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Justicia para Giovanni

Fuentes: Rebelión

Un mes ha transcurrido del asesinato el pasado 4 de mayo de Giovanni López, trabajador de la construcción de 30 años de edad, a manos de policías de Ixtlahuacán de Membrillos población del área metropolitana de Guadalajara en el Estado de Jalisco. Este crimen pone el dedo en la llaga nuevamente sobre el tema del abuso de poder, la violencia de Estado, la violación constante de los derechos humanos y el autoritarismo común de los cuerpos policiacos y militares, en este caso, Giovanni fue detenido por no portar el cubrebocas por al menos 10 elementos de la policía, fue arrestado, torturado como muestran las evidencias físicas en su cuerpo, baleado en una pierna y finalmente asesinado, todo, durante el tiempo que permaneció detenido por el cuerpo policiaco, las autoridades de la comunidad rápidamente intentaron callar cualquier reclamo de los familiares ofreciendo un soborno de $200,000, un video grabado por la familia (pues Giovanni fue detenido arbitrariamente muy cerca de su hogar) muestra el autoritarismo de los policías y la prepotencia con la cual fueron instruidos para ejecutar las ordenes autoritarias del gobernador de Jalisco Enrique Alfaro Ramírez, quien ha dado muestras de prepotencia desde el inicio de su mandato e incrementadas en el contexto de la pandemia del COVID-19 por sus desplantes políticos de enfrentamiento con la federación en evidente intensión de protagonismo y con sus amenazas a la población para imponerles sus decisiones frente la pandemia.

Giovanni fue arrestado la noche del 4 de mayo y conducido a la cárcel municipal de donde posteriormente fue trasladado en el transcurso de la mañana del 5 de mayo para atención medica falleciendo en el trayecto, el cuerpo tiene claras evidencias de tortura por golpes contundentes, hasta la fecha, los policías involucrados en el asesinato siguen laborando sin ninguna sanción o sin al menos ser puesto a disposición de la justicia, apenas, gracias a la presión social y la difusión del crimen, se ha comenzado un proceso jurídico pero con marcadas irregularidades, pues entre otras cosas, la Fiscalía del Estado de Jalisco, ha dicho en rueda de prensa que la detención de Giovanni fue por una falta administrativa y no por la falta de uso de cubre bocas, como es costumbre en estos casos de evidente violación flagrante de los derechos humanos por la policía se pretende inculparlo de presentar estado de intoxicación de alguna sustancia (no determinada) y por resistirse ante la presencia policiaca, es decir, se quiere por parte de las autoridades culpar a la víctima por el crimen que sufrió, desviar la culpa de los policías asesinos y del gobierno de Jalisco encubriendo el autoritarismo del gobernador y de los cuerpos represivos, no se ha especificado cual fue esa llamada falta administrativa, ante las preguntas de diferentes reporteros durante la rueda de prensa las autoridades de la Fiscalía del Estado de Jalisco evitaron dar información sobre la investigación, no se aclaró el proceso sobre los policías ni sobre el alcalde, lo que sí quedó evidenciado, fue la intensión a toda luz de la Fiscalía de cargar la culpa en las autoridades municipales y deslindar al gobernador y demás instituciones de gobierno estatales. Notablemente fraguan la impunidad.

El clamor social ante este nuevo crimen comienza a sentirse en las calles de Jalisco con manifestaciones que exigen justicia para Giovanni, la respuesta inmediata del Estado es el lanzamiento de gases lacrimógenos y demás acciones represivas. El asesinato de Giovanni es además una nueva afrenta a la clase trabajadora de México, que, sin importar las condiciones adversas de salud y de la economía, han continuado laborando arriesgando sus vidas, la discriminación clasista manifiesta en el autoritarismo que detiene, hostiga y violenta a mujeres y hombres de la clase obrera y sectores populares mientras deja en impunidad a quienes oprimen, explotan y despojan, esta sobre la mesa y a la vista de todos y todas. Este crimen en el contexto actual de lucha antirracista y contra la violencia policiaca-militar, puede ser detonante de grandes movilizaciones y reclamos sociales que permanecen acallados entre los trabajadores y las trabajadoras de México, así como, entre los sectores campesinos, indígenas y populares tanto urbanos como rurales.

Alcemos nuestras voces para generar consciencia, organización y exigir justicia para Giovanni López, castigo a los criminales de todos los niveles y el fin de la represión y autoritarismo policiaco-militar.