El presidente boliviano Evo Morales advirtió hoy a hacendados que esclavizan a trabajadores indígenas en la región del Chaco (sur) que los liberen o sus tierras serán expropiadas o revertidas. Durante su segundo informe de gestión, ante el Congreso, Morales hizo un llamado a todas las familias de hacendados que tienen esclavos en sus tierras, […]
El presidente boliviano Evo Morales advirtió hoy a hacendados que esclavizan a trabajadores indígenas en la región del Chaco (sur) que los liberen o sus tierras serán expropiadas o revertidas.
Durante su segundo informe de gestión, ante el Congreso, Morales hizo un llamado a todas las familias de hacendados que tienen esclavos en sus tierras, a trabajar conjuntamente en su liberación y les pidió dejar una propiedad a los indígenas.
Según despachos procedentes de La Paz, el gobernante anunció que, de existir alguna resistencia a proceder de ese modo, entonces aplicará la ley para defender los derechos humanos de las personas.
‘Defendiendo los derechos de las personas, nuestra obligación es expropiar y revertir tierras para que se acaben las familias esclavas en el Chaco’, afirmó ante los legisladores.
Según el jefe de Estado, en el Chaco, en la frontera con Paraguay, aún quedan unas mil familias guaraníes viviendo en la esclavitud y que deben ser liberadas.
Por ese hecho, instruyó que a partir del Ministerio de Desarrollo Rural y de Justicia se ejecute el programa para eliminar la esclavitud en esas regiones.
Lo peor de esta situación es que a los trabajadores esclavizados se les ha prohibido hablar con gente extraña, como denunció el presidente del Concejo Central de Capitanes del departamento de Chuquisaca (CCCH), Alfredo Sánchez.
Sánchez informó que más de mil familias guaraníes, que se encuentran todavía cautivas en el sureste boliviano, no conocen la escuela, el salario ni la tierra propia.
Los guaraníes esclavos de patrones de haciendas, en Huacareta, provincia Hernando Siles del departamento de Chuquisaca, en el Chaco boliviano, no tienen derecho a la libre expresión, y para hablar con ellos hay que pedir permiso al patrón.