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Juicio y castigo a los verdaderos responsables de la ejecución del luchador social Samir Flores

Fuentes: OLEP

La ejecución extrajudicial de Samir Flores Soberanes llevada a cabo el día 20 de febrero de 2019 frente a su casa en Amilcingo, Morelos nos hace más evidente que mientras quienes organizaron y ejecutaron el terrorismo de Estado sigan impunes continuarán ejecutando, desapareciendo y amenazando a quienes luchan por los derechos del pueblo, contra el […]

La ejecución extrajudicial de Samir Flores Soberanes llevada a cabo el día 20 de febrero de 2019 frente a su casa en Amilcingo, Morelos nos hace más evidente que mientras quienes organizaron y ejecutaron el terrorismo de Estado sigan impunes continuarán ejecutando, desapareciendo y amenazando a quienes luchan por los derechos del pueblo, contra el capitalismo y el contra el neoliberalismo.

La termoeléctrica de Huexca y el Proyecto Integral Morelos (PIM) se llevó a cabo gracias a la política neoliberal, a la reforma energética firmada por los partidos del Pacto por México en el sexenio de Peña Nieto. Esa termoeléctrica se planificó y se construyó en nombre del «Progreso».

La ejecución del luchador social Samir Flores nos vuelve a ilustrar el significado de «Progreso» para los empresarios extranjeros y nacionales: aumentar sus ganancias con base en la explotación de la fuerza de trabajo, la destrucción de la naturaleza y del asesinato de ser necesario.

No somos los trabajadores del campo y la ciudad quienes deseamos mantenernos en la pobreza impuesta por la burguesía; nosotros anhelamos cambios, cambios profundos en lo moral, en lo social, en lo político y sobre todo en las relaciones económicas de producción que nos dan la función de objetos para ser explotados.

Son los grandes intereses económicos y políticos de quienes impulsaron y profundizaron el neoliberalismo quienes desean se conserve esa política o que los cambios no los afecten, a esos empresarios y a esas empresas son a las que hay que investigar por la ejecución de Samir y de los otros, por lo menos, siete luchadores sociales ejecutados en lo que va de este nuevo gobierno.

Son las grandes empresas de capital trasnacional vinculadas a los políticos y las fuerzas de seguridad quienes más se oponen a perder sus privilegios es a ellos, a la alta burocracia atrincherada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a quienes se debe investigar en este caso, pues fueron ellos los principales instrumentos para hundirnos en la noche de terror neoliberal.

A los funcionarios del Estado mexicano de hoy la ley les obliga a investigar y sancionar este crimen, de no hacerlo se volverán, por lo menos cómplices y por lo tanto responsables por omisión. De permitir la impunidad el mensaje es claro, los grupos que quieren conservar sus privilegios económicos y políticos tienen carta blanca para volver a matar, pues no habrá castigo.

La justicia no «empantana» a la sociedad, no la polariza, por el contrario; la justicia hace posible el desarrollo armónico de la sociedad o por lo menos modera la opulencia y la miseria.

Hoy nuevamente los empresarios, los jueces, las fuerzas armadas se convierten en lo que fueron en los tiempos de la Reforma: los conservadores y hoy como ayer aplican los métodos de los conservadores para asesinar y deshacerse de sus opositores.

A Melchor Ocampo, héroe liberal de la Reforma, lo sacaron de su casa las bandas de conservadores comandadas por Zuloaga, Márquez y Cajiga y lo llevaron hasta la hacienda de Caltengo para asesinarlo el 3 de junio de 1861, le sacaron el corazón y colgaron su cuerpo de un árbol. Su cruel asesinato fue por luchar contra el poder de la Iglesia, de los grandes comerciantes, del generalato y sus fueros.

Conservadores de hoy utilizando los mismos métodos de ayer.

Nada comparado con «los gritos y sombrerazos» que el pueblo harto del capitalismo y el neoliberalismo dio en Cuautla, Morelos en contra de una termoeléctrica que si funciona lubricará sus turbinas con la sangre de cientos de asesinados y la sangre de Samir y cuyo sonido atroz llevará los gritos de sus víctimas a quien sea un digno hijo del pueblo.

Nuestra solidaridad con la familia de Samir Flores, con su pueblo, con su organización y con todos aquellos que pueden sentir esta afrenta como propia sin importar nuestras diferencias, pues sólo la unidad de los pueblos y organizaciones antineoliberales y anticapitalistas puede ser el elemento que impulse una verdadera trasformación en todos los aspectos de la vida en México.

¡Castigo a los responsables de la ejecución extrajudicial del luchador social Samir Flores Soberanes!

¡Destruir el neoliberalismo de raíz y construir el socialismo!

Organización de Lucha para la Emancipación Popular

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.