Introducción Sólo después de haber formado una sociedad con dos de los antecesores de la CIA: la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) y la Oficina de Inteligencia Naval (ONI). Así como posteriormente con la misma CIA, Charles Lucky Luciano («el afortunado»), es que ha llegado a ser el gángster más famoso de los Estados Unidos, […]
Introducción
Sólo después de haber formado una sociedad con dos de los antecesores de la CIA: la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) y la Oficina de Inteligencia Naval (ONI). Así como posteriormente con la misma CIA, Charles Lucky Luciano («el afortunado»), es que ha llegado a ser el gángster más famoso de los Estados Unidos, después de Al Capone. Y dicha alianza, a la que después se incorporarán con el paso de los años narcotraficantes latinoamericanos, ha devenido en constante y permanente.
Todo a partir de que, en 1942, cuando la denominada «oficina de inteligencia secreta» de la OSS de Washington D.C. estaba dirigida por Earl Brennan, un republicano de Nueva Hampshire y ex funcionario del Departamento de Estado que había pasado su niñez en Italia.
Y la tarea de Brennan era preparar la invasión de Italia y Sicilia. Para lo cual, Brennan abrió un canal de comunicación con el Vaticano, que sería conocido como la Operación Vessel . Y mediante tal operación, su contacto en el Vaticano sería monseñor Giovanni Battista Montini [1], mismo que veintiún años más tarde, en 1963, se convertiría en el papa Pablo VI y en ese momento era un influyente asesor del papa Pío XII.
Resultando entonces que, una vez entablada su relación, Montini le sugirió a Brennan que contratara los servicios de varios italianos exiliados, como masones, dirigentes empresariales y miembros de la mafia. Consejo que siguió Brennan, por lo que viajó a Canadá en 1942 para reunirse con cabecillas exiliados de la mafia italiana y siciliana que habían escapado de la enérgica campaña organizada por Benito Mussolini en su contra. Ataque emprendido por el Duce a la Mafia, después de que, en 1924, Ciccio Cuccia lo insultara públicamente durante un viaje a Palermo.
Después de ello, Mussolini dio inicio a una verdadera ofensiva contra la Mafia, de manera que, los cabecillas mafiosos fueron acorralados, torturados y encerrados en grandes jaulas para ser juzgados públicamente.
Actos que fueron asignados por Mussolini a Cesare Mori, mismo que tuvo como método preferido el interrogatorio de la casseta. El cual consistía en atar al sospechoso a un cajón de madera, donde se le azotaba con un látigo de cuero empapado en agua con sal, se le picaneaba [2], se le apretaban los genitales en una prensa y se le quemaban las plantas de los pies con un cigarrillo [3].
Hechos que llevarían a que, en el año 1942, la mafia siciliana sólo existiera en pequeñas aldeas de montaña tales como Villalba. Mientras que otros cabecillas fueron asesinados o se fueron a refugiar a los Estados Unidos. Triunfo sobre los capos mafiosos, por el cual Mussolini recibió elogios del New York Times, que manifestaba: «La Mafia está muerta, nace una nueva Sicilia«.
Siguiéndose de ahí que, cuando Earl Brennan se reunió con los capos en Montreal, éstos se mostraron muy contentos de cooperar con los enemigos de su perseguidor, Mussolini. Ayudando los jefes de la mafia a Brennan a establecer contactos con los mafiosos sicilianos y también con inmigrantes italianos recién llegados a los Estados Unidos.
Trabajo para el cual, Brennan formó un equipo con tres oficiales de inteligencia: David Bruce, Max Corvo y Víctor Anfuso. Bruce, destacaría por ser el cuñado de Paul Mellon y uno de los rivales más odiados del súper espía Allen Dulle. Así como por llegar a convertirse en comandante de las Operaciones Europeas de la OSS, más tarde en embajador de los Estados Unidos en Londres y también en París, y luego en el negociador principal de las conversaciones de paz de Vietnam a principios de la década de 1970.
En tanto que, Corvo era un soldado raso del ejército norteamericano de origen siciliano y se caracterizó por reclutar a decenas de inmigrantes italianos recién llegados a Nueva York y Connecticut, a los que hizo infiltrar nuevamente en Sicilia durante las semanas previas a la invasión.
Mientras que, por su parte Anfuso era un abogado de Nueva York de origen siciliano, integrante de la maquinaria del partido Demócrata que tenía lazos estrechos con Frank Costello y otros gángsters de la red de Luciano.
Y, tras colaborar en el reclutamiento de inmigrantes sicilianos para la causa aliada, Anfuso reaparecería en Italia cinco años más tarde, pero en ese momento como agente de la CIA en el operativo mediante el cual se arregló el resultado de las elecciones de 1948, donde el dinero de la CIA y los matones de la Mafia ayudaron a revertir lo que había parecido una victoria indudable para los comunistas italianos [4].
El reclutamiento de Charles Lucky Luciano [5]
En Nueva York, Luciano hasta antes de ser reclutado por la CIA, trabajaría el negocio de la prostitución, mismo al cual le dio un nuevo giro comercial. Siendo que, Luciano buscaría a prostitutas que fueran adictas a la heroína y a estas les pagaba con dosis diluidas del narcótico.
De tal forma, obligaría a las prostitutas drogadas a trabajar a un ritmo sobreexplotador. Pero tal explotación llevaría a que, cuando el fiscal de distrito de Manhattan, Thomas Dewey, empezó a tener a Luciano en la mira, las prostitutas con mucho gusto declararon en su contra.
Y ante la ofensiva de Dewey, el psicótico Dutch Schultz, quien era asistente de Luciano aconsejó a éste, asesinar al fiscal. Pero Luciano y Lansky consideraron que sería una imprudente hacerlo ellos mismos, por lo que, mandaron a los asesinos de Murder Inc. a matar a Schultz. Acto que irónicamente facilitaría a Dewey encerrara a Luciano. Puesto que, las prostitutas le contaron todo a Frank Hogan (hombre de Dewey), cuyo estilo seductor y sacerdotal de interrogar le valió el apodo de «Padre Hogan«.
Así, los hombres de Dewey finalmente detuvieron a Luciano en 1936 en Hot Springs, Arkansas. Logrando que a Luciano se le diera una condena de treinta a cincuenta años y, por recomendación de un psicólogo de la prisión -quien advirtió su violento temperamento e historia de consumo de drogas-, se lo sentenció a permanecer incomunicado, con el número de convicto 92168, en Dannemora, la penitenciaría más brutal de Nueva York.
Sentencia ante la cual, entre 1936 y 1942, Lucky Luciano trató de obtener clemencia o libertad condicional en tres oportunidades, pero todas las veces fue rechazada su solicitud. Sin embargo, gracias a que Joey Lanza le hiciera una sugerencia a Haffenden de la Oficina de Inteligencia Naval (ONI), la suerte de Luciano cambia repentinamente.
Siendo que, la Inteligencia Naval empezó a tantear el terreno para contactar al gángster más importante de los Estados Unidos por medio del abogado de Luciano, Moses Polakoff, ex fiscal federal y veterano de Inteligencia Naval en la Primera Guerra Mundial, quien había mantenido estrechos vínculos con la armada desde entonces.
De suerte que, Polakoff le manifestó a Haffenden y a Gurfein, el fiscal de distrito, que se complacería en ayudar a la armada de cualquier manera posible, y creía que Luciano también. Pero Polakoff dijo que había un problema: no conocía a Luciano lo suficiente en lo personal para hacerle ese tipo de oferta. No obstante, el abogado dijo conocer al intermediario perfecto, quien sería Meyer Lansky [6].
