El jefe de la Policía de la ciudad de Santa Cruz (Bolivia), el coronel Adalberto Torrez, tenía vinculación directa con el comando de mercenarios liderado por el boliviano-húngaro Eduardo Rózsa Flores, que intentó asesinar al presidente Evo Morales en abril de 2009. Así lo reveló el fiscal Marcelo Soza, que investiga los vínculos del grupo […]
El jefe de la Policía de la ciudad de Santa Cruz (Bolivia), el coronel Adalberto Torrez, tenía vinculación directa con el comando de mercenarios liderado por el boliviano-húngaro Eduardo Rózsa Flores, que intentó asesinar al presidente Evo Morales en abril de 2009.
Así lo reveló el fiscal Marcelo Soza, que investiga los vínculos del grupo paramilitar de Rózsa, según una nota de la Agencia Boliviana de Noticias (ABI).
Durante casi cinco horas el magistrado procedió al interrogatorio del coronel Adalberto Torrez, ex jefe de la Policía de Santa Cruz, detenido en relación con estas acusaciones.
El grupo de sicarios de Rózsa-Flores fue desarticulado el 16 de abril de 2009 en una operación en el hotel Las Américas (Santa Cruz. Tres de los mercenarios, entre ellos el propio Rózsa-Flores, murieron en el tiroteo.
Según investigaciones posteriores este grupo se había infiltrado en Bolivia con el objetivo de promover una guerra civil en el país.
Soza informó que espera ahora la audiencia cautelar de Torrez que se mantendrá detenido mientras se amplian las investigaciones sobre sus relaciones con «actividades de alzamiento armado».
«Torrez tenía vinculación directa con el grupo de Rózsa, también contactos con otros prófugos del caso, por lo cual se dispuso su aprehensión», manifestó Soza.
El jefe del complot, Alejandro Melgar Pereira, abogado de la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (CAINCO), se encuentra en Miami, ciudad convertida en refugio por excelencia de mercenarios.
Entre los patrocinadores de la conspiración terrorista se encontraba un influyente empresario de Santa Cruz, Branko Marinkovic, croata de origen que también ha encontrado refugio en territorio norteamericano.