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La tragedia obrera en Tequila

Fuentes: Rebelión

La explosión de uno de los tanques de almacenamiento de alcohol de la tequilera José Cuervo dejó al menos siete trabajadores fallecidos. De acuerdo con la información oficial proporcionada por la empresa y la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos, así como de diversos medios de comunicación, el accidente ocurrió por las labores realizadas en la reparación de uno de los tanques que contenían más de 200 mil litros de alcohol, se dio a conocer que una empresa subcontratada por la tequilera tenía un grupo de trabajadores en el mantenimiento de los depósitos y a la hora de estar soldando uno de los tanques se produjo la explosión que lanzó por los aires a uno de ellos durante el siniestro.  

La explosión ocurrió el martes 23 de julio, pero al día siguiente se produjo otro conato de incendio en la fábrica la Rojeña como se denomina la tequilera José Cuervo, fueron evacuados los vecinos del centro histórico del municipio de Tequila, en el estado de Jalisco.

El tequila de Jalisco es una bebida que goza de fama internacional, su producción supera los cinco millones de cajas cada año. El origen de la Rojeña se remonta a más de 200 años, su fundador fue el señor José Cuervo, pero actualmente, la Casa Cuervo está en manos de los herederos del empresario Juan Francisco Beckmann Vidal: Juan Domingo y Karen Virginia Beckmann. La fortuna lograda por la dinastía Beckmann alcanza la suma de 8 mil 800 millones de dólares, por lo que sus dueños se colocan en el cuarto lugar de los hombres más ricos de México. La empresa da empleo a más de 10 mil trabajadores tanto en la matriz que se ubica en Tequila como en otras destilerías distribuidas en el estado donde miles de jornaleros agrícolas laboran en la producción de la planta de agave.

Un día después del siniestro, el 24 de julio, se celebraría el Día Internacional del Tequila, con la finalidad de promover el conocimiento del proceso de elaboración e incentivar el consumo de esta bebida emblemática de la cultura mexicana. Sin embargo, la celebración del evento fue suspendida por el Consejo Regulador del Tequila (CRT), el Gobierno del Estado y la Cámara Nacional de la Industria Tequilera debido a la tragedia ocurrida. La empresa y el gobierno del estado han manifestado que se investigarán las causas del accidente.

El alcalde de Tequila, José Alfonso Magallanes, confirmó que la causa de la explosión se originó por los trabajos de soldadura de una empresa subcontratada por la tequilera, dijo que es posible que los trabajadores no tuvieran la suficiente pericia para realizar esas labores, pero que esperarían el resultado de los peritajes para dar una información completa; el alcalde también informó que de acuerdo al informe del personal de Protección Civil del estado, debido a la explosión, un millón y medio de litros de alcohol fueron derramados y circularon por las calles de la ciudad de Tequila, poniendo en riesgo a la población.

No obstante, ya circula un video de los trabajadores que ingresaron a laborar ese día a la empresa y con ánimos festivos señalan que ya estaban listos para “arriesgar la vida”, se les ve con sus uniformes y los tanques atrás de ellos. Habría que preguntarse por qué lo comentaron así, ¿acaso ellos ya sabían que las condiciones de trabajo en la tequilera constituían un riesgo para la vida?, no sabemos sus motivaciones para hacer ese tipo de exclamaciones, pero en otro video difundido en redes sociales la población reclama que la empresa se haga cargo de las consecuencias del accidente, de los fallecidos y de sus familias, manifiestan su indignación porque se sabe que los tanques de almacenamiento del alcohol ya tenían más de 60 años, se preguntan si con tantas ganancias que recaudan los empresarios por la producción de esta bebida no tengan lo necesario para invertir en la reposición de los alambiques que ya se encuentran obsoletos, exigen se aplique la ley, se castigue a los responsables y se haga justicia a las víctimas.

Lamentablemente esta tragedia en Tequila, Jalisco, sólo se suma a las 1.9 millones de personas que mueren por un riesgo de trabajo de acuerdo con la estimación que registra la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en la que se señala que a diario ocurren cerca de 868 mil accidentes de trabajo en el mundo, de los cuales 1,100 suceden en México.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) considera que, en la mayoría de los casos, los accidentes de trabajo suceden debido a las condiciones peligrosas que existen en los equipos, maquinarias, herramientas de trabajo e instalaciones, así como en la falta de capacitación de los trabajadores al realizar sus actividades.

La tragedia en Tequila sólo confirma estos datos y observaciones, además, revela la dramática situación que viven millones de trabajadores en México, falta de condiciones de higiene y seguridad, grave irresponsabilidad de los patrones y del gobierno para exigir que se lleven a cabo los protocolos de seguridad que garanticen la vida del trabajador.

La tragedia obrera en Tequila sacó a la luz una serie de irregularidades en esa empresa y en otras más que se manejan en forma similar, a saber: los trabajadores no cuentan con las condiciones necesarias para garantizar su vida, su protección y seguridad; la empresa se lava las manos en su responsabilidad al contratar a terceras empresas para la realización de determinadas labores como el mantenimiento de los equipos y maquinaria, pero no cumplen con las reglas mínimas de capacitación y adiestramiento de los trabajadores; la maquinaria y demás implementos de la producción se encuentran en malas condiciones o de plano ya están obsoletos y no hay una autoridad que vigile esos aspectos en el trabajo de los obreros; los trabajadores están expuestos a este tipo de accidentes, no cuentan con un seguro de vida ni con autoridades que protejan sus derechos.

Los trabajadores no pueden esperar que las empresas respeten sus derechos y resuelvan sus necesidades; a los dueños del capital sólo les interesa asegurar el mayor rendimiento de los obreros y la máxima ganancia, así sea arriesgando la vida del trabajador; a nadie más le interesa su integridad física sino al propio trabajador, por ello es necesario que los obreros se organicen y luchen por mejores condiciones de trabajo, pero sobre todo por tomar en sus manos el poder político que ponga un alto a la explotación laboral y a tantas anomalías en la producción dentro de las empresas.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.