El tristemente célebre Decreto 21060 que puso en vigencia la economía de libre mercado en Bolivia y que encomendó a la oferta y la demanda la fijación de los precios del transporte público recibió hoy un nuevo golpe, luego de que el gobierno encargara a la Superintendencia de Transportes la facultad de fijar tarifas máximas […]
El tristemente célebre Decreto 21060 que puso en vigencia la economía de libre mercado en Bolivia y que encomendó a la oferta y la demanda la fijación de los precios del transporte público recibió hoy un nuevo golpe, luego de que el gobierno encargara a la Superintendencia de Transportes la facultad de fijar tarifas máximas para el transporte interdepartamental.
El director Nacional de Transportes Luis Valda reiteró que a través del DS 28710 se pretende coordinar entre el Viceministerio de Transportes y la Superintendencia del área el estudio de las bandas de precios del transporte interdepartamental. Afirmó que es necesario regular las tarifas, sobretodo para precautelar la economía de los pasajeros. «Es prioridad establecer una banda de precios, porque hemos visto que la gente lleva sus billetes contados para hacer un ida y vuelta en un transporte interdepartamental, y sucede que a veces se encuentra con la sorpresa que el pasaje subió de costo y eso les desequilibra en cuanto a su economía», explicó.
El superintendente de Transportes Wilson Villarroel explicó que las tarifas fijadas son las máximas de referencia. Las empresas puede rebajar el valor de los pasajes, pero de ninguna manera subirlos por encima de los topes fijados. Además, las empresas están obligadas a emitir factura por los servicios que prestan.
A partir de la fecha, los boletos a Oruro (227 km) no podrán costar más de 20 bolivianos en coches normales y más de 30 bolivianos en buses «semicama», es decir aquellos que cuentan con asientos reclinables.
Un viaje a Cochabamba (384 kilómetros desde La Paz) no podrá costar más de 35 bolivianos en un bus normal y 50 bolivianos en un bus «semicama». El boleto a Santa Cruz (857 kilómetros) no debe costar más de 120 bolivianos en coches normales y más de 150 bolivianos en bus cama.
Los viajes La Paz-Potosí (553 kilómetros) en bus normal costarán máximo 55 bolivianos en coche normal y 80 bolivianos en bus semicama, en tanto que el transporte a Sucre (714 kilómetros) no podrá costar más de 65 bolivianos en bus normal, 90 en semicama y 135 bolivianos en coche cama.
Las tarifas máximas fijadas por la Superintendencia de Transportes no establecen otro tipo de cobros en días laborales, en fines de semana o en domingos y feriados.