El vicepresidente Álvaro García Linera considera un «abuso político» los pedidos de los prefectos de Beni, Chuquisaca, Santa Cruz y Tarija de querer cambiar el contenido del proyecto de nueva Constitución Política del Estado (CPE). «Estoy sintiendo que esto es una chacota, una exageración y abuso político pensar que toda la Constitución que fue elaborada […]
El vicepresidente Álvaro García Linera considera un «abuso político» los pedidos de los prefectos de Beni, Chuquisaca, Santa Cruz y Tarija de querer cambiar el contenido del proyecto de nueva Constitución Política del Estado (CPE).
«Estoy sintiendo que esto es una chacota, una exageración y abuso político pensar que toda la Constitución que fue elaborada por mas de 168 constituyentes, tenga que ser modificada por el interés o el capricho de fuerzas políticas regionales», dijo.
García Linera cuestionó la actitud «poco seria» de los prefectos, derrotados en la Asamblea Constituyente.
«Primero se habló del Impuesto Directo al Hidrocarburo , (IDH), luego hemos pasado al tema de las autonomías, ahora aparece otro capítulo de justicia, luego el tema del modelo económico, y el tema de Estado».
El Gobierno y los prefectos opositores, reanudaron el 15 de septiembre en Cochabamba, el diálogo con la participación de veedores internacionales, representantes de la Iglesia Católica, metodista y evangélica.
Tanto el Ejecutivo como los prefectos coincidieron en conformar tres mesas de trabajo, entre ellas la compatibilización de la nueva Constitución con los estatutos autonómicos, la segunda mesa analiza el Impuesto Directo sobre Hidrocarburos (IDH), y la tercera comisión tratará las vacantes en el Tribunal Constitucional y la Corte Suprema.
En ese contexto García Linera afirmó que el querer involucrar otros temas en las tres mesas del diálogo, escapa a la competencia de los representantes regionales (prefectos) toda vez que no son constituyentes.
«No es posible que fuerzas políticas regionales que tenían dos o cuatro constituyentes que fueron derrotados como representantes del pueblo, ahora quieran aparecer con una fuerza para modificar la Constitución, eso no es correcto ni corresponde a la realidad política», manifestó.
El Vicepresidente volvió a insistir a los prefectos de Beni, Chuquisaca, Santa Cruz y de Tarija en la necesidad de que se den un «baño de realidad», y comprendan que el gobierno cuenta con el respaldo mayoritario de la población para ejecutar el proceso de cambio reflejado en el proyecto de nueva Constitución Política del Estado (CPE).
Explicó que el gobierno está dispuesto a realizar correcciones puntuales que enriquezcan el texto constitucional para incorporar el tema autonómico, el criterio de querer involucrar otros temas como pretenden los prefectos esta fuera de lugar, por considerar poco serio e irresponsable.
«Esperemos que prime la seriedad de los planteamientos, se garantice la continuidad de las mesas de trabajo del IDH, las autonomías y se pueda firmar un documento que le de certidumbre a los bolivianos y tener una Constitución lo más antes posible que garantice la autonomía en los departamentos donde ganó esa opción el 2006», concluyó García Linera.
Los movimientos sociales bolivianos que apoyan al Gobierno, anticipan que no se moverá «ni una coma» de lo que consideran la nueva Constitución Política del Estado.