Conforme a ello, el 11 de abril de 1942, Haffenden, Gurfein y Polakoff se reunieron a desayunar con Lansky en Longchamps, un restaurante de la calle 58 Oeste de Manhattan. Ahí, Lansky manifestó que con gusto le haría la propuesta a Luciano, pero les dijo que el gángster se mostraría más dispuesto a cooperar si lo sacaban de la cárcel de Dannemora y lo trasladaban a una prisión menos austera.
Por lo que, de ahí, la Oficina de Inteligencia Naval envió con rapidez una carta al director de institutos penales de Nueva York, John A. Lyons, para solicitar que se trasladara a Luciano a «mejores instalaciones», donde podría ser interrogado por oficiales de la ONI, entre «otros» [7].
Así, el 17 de mayo, Lansky y Polakoff se encontraron viajando en tren a Great Meadows y le transmitieron a Luciano que Inteligencia Naval requería su colaboración. Solicitud ante la cual según Lansky, al principio, Luciano se mostró reacio a aceptar la propuesta de la Marina, y aceptó sólo a condición de que el arreglo se mantuviera en secreto.
Declarando además Lansky que, Luciano al tener una orden de deportación adjunta a sus documentos, no quería que su colaboración con el gobierno de los Estados Unidos se hiciera pública porque cuando fuera deportado y regresara a Italia, podrían lincharlo. Secrecía solicitada que los oficiales de inteligencia no tuvieron ningún problema en mantener, ya que ellos mismos tenían buenas razones para guardar silencio.
Los beneficios obtenidos por la OSS y la ONI de su la alianza con la mafia [8].
Una vez logrados los acuerdos, en reuniones posteriores, Lansky y Luciano planearían la logística de lo que la Marina tanto quería conseguir: que la Mafia ordenara a los trabajadores portuarios cooperar en una campaña contra el sabotaje [9].
Por consiguiente, Lansky se reuniría con Haffenden y otros oficiales de Inteligencia Naval en el centro de operaciones que éstos tenían en el hotel Astor, para organizar la infiltración de agentes de Inteligencia Naval en el puerto y los sindicatos que ahí funcionaban. Época en la cual, además, se despachaban cargamentos especiales de material bélico a Gran Bretaña y a África del Norte para la planeada invasión a Europa.
De forma que, la Marina no sólo estaba preocupada por los actos de sabotaje, sino también por las huelgas y los paros laborales, en los cuales destacaba el activismo sindical de Harry Bridges [10], sindicalista de origen australiano que tenía estrechos vínculos con el Partido Comunista y que había dirigido el paro general de 1934 en el puerto de San Francisco.
Además de que, para 1942, Bridges aparecería en la costa Este. Trasladándose Bridges de Boston a Nueva York, alentando a los trabajadores portuarios a abandonar la Asociación Internacional de Estibadores infestada de mafiosos y en su lugar los invitaba a unirse a su Sindicato Internacional de Estibadores y Trabajadores de Depósitos.
Siguiéndose de ahí que, Haffenden y Joey Socks Lanza en 1942, preocupados por el activismo sindical de Bridges, cuyo nombre cifrado era Brooklyn Bridge. Interrumpieron una huelga planeada por Bridges, interrupción que estaría bajo la supervisión de Albert Anastasia, a quien Luciano describiría como una persona «dispuesta a matar a todo aquel al que tuviera entre cejas».
Así, semanas más tarde cuando Bridges apareció en una concentración en la ciudad de Nueva York, Lanza se ocupó del asunto personalmente: «Tuve una pelea con él. Le di una paliza, y nada más», indico. Entramado dentro del cual, además, entre 1942 y 1946, se asesinaron a veintiséis dirigentes sindicales y trabajadores portuarios, supuestamente asesinados y arrojados al río por la Mafia, en connivencia con Inteligencia Naval, de manera que nunca se esclarecieron los hechos [11].
Logros a los cuales además se le añadirá el hecho de que, la Marina se adjudicaría un golpe de inteligencia más importante en Sicilia. Después de que, en enero de 1943 Winston Churchill y Franklin Delano Roosevelt se reunieran en Casablanca para planificar la invasión a Europa del sur.
Eligiéndose a Sicilia como punto inicial de ataque, pero existieron problemas como el hecho de que, los Aliados no tenían mapas, tablas de mareas, planos de muelles ni ningún tipo de inteligencia topográfica similar que les pudiera ayudar a desembarcar. Mientras que, por el contrario, las potencias del Eje tenían desplegados 400 mil soldados en Sicilia y aunque había partisanos pro-aliados, la información que se tenía sobre ellos era poco clara.
Siendo así entonces que, la Oficina de Inteligencia Naval ordenó al comandante Haffenden interrogar a inmigrantes recién llegados de Sicilia, lo cual él hizo, una vez más con la colaboración de Luciano, quien a su vez puso el asunto en manos de Joe Adonis [12].
Adonis, a quien el senador Estes Kefauver señalara como «el gángster más siniestro de todos», reunió a cientos de sicilianos para que fueran interrogados por los oficiales de la ONI, Paul Alfieri y Anthony Marzulla, y por el cartógrafo, George Tarbox.
Interrogatorios que arrojaron más de 5.000 expedientes y cuyas copias se enviaron a Washington, donde estaban los encargados de planificar la invasión. Además de que, Tarbox también pudo confeccionar decenas de mapas en gran escala de caminos, pasos de montañas, puertos y ubicaciones de posibles colaboradores.
Así como desde ese momento, Haffenden empezó a contemplar la idea de enviar a Luciano a Sicilia antes de la invasión para contactar a nativos del lugar y conseguir que apoyasen los planes bélicos norteamericanos. En tal sentido, Haffenden elaboró un minucioso plan para conseguir que el gobernador de Nueva York, Thomas Dewey, indultara a Luciano, tramitarle esos documentos y mandarlo a Portugal, y de ahí a Sicilia.
Propuesta que seguiría su curso hasta llegar al secretario naval, quien rechazó el plan de inmediato. Por lo que, Luciano habría de pasar tres años más en la prisión de Great Meadows.
Aun así, para 1943, junto con la primera oleada de tropas invasoras aliadas, viajarían también varios oficiales instruidos por informantes que habían pasado por el filtro de la dupla Haffenden-Luciano. Quienes, dirigidos por el teniente Paul Alfieri, apenas tocaron tierra, establecieron contactos con miembros de la mafia siciliana, quienes lo llevaron a las oficinas del Comando Naval Italiano en una incursión ilegal nocturna, la cual les permitió alzarse con información, mapas de campos minados, listados de códigos y datos sobre dónde estaban desplegadas las tropas del Eje [13].
Los beneficios obtenidos por la mafia de su alianza con la OSS y la ONI.
Actos por los que obtendría en contraparte la mafia, la liberación de cientos de mafiosos. Y más aún, cuando se nombraron autoridades civiles en toda Sicilia, los Aliados colocaron a decenas de capos mafiosos como alcaldes, incluso a Don Calogero Vizzini [14]. Además de que, los comandantes aliados hasta llegaron a nombrar coronel honorario a Don Calo, quien devolvió el favor utilizando su poder para eliminar a sus rivales y destruir copias del extenso prontuario que tenía.
Siendo el oficial clave que supervisó dicho triunfo, el director del Gobierno Militar Aliado (AMGOT) de Italia del sur y Sicilia, el coronel Charles Poletti, ex vicegobernador de Nueva York. De manera que éste, eligió para que fuera su intérprete a Vito Genovese [15].
