El presidente boliviano, Evo Morales, acusó hoy aquí a Transredes, trasnacional petrolera, y a dirigentes cívicos en la oriental región de Camiri de encabezar otro complot contra su gobierno. En rueda de prensa, el mandatario explicó las extrañas circunstancias del cierre de válvulas hace dos días de una planta de bombeo de carburantes que abastece […]
El presidente boliviano, Evo Morales, acusó hoy aquí a Transredes, trasnacional petrolera, y a dirigentes cívicos en la oriental región de Camiri de encabezar otro complot contra su gobierno.
En rueda de prensa, el mandatario explicó las extrañas circunstancias del cierre de válvulas hace dos días de una planta de bombeo de carburantes que abastece a importantes regiones de
Acerca de esa medida de protesta, aparentemente por el proceso de refundación de la empresa estatal petrolera, el jefe de Estado opinó que causó grandes pérdidas a la economía nacional.
Fue una acción premeditada, dijo, y precisó que una hora antes de que llegaran pobladores de esa localidad a la planta, ya se habían detenido sus labores y varias regiones del país dejaban de recibir los carburantes.
La planta estuvo paralizada unas 22 horas y sólo una hora en esas circunstancias equivale a la pérdida de 30 mil dólares, acotó.
Morales cuestionó a las instituciones castrenses de esa región que no ofrecieron seguridad a la planta y dejaron que fuera ocupada por los manifestantes.
En ese sentido, adelantó que los jefes de esos cuerpos armados serán investigados para depurar responsabilidades.
También señaló que si en ese proceso se demuestra que hubo sabotaje por parte de la trasnacional, no le temblará la mano para decretar la salida de Transredes de Bolivia.
Informes del ministerio de Gobierno dieron cuenta que la planta pudo ser retomada en la madrugada del sábado pasado durante una operación policial, con saldo de ocho heridos, pero que restableció el flujo de combustible.
Asimismo, el Ejecutivo nombró una comisión encabezada por el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, encargada de trasladar un programa de cinco puntos sobre el desarrollo de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
Ese plan incluía además un paquete de demandas de los dirigentes camireños, entre ellas la instalación en esa zona de
Se acordó la recuperación de los campos de Camatindi y Buena Vista y el establecimiento de una gerencia de Petroandina en la región.
En otra parte de su comparecencia, Morales se refirió a la marcha de cooperativistas mineros en
Recordó a los protestantes, que este martes desconocieron una propuesta de dialogo del gobierno, que todavía se avanza en la redacción de un nuevo Código Minero, texto que será sometido además a la opinión de todos los sectores y gremios.
Al parecer, dijo, están mal informados, de ahí que muchos de sus reclamos sean inconsistentes, precisó.
El Jefe de Estado conminó a los cooperativistas mineros a regresar a la mesa del diálogo, única vía para resolver el contencioso y ratificó que el gobierno no cederá a presiones.
Las cooperativas mineras, añadió, tienen todo nuestro respaldo, pero también deben pagar impuestos.
Al respecto recordó que el pasado año, debido a precios favorables en el mercado mundial, la minería boliviana exportó mil 70 millones de dólares,
Sin embardo, se oponen a la propuesta de pagar impuestos ascendentes a 45 millones de dólares, cuestionó.
Explicó que en el sector de los hidrocarburos, con ingresos por exportaciones superiores a los dos mil millones de dólares el pasado año, pagaron impuesto de mil 500 millones.
A juicio de Morales, detrás de la marcha de los mineros cooperativistas por las calles de
«Sospecho que algunos sindicatos estás siendo utilizados por la minería privada», sentenció.