El líder indígena Evo Morales Ayma, actual Presidente de Bolivia, será uno de los aspirantes al Premio Nobel de la Paz 2007. Su candidatura fue presentada oficialmente al jurado internacional de Noruega el pasado 6 de diciembre de 2006 por Adolfo Pérez Esquivel, merecedor de ese galardón en 1980, y con el inicio de año […]
El líder indígena Evo Morales Ayma, actual Presidente de Bolivia, será uno de los aspirantes al Premio Nobel de la Paz 2007. Su candidatura fue presentada oficialmente al jurado internacional de Noruega el pasado 6 de diciembre de 2006 por Adolfo Pérez Esquivel, merecedor de ese galardón en 1980, y con el inicio de año arrancó la campaña para recabar adhesiones y apoyos.
La propuesta, que ha comenzado a circular por el ciberespacio, destaca que la candidatura de Evo se sustenta en «su lucha inclaudicable por dignificar a los pueblos originarios de Bolivia, de América y del mundo; el respeto a la diversidad cultural; la defensa de los recursos naturales; su ejemplo de honestidad, trabajo, sacrificio y austeridad; la defensa de la soberanía y la autodeterminación de los pueblos; su trabajo en pos de los más desposeídos; su permanente lucha por la justicia social; su constante prédica de vivir en armonía con la naturaleza; su labor por gobernar con la participación y el protagonismo de los movimientos sociales; el cuidado del medio ambiente y de la ecología; su tarea constante por la integración latinoamericana caribeña y el respeto, la paz y la convivencia entre las naciones; el respeto a las ancestrales normas indígenas de: ‘Ama sua, ama llulla, ama quella’, que significa ‘no robes, no mientas, no seas perezoso’; la lucha sin cuartel contra
la corrupción que lleva a cabo como Presidente de Bolivia; su permanente predisposición a la solución pacífica de los conflictos, demostrada como dirigente sindical y como Presidente; el curso democrático, pacífico, humanista, popular, inclusivo, de unidad nacional y latinoamericanista que le ha dado a su gobierno; su invariable discurso y acción contra los revanchismos étnicos y el ejercicio de la justicia por mano
propia».
A pocos días de iniciada la campaña, las adhesiones registradas vía [email protected] ya se cuentan por millares. Pero la primera expresión de respaldo multitudinario de organizaciones sociales e indígenas se registró en Managua, Nicaragua, este 10 de enero, en un acto organizado con ocasión de la presencia Morales Ayma a la asunción de Daniel Ortega a la presidencia de ese país.
En ese escenario, el dirigente de la Vía Campesina, el hondureño Rafael Alegría, afirmó que Evo Morales Ayma no sólo es un luchador inclaudicable por defender los derechos de los pueblos indígenas bolivianos sino del continente y del mundo. «Millones y millones estamos apoyando la candidatura», dijo al agregar que en diferentes partes del continente se conformarán Comités Pro Evo Premio Nóbel de la Paz 2007. Para luego subrayar que el Gobierno de Bolivia cuenta con el respaldo internacional porque en un sólo año de gestión demostró cómo se gobierna con medidas, como la Revolución Agraria o la recuperación de los recursos naturales.
El padre Miguel Descotto, presidente del Capítulo Nicaragüense de la Red en Defensa de la Humanidad y legendario miembro del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), por su parte, manifestó que como latinoamericano se siente feliz por apoyar la digna candidatura del Presidente de Bolivia, revelando que «cada día le encomiendo al Señor en mis oraciones porque el heredero espiritual de Tupaj Katari y Bartolina Sisa haya llegado a ese lugar por la paz y la justicia de nuestros pueblos».
El mandatario boliviano, en su mensaje, reconoció estar sorprendido por la designación, pero como soldado de los movimientos sociales del continente la agradeció. «La propuesta a Premio Nóbel no es a Evo Morales, sino que es un reconocimiento a los pueblos indígenas y los movimientos sociales que recuperaron los recursos naturales y ahora luchan por recuperar el poder», señaló, para a renglón seguido agradecer a los movimientos sociales del continente en general, aunque destacando que su lucha la forjó desde la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, una lucha dirigida a liberar, defender y salvar la humanidad. Pero además recordó que los gobiernos anteriores, por defender sus principios, desplegaron campañas -sobre todo mediáticas- para acusarle de «narcotraficante» o «terrorista», por lo que el sólo hecho ser propuesto como candidato a Premio Nobel de la Paz «ya es algo muy grande», destacó.