Toda vez que, Genovese había administrado la red de juegos y narcotráfico de Luciano en Nueva York hasta 1936, y cuando abandonó Nueva York para huir de los cargos en su contra que presentó Thomas Dewey por el asesinato de los gángsters rivales Willie Gallo y Ferdinand the Shadow («la sombra») Boccia. Luciano le ordenó a Meyer Lansky que se ocupara de que Vito llegase sano y salvo.
Y una vez en Italia, siendo que Genovese conocía la enemistad que tenía Mussolini con la Cosa Nostra, se dirigió con un obsequio apropiado para el Duce: US$ 200.000 en efectivo. Dinero mediante el cual, se creó la amistad entre Mussolini y Genovese, hasta tal punto que cenaban juntos y Mussolini lo ponía a prueba sobre sus conocimientos de cultura norteamericana, especialmente sobre cine.
Logrando así Genovese pronto codearse con la aristocracia italiana y con los gerifaltes del partido de Benito Mussolini. Presentandose ante ellos y ante el Duce como una víctima de la «plutocracia americana«, cuando no de «la prepotencia anglosajona«.
Y, como contrapartida por sus donaciones, Mussolini le daría el título de «commendatore«, el máximo título civil que otorgaba el Gobierno, y miró hacia otro lado cuando el mafioso empezó a exportar drogas hacía los EE.UU, de forma casi industrial [16].
Sin embargo, en 1942, Genovese sería un agente de la alianza entre Luciano e Inteligencia Naval, así como servía de vínculo entre espías de la marina y los capos mafiosos de Sicilia occidental, especialmente de Don Calo. Y, cuando Poletti (a quien Luciano más tarde describió como «un buen amigo nuestro») llegó a Nápoles para asumir el cargo de director del AMGOT, Genovese lo recibió con un obsequio de bienvenida: un Packard modelo 1939.
Mientras que por su parte Genovese, sacó el máximo provecho de su lugar cerca de Poletti, ampliando sus operaciones en el mercado negro napolitano, para lo cual uso camiones militares de los aliados, con la venia de Don Calo, por lo que entre ambos sacaban del país cargamentos ilegales de aceite de oliva, azúcar y otros productos que salían por el puerto aliado de Sicilia, perpetuándose así el mismo sabotaje que la ONI pretendía extinguir con la ayuda de la Mafia en Nueva York.
Y no obstante que, Orange Dickey, un ex agente del FBI que trabajaba para el ejército de Estados Unidos e investigaba las operaciones del mercado negro en Italia, tras rastrear la sociedad Genovese-Don Calo, detuvo a Genovese y lo mandó de vuelta a Nueva York para enjuiciarlo.
Después de la muerte del principal testigo en su contra, con «suficiente veneno como para matar ocho caballos», Genovese fue absuelto, y a partir de entonces gozó de una extraordinaria prosperidad: se convirtió, una vez más, en el jefe del negocio de las drogas de Luciano en Nueva York, y, en última instancia, en «jefe» de la ciudad y el gángster más sanguinario [17].
La deportación de Luciano y el crecimiento del narcotráfico en Italia
El 8 de mayo de 1945, el día de la victoria aliada en Europa, Moses Polakoff presentó al gobernador Thomas Dewey un pedido de clemencia para Luciano aduciendo que el mafioso «había brindado ayuda valiosa, sustancial e importante a los mandos militares de los Estados Unidos, y se sostenía que su información y cooperación habían contribuido con la guerra».
Pedido de Polakoff que además incluiría una carta del Comandante Haffenden de Inteligencia Naval, quien escribió con entusiasmo sobre el papel patriótico de Luciano: «Estoy seguro de que la mayoría de la inteligencia desarrollada en la campaña de Sicilia fue responsable directa del número de sicilianos que surgieron de los contactos de Charles «Lucky» Luciano».
Así como, Polakoff también solicito una carta de apoyo al ex fiscal de distrito, Murray Gurfein, en ese momento coronel de la OSS. Y mediante tales actos, el 3 de diciembre de 1945, la Comisión de Libertad Bajo Palabra de Nueva York votó por unanimidad conceder clemencia a Luciano a condición de que se lo deportara a Italia. Lo cual fue posible porque, a diferencia de su padre y hermanos, Lucky nunca había adquirido la ciudadanía norteamericana.
En tanto que, Dewey evaluó el asunto un mes, tiempo durante el cual lo aconsejaron con prudencia tres personas clave, amigos suyos, el Secretario Naval James Forrestal, John Foster Dulles y Allen Dulles de la OSS. Y tras tales consultas, el 3 de enero de 1946, Dewey concordó con la Comisión de Libertad Condicional y conmutó la sentencia de Luciano; diciendo lo siguiente: «Cuando Estados Unidos entró en la guerra, los servicios armados solicitaron la ayuda de Luciano para inducir a otros a que entregaran información sobre posibles ataques enemigos. Al parecer, él colaboró con ese objetivo, aunque no se sabe bien el verdadero valor de la información obtenida» [18].
Hechos que llevarían a que el 9 de febrero, una alegre multitud de mafiosos se reuniera en el vapor de carga «Laura Keene«, al que habían llevado a Luciano después de ser liberado de Great Meadows. Donde se encontrarían Frank Costello, Joe Adonis, Mikey Lascari y Meyer Lansky. Y cuando Luciano llegó a Italia, fue recibido por una banda vestida con uniformes de color rojo, blanco y azul que tocaba «Barras y Estrellas.»
Y tan pronto como se radico Luciano en Nápoles, controlo las operaciones del mercado negro abandonadas por Vito Genovese. Así como estableció lazos comerciales con Don Calo en Sicilia, de manera que, entre ambos crearon algunas empresas pantalla, como una fábrica de caramelos, una proveedora de insumos hospitalarios y una exportadora de frutas. Hechos que llevaría a que se llegaran a hacer negocios inmobiliarios con la princesa Ana de Francia.
Pero como además de Luciano, durante los siguientes cinco años, más de quinientos gángsters nacidos en Italia fueron renviados de vuelta a su tierra. Entre todos ellos y Luciano conformaron la principal fuerza laboral del plan más importante de Luciano: el de dar un nuevo ímpetu a su imperio mundial de drogas.
Colocándose la heroína como el centro del negocio. Al principio, Luciano conseguía un suministro casi ilimitado, y a bajo precio, de un proveedor legal, la Schiaparelli Company, un importante laboratorio farmacéutico con sede en Milán.
De manera que, Luciano compraba a Schiaparelli doscientos kilos de heroína por año, para luego embarcarla hacia a Cuba, donde la adulteraban y desde ahí la ingresaba de contrabando en Miami y Nueva York. Operaciones que en Cuba eran supervisadas por Santos Trafficante y su hijo, Santos Jr.
Indulgencia oficial que tendría Luciano hasta mediados de la década de los cincuentas. Y si bien Anslinger había mandado varios agentes de la BNDD, en particular a Charles Siragusa, para seguirle los pasos a Luciano en Italia, ellos nunca pudieron detener a nadie por mucho tiempo.
De hecho, hasta 1956, no se detuvo a ninguno de los cabecillas en la escala jerárquica mafiosa, aun cuando una vez Siragusa descubrió a Luciano con casi media tonelada de la droga, a la que estaban preparando para embarcar a La Habana. Así, Lucky Luciano fue el primer «Don Escurridizo».
De manera que, finalmente Lucky Luciano moriría en 1962 de un infarto en el aeropuerto de Nápoles. Lugar donde se iba a encontrar con un productor de Hollywood quien estaba interesado en hacer una película de su vida.
Y, semanas antes de morir, Luciano había sido entrevistado por un periodista de la Associated Press, quien le preguntó por qué había sido liberado de la cárcel. A lo que respondio: «Fui perdonado por los importantes servicios que presté a los Estados Unidos», para luego sonreír abiertamente y añadir. «Y, porque, después de todo, se dieron cuenta de que era inocente» [19].
