La organización defensora por los derechos humanos, Amnistía Internacional, denunció que la estrategia militar para enfrentar al crimen organizado iniciada por Felipe Calderón agravó la violencia severamente en el país. La agrupación agregó que la táctica generó, además, un aumento «escalofriante» en las denuncias de violaciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas de seguridad. […]
La organización defensora por los derechos humanos, Amnistía Internacional, denunció que la estrategia militar para enfrentar al crimen organizado iniciada por Felipe Calderón agravó la violencia severamente en el país.
La agrupación agregó que la táctica generó, además, un aumento «escalofriante» en las denuncias de violaciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas de seguridad.
Amnistía detalló que se incrementaron detenciones arbitrarias, tortura, ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas.
En días pasados, la organización recordó que de acuerdo con datos de la sociedad civil mexicana reconocidos por el Grupo de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias en México, «más de 3 mil personas habrían sido desaparecidas desde el 2006».
Del mismo modo, Amnistía añadió que la táctica para enfrentar a los grupos criminales carecía de dinámicas para frenar y garantizar la seguridad para las poblaciones afectadas.
El director ejecutivo de Amnistía Internacional en México, Alberto Herrera, afirmó que con frecuencia las víctimas de los delitos cometidos por las corporaciones policiales son criminalizados y acusados de ser delincuentes sin que esto sea cierto
En el marco del último informe de actividades anual del mandatario mexicano, Amnistía denunció que los defensores de derechos humanos y periodistas han sido objeto de ataques, asesinatos, amenazas e intimidación en represalia por su trabajo.
Sin embargo, Amnistía reconoció avances muy importantes como las reformas en materia de derechos humanos a la Constitución, aprobadas en junio 2011.
A esto se suma la reciente decisión de la Suprema Corte de Justicia de limitar el fuero militar para excluir las violaciones de derechos humanos de la jurisdicción militar.
La organización defensora puntualizo que «sólo con el esfuerzo de las víctimas y sus familiares se ha empezado a desmantelar el muro de impunidad que protege a quienes violan los derechos humanos».