cada uno de los centros de votación.
Los consejos distritales tienen la atribución de decidir cuándo abrir un paquete de votos para hacer un nuevo escrutinio, y los partidos políticos pueden acudir al Tribunal Electoral en caso de no estar de acuerdo con los resultados finales. El órgano electoral mexicano descartó la madrugada de ordenar por sí mismo un recuento total como pidió López Obrador y dejó la decisión en manos de los consejos. «A nadie le conviene alterar los ámbitos de competencia e impedir que se cumplan las etapas del proceso electoral», dijo el presidente del IFE, Leonardo Valdés.
López Obrador afirma que hay inconsistencias en el 80 por ciento de las actas. Además ha señalado que los comicios fueron «fraudulentos» con compra de votos, por ejemplo a través de la supuesta entrega de tarjetas para hacer compras en una cadena de supermercados a cambio del voto por Peña Nieto, e inequidad en los medios.
El IFE había calculado el martes que sería necesario abrir una tercera parte de los paquetes con votos de acuerdo con los supuestos que marca la ley.
Esas condiciones son que haya errores evidentes en las actas, una diferencia de un punto o menos entre el ganador y el segundo lugar, cuando todos los votos sean para un solo partido o que el número de votos nulos sea mayor a la diferencia entre el primero y el segundo.
El coordinador de campaña de Peña Nieto, Luis Videgaray, afirmó que su partido está de acuerdo con un recuento, siempre y cuando se haga dentro de los supuestos considerados en la legislación electoral y no por «capricho» de una persona.
«Nuestra posición es que se deben abrirse todos y cada uno de los paquetes en los casos en los que se cumplan las condiciones en la que la ley lo establece. Enrique Peña Nieto ganó la elección presidencial por un amplio margen y si se tienen que volver a contar los votos, que sea conforme lo marca la ley, y se confirmará el triunfo de Enrique Peña Nieto», indicó. En 2006 el candidato de centro-izquierda también quedó en segundo lugar, en esa ocasión a 0,56 puntos del conservador Felipe Calderón, y denunció fraude.