Los nexos entre la CIA y la mafia corsa
La asociación con traficantes de droga mafiosos de Sicilia sería un reflejo de lo que posteriormente sería el vínculo que tendría la CIA con el bajo mundo de Marsella, puesto que dicha zona sería parte del campo de batalla durante la Guerra Fría.
Siendo que, Marsella era un centro de distribución de las provisiones que se enviaban a Europa por el Plan Marshall. Pero además de ello, en ese puerto los sindicatos se encontraban dominados por los comunistas, que eran fuertes, y por lo que, además, los trabajadores portuarios se rehusaban a cargar provisiones militares en barcos franceses que se dirigían a la Indochina francesa, en donde Ho Chi Minh lideraba la lucha por la independencia [20].
Hechos que desagradaban a los EE.UU, además de que, por tales motivos, políticamente, los corsos de Marsella o mafia corsa se encontraría dividida durante la guerra [21].
Toda vez que, muchos corsos serian enérgicos antifascistas, en parte por el declarado objetivo de Mussolini de anexar Córcega a Italia. Y por ello, algunos corsos trabajarían del lado de la Resistencia francesa, donde eran muy apreciados.
De forma que, por un lado, se encontrarían, dos de los cabecillas mafiosos de la ciudad como, François Spirito [22] y Paul Carbone [23], quienes se habían aliado con el alcalde, Simón Sabiani, un colaborador de los nazis.
Y por el otro, entre los jefes mafiosos de Córcega, que estarían del lado de la resistencia serían los hermanos Antoine y Barthelemy Guerini. No obstante que ambos habían aprendido el oficio siendo matones de Paul Carbone, pero luego se unieron a la Resistencia [24].
Motivos por los que, los Guerini escondían a agentes de inteligencia norteamericanos e ingleses en su club nocturno y eran recompensados por sus servicios con armas y otros suministros, de los que sacaban enormes ventajas en el mercado negro.
Mientras que, tanto Spirito como Carbone estaban al mando de la policía secreta de Sabiani, que trabajaba localizando y asesinando a miembros de la Resistencia, quienes a su vez lograron matar a Carbone en 1943. Pero Spirito no corrió la misma suerte, y después de la guerra logro llegar a Nueva York, donde se convirtió en un personaje importante del tráfico de heroína [25].
Situación que se agravaría, en 1945, cuando una coalición de comunistas y socialistas llegó al poder en Marsella, y una de las primeras cosas que realizaron fue declarar la guerra a las bandas de corsos. Acontecimientos que alarmaron no sólo a los gángsters corsos sino también a Estados Unidos y a Charles De Gaulle. Quienes organizaron rápidamente un contraataque.
Así, tendrían por objetivo, dividir y conquistar rompiendo la frágil coalición de izquierda. Y para ello, la CIA recurrió a los sindicatos norteamericanos reunidos en la AFL-CIO ( American Federation of Labor-Congress of Industrial Organizations ), misma que, desde el final de la guerra hasta principios de la década de 1950, entregaría un millón de dólares anuales a los socialistas, a cambio de que rompieran todo lazo político con los comunistas [26].
Hechos que llevarían a que, para el año 1947, el partido de De Gaulle recuperara el mando, y el nuevo alcalde de Marsella fuera el derechista Michele Carlini.
Y entre ambos, una vez en el poder, impusieron un régimen de austeridad que incluyó un aumento de la tarifa de los ómnibus. Lo que provocó una serie de huelgas y boicots, que culminaron en una gran concentración realizada el 12 de noviembre de 1947, después de que los matones de Guerini, siguiendo órdenes de Carlini, atacaran a concejales del partido Comunista.
Actos que tendrían como respuesta que la gente saliera a las calles y se encontraran con una lluvia de balas que les dispararon los Guerini y sus hombres. Resultando entonces que, decenas de personas fueron heridas, y una fue asesinada. Y, aunque muchos testigos identificaron a los Guerini, los fiscales de Carlini se negaron a presentar cargos. Por lo que, inmediatamente después, una huelga general estalló en toda Francia, y tres millones de personas abandonaron su trabajo.
Eventos ante los que la CIA envió un grupo a Marsella con armas y dinero para los Guerini, que fueron entregados por el agente Edwin Wilson (éste alcanzó notoriedad muchos años después por haber trabajado para Moammar Gadhafi).
Así, los agentes mafiosos de la CIA mataron a importantes huelguistas, sobornaron a infinidad de trabajadores rompehuelgas y promovieron disturbios en el puerto. De forma que, a principios de diciembre la huelga había sido quebrada.
Pero además de eso, tres años después se repetiría el mismo modelo. Cuando, una vez más, una huelga que apuntaba específicamente a los cargamentos de armas y suministros destinados a las fuerzas francesas en Indochina bloqueara los muelles de Marsella.
Ante ello, de nuevo, la CIA, junto con el Servicio Secreto Francés (SDECE), convocó a los Guerini para que organizaran una campaña de terror contra los huelguistas. Ingresando el dinero de la CIA a raudales en Marsella, y en las cuentas bancarias de los Guerini. Lo cual tendría una vez más como resultado que la huelga fuera aplastada y muchos sindicalistas fueran asesinados, la mayor parte de los cuales fueron arrojados de los muelles [27].
Todo, gracias a dos millones de dólares proporcionados por la CIA. Ya que, con ese dinero el dirigente de la AFL, Irving Brown, hizo llegar desde Italia a esquiroles, que puso disposición de su aliado, Pierre Ferri-Pisani [28]. Mismo que pondría a trabajar a los esquiroles, así como a una escuadra de criminales corsos en los muelles, que en su conjunto lograban descargar las armas provenientes de Norteamérica, consiguiendo así romper la huelga.
En tanto que, los hombres de Guerini se encargaban de golpear a los piquetes de la huelga comunistas, con lo que también se le permitiría a las pandillas y a los esquiroles llegar a los muelles, para poder empezar a descargar las municiones y los víveres.
Métodos mediante los cuales, el 13 de marzo los representantes del gobierno estuvieron en la disposición de anunciar que, a pesar de un boicot persistente por parte de los trabajadores comunistas, 900 portuarios reforzados por la tropa habían restablecido el servicio normal del puerto de Marsella [29].
Lucky Luciano, la CIA y el tráfico de heroína en Francia
Los Guerini obtendrían gran poder y notoriedad por el papel que jugaron en el aplastamiento de la huelga de 1947, hasta afirmarse como los nuevos jefes de la mafia corsa. Pero, aun cuando la CIA contribuiría al restablecimiento de su poder, no sería sino hasta la huelga de portuarios de 1950, cuando los Guerini adquirirían suficiente fuerza como para tomar el control de los muelles de Marsella.
Influencia política y dominio sobre los muelles que les permitieron tener las condiciones perfectas para el desarrollo de los laboratorios de heroína de Marsella, siendo que, la CIA al proporcionar dinero y apoyo a las organizaciones corsas, elimino el último obstáculo que impedía las operaciones de contrabando de los corsos en Marsella [30].
Hechos que coincidirían, con la necesidad de Lucky Luciano, de tener nuevos proveedores. Siendo que, en 1950, cuando Lucky Luciano se encontraba radicado aún en Nápoles, pero habiéndosele cortado totalmente el suministro de heroína del laboratorio Schiaparelli, buscaría una nueva fuente de donde obtener la droga.
Para ello, Meyer Lansky viajaría a Nápoles reuniéndose con Luciano, así como fue a Marsella para establecer una sociedad con los Guerini y a Suiza para abrir las cuentas bancarias pertinentes, algunas de las cuales se abrirían en un banco propiedad de la Mafia llamado Banco de Intercambio e Inversión de Ginebra.
Y siendo que, además, tanto Lansky como Luciano querían abandonar el vulnerable negocio de la producción de heroína para concentrarse en la venta de droga. Por lo que, la producción le sería asignada a los Guerini y a otras organizaciones de corsos con asiento en Marsella. Toda vez que, los corsos ya poseían una red de producción mundial, con laboratorios en Indochina, América Latina y Medio Oriente.
Desarrollando los corsos sus actividades ilegales desde las décadas de 1920, 1930 y 1940. Donde los fundadores fueron Paul Carbone y Francois Spirito, dos franceses de origen italiano, igual que serían tantos otros futuros integrantes de las mafias francesas [31].
Así, se fraguaría la conexión francesa, por medio de la cual ingresaría el ochenta por ciento de la heroína a los Estados Unidos. Empezando con los cultivos de amapola en Turquía, luego se hacia la pasta de opio en Siria y Líbano, que a su vez era procesada como heroína en Francia, para llegar finalmente al mercado neoyorquino vía La Habana [32].
Todo lo cual contaría con la complacencia de los organismos del gobierno norteamericano, principalmente la CIA. Motivos por los cuales, entre 1950 y 1965 no se detendría a ningún miembro importante de esa conexión francesa [33].
De manera que, la protección otorgada por la CIA a la organización de tráfico de droga integrada por los corsos se mantendría durante varios años hasta la década de 1970, y donde resaltaría el caso de Frank Matthews. Mafioso que emergería de un empobrecido barrio de negros de Durham, Carolina del Norte, y se convertiría en uno de los más importantes traficantes de heroína de la Costa Este, con un ingreso superior a los 130 millones de dólares al año [34].
Bibliografía.
Boullosa Carmen, Wallace Mike. Narco historia. Cómo Estados Unidos y México crearon juntos la guerra contra las drogas. Taurus, 2016.
Hari Johann. Tras el grito. Paidós, 2015.
Hemerografía.
Anuario Colombiano de Historia Social y de la Cultura 31, 2004. La conexión francesa y el narcotráfico en cuba a mediados del siglo XX. Por: Eduardo Sáenz Rovner.
Notas
[2] La picana eléctrica es un instrumento de tortura utilizado en algunos momentos históricos por la policía y el ejército en Argentina y en algunos países de Sudamérica. Se cree que fue Polo Lugones, hijo de Leopoldo Lugones y jefe de policía durante la dictadura de José Félix Uriburu, quien la introdujo como método de tortura. Según el historiador Felipe Pigna, la nieta de Leopoldo Lugones fue torturada con la picana que su padre inventó. La picana da golpes de corriente o descargas sostenidas en contacto con el cuerpo y sus efectos en las partes más delicadas son devastadores, por lo cual los represores suelen aplicarlas en esos lugares. Ampliamente utilizada por los grupos de tareas del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional, la dictadura militar que gobernó la Argentina durante buena parte de las décadas de 1970 y 1980, los testimonios acerca de su utilización y efectos físicos y psicológicos están ampliamente recogidos en el informe Nunca Más. PICANEAR – Definición y sinónimos de picanear en el diccionario …
https://educalingo.com/es/dic-es/picanear
[3] De tal manera, cientos de capos mafiosos, o «réprobos» como los llamaba Mori, fueron aprehendidos, torturados y luego fusilados en la plaza pública de Palermo. Sin embargo, Mori pronto dejó que este plan de exterminar a los mafiosos de la Societá Onorata se le subiera a la cabeza.
Mandó a construir arcos triunfales en su honor con la inscripción Ave Caesar, y entabló juicios a los delegados de Mussolini en Sicilia. Por lo que, pronto fue destituido del cargo y se deshicieron de él en la forma tradicional. Extraído de: La Mafia en la Segunda Guerra Mundial: «La suerte de Lucky» – De …
www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/
[4] La Mafia en la Segunda Guerra Mundial: «La suerte de Lucky» – De …
www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair
[5] Charles Lucky Luciano, cuyo verdadero nombre era Salvatore Lucania, nació el 11 de noviembre de 1897, en la aldea de Lecara Freddi, cerca de Palermo, capital de Sicilia. En 1907 la familia Luciano se fue a vivir al bajo Manhattan, donde su padre, Anthony, consiguió trabajo en una fábrica de camas de bronce. Al poco tiempo, Charles se volcó a la vida delictiva, y en el año 1916 ya lo habían detenido por venta de drogas, el primero de una serie de arrestos que se sucedieron a lo largo de la década siguiente por una gama de delitos que iban desde atraco a mano armada pasando por narcotráfico y tenencia de armas hasta contrabando. Muchos de estos encontronazos con la ley eran producto de su violenta lucha por dominar la famosa banda delictiva Five Points.
En 1918 Luciano formaba parte de una organización que iba a existir durante medio siglo y que lo convertiría en el gángster más poderoso del mundo. A fines de octubre de ese año, Luciano estaba ocupado en la mundana tarea de golpear a una de sus prostitutas mientras un nervioso Bugsy Siegel, de catorce años en ese momento, observaba, con una navaja en la mano. Como los gritos de la prostituta bajaban hasta la calle, los oyó un hombre joven llamado Meyer Lansky, quien entró en la casa de piedra rojiza, subió corriendo, empujó la puerta, golpeó a Luciano en la nuca y lo separó de la mujer. La policía de Nueva York, que venían pisándole los talones a Lansky, detuvo a todos como correspondía. En el furgón policial, Lansky y Luciano entablaron una conversación y pronto descubrieron que compartían grandes áreas de interés. En aquel entonces, Lansky era el joven cerebro de la banda de Lepke y Gurrah, que manejaba gran parte del comercio de la heroína de Nueva York.
No pasó mucho tiempo hasta que Lansky convenció a Luciano de que la heroína era la mercancía perfecta del mercado negro: era fácil de contrabandear, existía una posibilidad de monopolizar el mercado y era sumamente rentable. El ingreso de Luciano en el narcotráfico lo apartó de los capos más viejos de la mafia siciliana, que se habían mantenido al margen del negocio de la droga, no por objeciones morales de ningún tipo sino porque pensaban que podría generar un antagonismo innecesario con la policía. El 16 de octubre de 1929, los viejos capos secuestraron a Luciano, lo llevaron a un depósito de Nueva Jersey, lo colgaron de las muñecas a una viga, le pegaron una cinta adhesiva en la boca, lo golpearon con un bate, le cortaron el cuello, lo apuñalaron con un punzón para picar hielo y lo dieron por muerto. Los matones no verificaron sus signos vitales, lo cual fue un gran error porque Luciano logró liberarse y pronto empezó a vengarse en forma rigurosa.
Durante los cuatro años siguientes, Luciano, Lansky y sus socios de Murder Inc. (Asesinato S.A.) eliminaron a más de setenta capos de la vieja guardia y crearon una organización delictiva que según Lansky estaba inspirada en la Standard Oil Trust de John D. Rockefeller. La junta directiva de la organización mafiosa estaba compuesta por Lepke, Gurrah, Luciano, Lansky, Siegel, Abner Longie («el largo») Zwillman, Vito Genovese, Dutch Schultz y Joe Adonis. Lansky una vez se jactó de que el imperio del hampa que habían levantado era «más grande que la US Steel».
Como corresponde a quienes levantan imperios, Lansky y Luciano querían mantener el orden y evitar encontronazos conflictivos y sangrientos con la ley, para lo cual crearon un amplio sistema de coimas y sobornos. En la ciudad de Nueva York, éstos eran supervisados por Frank Costello, a quien el senador Estes Kefauver bautizó el «Primer Ministro» del hampa. Extraído de: La Mafia en la Segunda Guerra Mundial: «La suerte de Lucky» – De …
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[6] Meyer Lansky nació con el nombre de Majer Suchowliński en Grodno (hoy, Bielorrusia), donde su familia había sufrido los temibles «pogroms» contra los judíos. En 1911, sus padres se mudaron a los Estados Unidos asentándose en el Lower East Side de Manhattan, Nueva York. Allí el joven entró en contacto con el también joven siciliano Lucky Luciano, quien aprovechando que era mayor y más alto que Meyer -bajito, raquítico y con orejas de soplillo- le robo el almuerzo no sin darle antes una paliza.
Sin embargo, después de sufrir varios encontronazos más con Luciano, el niño judío, que siempre había resistido sin derramar una sola lágrima las agresiones del siciliano, sufrió el ataque de un grupo de adolescentes irlandeses. Pero al observar la escena, Luciano sacó su navaja y espantó a los irlandeses. Incidente que marcaría el origen de la asociación criminal más influyente del siglo XX. Extraído de: ABC internacional. Meyer Lansky, el gánster judío que encumbró a la Mafia y al implacable Lucky Luciano.
[7] Un memorándum de la ONI documenta que «la Oficina de la División de Inteligencia solicitó el traslado de Charles Lucky Luciano de la prisión Clinton [es decir, Dannemora] a la prisión de Great Meadows para poder acceder a él con mayor facilidad… se nos notifica que se establecieron contactos con Luciano a partir de entonces y que su influencia sobre otros informantes del hampa llevó a que éstos colaboraran con Inteligencia Naval, lo cual se consideró útil para la Marina.»
El 12 de mayo Luciano fue trasladado a Great Meadows, una prisión relativamente nueva en las afueras de Albany. Lyons dio permiso para que Luciano se reuniera con Lansky y que las reuniones se llevaran a cabo sin los procedimientos de seguridad acostumbrados para los visitantes, como la toma de huellas dactilares y la presencia de un guardia. El director de institutos penales, John Lyons, dijo que con gusto le había hecho esas concesiones a Luciano «para salvar la vida de un único soldado en un solo buque norteamericano». Extraído de: www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair.
[8] La Operación Underworld. En la cual el gobierno de los Estados Unidos reclutó a criminales para buscar infiltrados nazis. Extraído de: ABC internacional. Meyer Lansky, el gánster judío que encumbró a la Mafia y al implacable Lucky Luciano.
[9] Luciano le dijo a Lansky que contactara a Johnny Cockeyed («el bizco») Dunn, jefe del puerto del río Hudson y matón de Luciano en la Asociación Internacional de Estibadores; a los hermanos Camarda, que manejaban el muelle de Brooklyn; a Mickey Lascari, amigo de la infancia de Luciano que dirigía las operaciones de Nueva Jersey; a Frank the hands («manos») Costello, secuaz político de Luciano y a Albert Anastasia, presidente de la organización mafiosa, quien se encargaría de todo aquel que no cumpliera las órdenes.
Luciano le ordenó a Lansky: «Ve y menciona mi nombre, que mientras tanto yo voy a hacer correr la voz, así no tienes ningún inconveniente».
En las semanas siguientes, hubo un desfile continuo de capos mafiosos hacia la prisión de Great Meadows para recibir instrucciones personales de Luciano. Los visitantes que contaban con la autorización personal de Lyons, el director de institutos penales, eran Lanza, Costello, Joe Adonis y Bugsy Siegel. La frase que Lyons utilizaba para justificar estas visitas era: «así el interno colabora con los planes para ganar la guerra». Extraído de: www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair.
[10] En 1920, llegó a San Francisco como marinero. Durante los siguientes sesenta años, él tendría un profundo efecto en el movimiento obrero norteamericano y su relación con el resto del mundo.
Él ayudaría a crear un sindicato con fuertes principios democráticos, los beneficios innovadores para sus miembros, y la creencia en la acción social y política en nombre de los trabajadores de todo el mundo.
Acusado de ser un comunista, también soportaría veintiún años de juicios y audiencias con la intención de ser eliminado de la dirección del sindicato y deportarlo de los Estados Unidos. Extraído de:
HARRY BRIDGES y la lucha sindical de los estibadores ~ Estibadores …
estibadores.cgtvalencia.org/2016/12/harry-bridges-y-la-lucha-sindical-de.html
[11] En primer lugar, la alianza tuvo consecuencias fatales para el sindicalismo honesto y los sindicatos izquierdistas de la costa Este, y para la ILA (Asociación Internacional de Estibadores), devastados por el gangsterismo y la corrupción. Extraído de: www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair.
[12] Amigo de LUCKY LUCIANO y de FRANK COSTELLO. Residía en Fort Lee, en Las Palissades de New Jersey y tenía una casa-bunker en Brooklyn. Sobrepasó en poder a ALBERT ANASTASIA en el Sindicato. Su función se basaba en la de mediador en las disputas entre bandas. Su equipo de ejecutores se ganó fama de ser los más eficaces del Sindicato por lo que generalmente se recurría a los asesinos de Brooklyn con mayor frecuencia. Luego los ejecutores de las bandas fueron contratados por LEPKE para unificar y dirigir mejor el negocio. ADONIS era buen diplomático y tenía amistades políticas. Era propietario del «Restaurante Italiano» en la 41 Ave. y Carrol Street, en Brooklyn, por donde pasaron importantes personalidades políticas. Extraído de:
Joey Adonis – Toda la historia de la Mafia – gangsters, mafiosos y …
todalamafia.blogspot.com/2008/08/joey-adonis-new-york.html
[13] www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair
[14] Durante la época del fascismo en Italia supo mantenerse al margen y no fue acosado duramente por la represión del prefecto Cesare Mori encargado de acabar en Sicilia con la mafia.
Durante la Segunda Guerra Mundial colaboró en el desembarco de los aliados, prestando ayuda a la OSS (futura CIA). Todo esto gracias a las peticiones de Lucky Luciano. Incluso se dice que Luciano llegó a Villalba en un tanque con una bandera que traía bordada un L y que a su encuentro salió Don Caló.
EE.UU lo nombró «coronel honorario» del ejército americano, incluso lo nombraron alcalde de la localidad de Villalba, cargo que delegó a los cinco meses en su sobrino.
Pero sus relaciones con los americanos no terminaron ahí. Tuvo negocios con Lucky Luciano y con VitoGenovese exportando heroína hacia EE.UU en caramelos y en latas de conserva.
En cuanto a la política siempre supo mantenerse del lado de los que le aseguraban poder. Fue defensor del Partido Separatista que pretendía que Sicilia se convirtiera en un Estado más de los EE.UU. Posteriormente supo ponerse del lado de la Democracia Cristiana cuando vio que era el partido del futuro en Italia. Mantuvo relaciones con importantes políticos como Bernardo Mattarella y Finochiaro Aprile.
En una ocasión permitió al líder comunista Girolamo Li Causi pronunciar un discurso en «su» Villalba a condición de que no nombrara asuntos locales. Li Causi desobedeció esta parte del acuerdo y Don Caló se enfrentó a él verbalmente en la plaza del pueblo. A continuación, comenzaron a llover balas sobre el líder comunista, hiriendo a trece personas más. Don Caló fue procesado y condenado, pero se le conmutó la pena.
Así, mantuvo el control sobre la isla de Sicilia durante 50años.
A su multitudinario funeral, el 10 de julio de 1954, acudieron obispos, políticos, magistrados, policías, funcionarios y mucha gente que consideró a Don Caló su padrino. Extraído de:
la mafia siciliana y sus integrantes: calogero vizzini – el siciliano
diarioelsiciliano.com.ar/diario/?p=14
[15] Vito Genovese emigró a Nueva York cuando apenas era un adolescente. De un napolitano como él se esperaba que integrara la Camorra local, pero en los EE. UU había gente como él, (Lucky Luciano), que creían en una Mafia o Cosa Nostra más abierta y, digamos, empresarial.
Vito ascendió rápidamente en las filas del mundo gansteril y participó en la liquidación de los representantes de la Mafia más tradicional de Nueva York junto a su amigo Lucky Luciano. Tras acabar con su antiguo jefe, Joe Masseria; Lucky también participó en la muerte Maranzano, el «capo ti tutti capi» que había resultado ganador de la Guerra de los Castellammareses.
A la muerte de Maranzano, Luciano estableció una estructura mafiosa con dimensiones de multinacional, de modo que nombró a Genovese subjefe de la familia, al calabrés Frank Costello consigliere y al gánster judío Meyer Lansky asesor en materia económica. Su victoria vino acompañada de una reforma del máximo órgano mafioso, la Comisión (formada por los jefes de las Cinco Familias de Nueva York y el jefe del Chicago Outfit, «la oficina» de Nueva Jersey y de las familias criminales de Kansas, Los Ángeles y Detroit) donde todos los jefes tenían el mismo voto pero el siciliano se designó como el primero entre iguales. Extraído de: Vito Genovese contra Frank Costello: la guerra mafiosa por hacerse …
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[16] Vito Genovese contra Frank Costello: la guerra mafiosa por hacerse …
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[17] www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair .
[18] www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair .
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[20] La austeridad económica que había provocado la huelga de 1947 también estuvo en el origen de la de 1950. La condición de los trabajadores, lejos de mejorar en este intervalo de tres años, había empeorado, por el contrario. Marsella con su tradición de radicalismo obrero tenía desde luego razones para ponerse en huelga.
Marsella era la «Puerta de Oriente» de Francia, por la que circulaba el material (principalmente las municiones y los víveres norteamericanos) destinados a los cuerpos expedicionarios franceses combatiendo en Indochina. La guerra de Indochina era tan impopular en Francia como lo iba a ser la guerra de Vietnam en Estados Unidos. Además, Ho Chi Minh había participado en la creación del Partido Comunista francés y era considerado en Francia como un héroe por los miembros progresistas de la clase obrera, especialmente en Marsella, en donde residían numerosos indochinos.
En enero, los portuarios de Marsella emprendieron el boicot selectivo de barcos que transportaran mercancías hacia la zona de combates. Y el 3 de febrero la CGT convoca una asamblea de portuarios que decide publicar una declaración «el regreso de los cuerpos expedicionarios de Indochina para poner fin a la guerra de Vietnam» y exhortando a «todos los sindicatos a iniciar las acciones más eficaces posibles contra la guerra de Vietnam». La circulación de los cargamentos de armas con destino a Indochina fue «paralizada». Aunque los puertos del Atlántico se unieron al embargo a principios de febrero, su acción no tuvo la misma eficacia ni la misma importancia que la huelga de Marsella. A mediados de febrero la huelga se había extendido a la industria metalúrgica, a las minas y a los ferrocarriles. La CIA y la mafia marsellesa. Los socialistas, los Guerini …
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[21] La Milieu es el nombre genérico con el que se conoce al crimen organizado francés. Sus principales centros de operaciones son las ciudades de Marsella (especialmente esta ciudad, ya que de hecho la Mafia francesa ha sido conocida habitualmente como Mafia marsellesa), París, Grenoble y Lyon. Extraído de: La Mafia francesa. Ciudades, nacionalidades y actividades …
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[22] Durante la Segunda Guerra Mundial, trabajó en Carlingue , una organización que colaboró con la Gestapo . Después de la Liberación francesa , Spirito huyó a España y de allí a América del Sur , donde participó en el comercio de heroína French Connection . Fue juzgado en 1952 por colaboracionismo.
François Spirito – WikiVisually
https://wikivisually.com/wiki/François_Spirito
[23] Paul Carbone y François Spirito se reúnen en Egipto y establecen un mini imperio basado en la prostitución. Durante 20 años, Paul Carbone es el hombre fuerte de Marsella: se une a los políticos, opera muchos burdeles, organiza chantajes en toda la costa y contrabando entre Italia y Francia. En el momento en que Francia decidió un embargo a los productos italianos, para sancionar al estado fascista después de la invasión de Etiopía. En particular, contrabandeaba queso Parmigiano Reggiano a Francia.
Carbone y Spirito también fueron los primeros franceses en importar opio en Francia para convertirlo en heroína y enviarlo a los Estados Unidos . Estos serán los fundamentos de la conexión francesa .
En el período de entreguerras , Carbone y Spirito hicieron una alianza con Simon Sabiani , un ex comunista que se convirtió en viceprimer ministro de Marsella, cerca de los fascistas y originalmente de Córcega. Después del 6 de febrero de 1934, los hombres de Carbone son lanzados contra los estibadores en huelga.
https://fr.wikipedia.org/wiki/Paul_Carbone
[24] La organización gansteril Le milieu [24] , desde 1920 era utilizada por los políticos locales como agentes electorales que usaban la violencia entre sus métodos.
Los gángsters también participaban en el contrabando de cigarrillos norteamericanos entre Tánger, Marsella y Nápoles. Así como era un centro de falsificación de dólares. En el tráfico de opio participaban marineros chinos, vietnameses y chinos residentes en Marsella, comerciantes árabes que vendían hachís, y por encima de todos, ciudadanos franceses de origen corso, franceses continentales e italianos en el comercio de la heroína.
Mientras que la policía local se quejaba de no tener suficientes recursos para combatir todos los tipos de contrabando, Charles Siragusa, agente del FBN, señalaba que las penas por narcotráfico en Francia eran muy leves, y aunque la ley contemplaba un máximo de dos años de cárcel para traficantes a gran escala, los jueces generalmente proferían condenas de entre un mes y seis meses; los jueces en Marsella daban condenas ridículas e ignoraban las directrices dadas desde París sobre mayores penas para los narcotraficantes.
Siragusa agregaba que Marsella persistentemente ignora a todos Las cortes de Marsella anulan los excelentes esfuerzos de ejecución [de la ley] de la policía francesa. Las penas impuestas por narcotráfico en Marsella eran incluso menores que las que se daban por contrabando de cigarrillos; como anotó un periodista norteamericano: El contrabando de cigarrillos evade los altos impuestos en Francia y causa daño inmediato a la economía francesa. Anuario Colombiano de Historia Social y de la Cultura 31, 2004. LA CONEXIÓN FRANCESA Y EL NARCOTRÁFICO EN CUBA A MEDIADOS DEL SIGLO XX. Por: Eduardo Sáenz Rovner.
[25] www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair .
[26] A primera vista, podría parecer erróneo ver a la CIA apoyando a un organismo situado a la izquierda como un Partido socialista. Pero, en Francia no existían más que tres partidos políticos importantes: el socialista, el comunista y el gaullista, y, por simple eliminación, la CIA se echa en los brazos de los socialistas. Si el general de Gaulle se mostraba demasiado independiente para el gusto de los americanos, los dirigentes socialistas, que perdían rápidamente terreno ante los comunistas, estaban totalmente dispuestos a colaborar con la CIA.
La estrategia de la Agencia, consistiría en servirse de la izquierda para combatir a la izquierda: esto fue el trabajo de Jay Lovestone, el adjunto de David Dubinsky en el Sindicato Internacional de los Trabajadores del Textil. Habiendo sido el dirigente del Partido Comunista de los Estados Unidos, Lovestone tenía un perfecto conocimiento de las operaciones de infiltración en el extranjero. En 1947, la comunista CGT lanza una huelga que no consigue paralizar la economía francesa. Se temía una toma del poder. En esta coyuntura intervienen Lovestone y su adjunto Irving Brown. Con ayuda de los fondos proporcionados por el sindicato de Dubinsky crearon Force Ouvrier, un sindicato no comunista. Cuando escaseó el dinero, recurrieron a la CIA. Así es como empieza la financiación secreta de los sindicatos libres, que pronto se extendió a Italia.
Los envíos de la CIA, del orden de un millón de dólares por año, aseguraron al Partido socialista una sólida base electoral en el seno del movimiento obrero, y dieron a sus dirigentes la potencia política necesaria para enfrentarse a los trabajadores en huelga. Mientras que el líder socialista de Marsella, Gaston Deferre, predicaba una cruzada anticomunista desde lo alto de la tribuna de la Asamblea Nacional y en las columnas de Le Provençal, el ministro de Interior socialista Jules Moch, ordenaba a la policía intervenir brutalmente contra los trabajadores en huelga.
La CIA y la mafia marsellesa. Los socialistas, los Guerini y la CIA. (1)
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[27] www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair .
[28] Eliminado del SFIO, se dedicó a la actividad sindical en un momento en que se formó una fracción encabezada por Léon Jouhaux y especialmente Robert Bothere, quien se niega a la hegemonía comunista en la CGT y provocará una división sindical en la Origen de la fuerza de la unión de Ouvrière. Ferri-Pisani realiza una campaña activa en Marsella para esta división, que recibe apoyo logístico y financiero de la CIA a través de la AFL-CIO y una de sus sucursales extranjeras FTUC (Comité de Sindicatos Libres) dirigida por un agente de la CIA, Jay Loverstone y su amigo Irving Brown con el propósito de debilitar a la Federación Mundial de Sindicatos. Cuando se formó Force Ouvrière el 12 de abril de 1948, Ferri-Pisani se convirtió en presidente de la Federación Nacional de la Marina Mercante de la nueva central sindical y fue uno de ellos, como Augustin Marsily, jefe del sindicato de portuarios que recibiría subsidios de Irving Brown. para apoyar su sindicato.
Los tres hombres se reunirán en los próximos años porque, entre 1949 y 1952, el puerto de Marsella es el protagonista de una terrible batalla entre los partidarios de las guerras de Corea e Indochina, lo que hará que la causa común la controle contra los marineros y portuarios de la CGT apoyados por el Partido Comunista que se oponen a estas dos guerras. Después de haber creado en abril de 1950, «un comité de vigilancia mediterránea» de la gente de mar, Ferry-Pisani y Marsily participan con Irving Brown en un congreso de la Internacional de los Trabajadores del Transporte que se celebra en Marsella y cuyo objetivo es «para estudiar los medios para prevenir las interrupciones del trabajo y tomar todas las medidas necesarias para descargar el material de guerra «, incluyendo el uso de «nervis» del entorno de Marsella que Ferry-Pisani y Marsilly reclutarán, con la ayuda de Hermanos Guerrini, a quienes les pagará la CIA.
Si esta ofensiva anticomunista fue un éxito en el plan inmediato que obligó a los marineros y estibadores de Marsella a retirarse, no evitará que Francia se vea obligada a retirarse de Vietnam. Decepcionado por el curso de la política general, y en particular por la gestión política de la crisis argelina por el general De Gaulle, Ferri-Pisani se suicida el 21 de octubre de 1963. Pierre Ferri-Pisani – Wikipédia
https://fr.wikipedia.org/wiki/Pierre_Ferri-Pisani
[29] Pierre Ferri-Pisani – Wikipédia
https://fr.wikipedia.org/wiki/Pierre_Ferri-Pisani
[30] En tal sentido, la policía francesa declararía más tarde que los primeros laboratorios de Marsella se abrieron en 1951, solo algunos meses después de que el hampa tomara el control de los muelles. Gaston Defferre y el Partido Socialista también salieron victoriosos de las huelgas de 1947 y de 1950 que debilitaron al Partido comunista local. Desde 1953 hasta su muerte, en 1986, Defferre y los socialistas han reinado sin pausa en el ayuntamiento de Marsella. Los Guerini parecen haber mantenido sus relaciones con los socialistas de la ciudad. Los miembros del clan Guerini han servido de guardia personal y como pega-carteles a los candidatos socialistas locales, hasta la caída del clan, en 1967. . La CIA y la mafia marsellesa. Los socialistas, los Guerini …
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[31] En las citadas décadas, la principal actividad criminal era la prostitución. En cambio, en las siguientes tres décadas (desde 1950 hasta 1980, aproximadamente), la principal actividad criminal pasó a ser el narcotráfico (especialmente el tráfico de heroína). Fueron los años de la llamada French Connection. Después que la llamada French Connection fuese desmantelada, los sucesivos jefes mafiosos fueron Tany Zampa, Jackie Le Mat y Francis Vanverberghe. Y, desde el comienzo del nuevo siglo, los mafiosos corsos se han ido adentrando cada vez más en el mundo del hampa francesa continental. Extraído de: La Mafia francesa. Ciudades, nacionalidades y actividades …
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[32] Se enviaba la droga hacia los Estados Unidos desde Marsella en el sur y desde Le Havre, en el norte, aunque existía también un mercado doméstico de adictos. En tal sentido, la Sociedad de Naciones presentó estadísticas sobre arrestos y confiscaciones de drogas en Francia entre 1936 y 1939. Además de que, en los EE.UU, se formaría una imagen , en parte gracias a la prensa norteamericana, de que Marsella era la capital mundial de la droga, las putas y la violencia callejera. Y, tras exponer las redes entre la política y los gángsters locales, la prensa parisina empezó a llamar a Marsella como Marseille Chicago. Extraído de: Anuario Colombiano de Historia Social y de la Cultura 31, 2004. LA CONEXIÓN FRANCESA Y EL NARCOTRÁFICO EN CUBA A MEDIADOS DEL SIGLO XX. Por: Eduardo Sáenz Rovner.
[33] No obstante, en el año 1965, una ofensiva del gobierno francés dio lugar al traslado de la producción a Indochina, donde tanto los gángsters corsos como la CIA estaban bien consolidados. Extraído de: www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair .
[34] Matthews empezó vendiendo heroína en Nueva York para el mafioso Louis Cirillo, pero en 1967 decidió pasar por alto a la mafia y comprarles directamente a las organizaciones corsas. Entramado dentro del cual, Matthews vendía la droga a través de una red de lavaderos, salas de billar y comercios de baratijas de Nueva York, Baltimore, Cleveland, Filadelfia y Detroit.
En 1973, Matthews fue detenido en Las Vegas por tráfico de estupefacientes. Lo liberaron luego de hacerle abonar 325.000 dólares de fianza. Regresó a Nueva York, recogió a su novia y 20 millones de dólares en efectivo y desapareció.
A pedido de la CIA, se retiraron las denuncias contra nueve proveedores corsos de Matthews, según asegura un informe del Departamento de Justicia de 1976. Los corsos también habían trabajado para la CIA, y la Agencia sostuvo que, si se los procesaba, los intereses de la seguridad nacional se verían comprometidos. Extraído de: www.deigualaigual.net/…/la-mafia-en-la-segunda-guerra-mundial-la-suerte-de-lucky/ Por: Alexander Cockburn y Jeffrey St. Clair.
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