Bolivia sigue con enfrentamientos por la autonomía entre el gobierno y la región de la Media Luna. Las Fuerzas Armadas advirtieron que harán respetar al Gobierno.
Los roces por la autonomía impulsada por los sectores opositores al Gobierno nacional dirigido por Evo Morales continúan. El 7 de marzo pasado, la Corte Nacional Electoral suspendió la celebración del referendo para aprobar o rechazar la nueva constitución impulsada por el gobierno y también desconoció por ilegales las consultas autonómicas convocadas por cuatro regiones para el 4 de mayo.
En esa ocasión el tribunal sostuvo que no existían las condiciones técnicas, operativas, legales y políticas para llevar adelante el referendo. Ese día estaba previsto discutir la Ley Nº 3836 referida a la extensión del latifundio y la Ley Nº 3837 de rechazo o validación del proyecto de nueva Constitución Política del Estado que se aprobó en Oruro el 9 de diciembre de 2007.
Esta semana, ante la insistencia de la oposición de seguir adelante con el referendo, las Fuerzas Armadas advirtieron este lunes a los dirigentes de la media luna que harán respetar al Gobierno constituido y no permitirán la desintegración del país.
De esa forma, las milicias rechazaron la decisión de los dirigentes de los departamentos de Santa Cruz, Tarija, Pando y Beni de llevar adelante sus referendos autonómicos, desconociendo la Constitución vigente.
A 40 días de que se realice el referendo autonómico en el oriental departamento de Santa Cruz, Luis Trigo, jefe de las Fuerzas Armadas, advirtió que las instituciones castrenses iniciarán procesos civiles y penales contra quienes confundan las autonomías con separatismo. «Lo que no se discute es la unidad del país, la separación del país es un delito que puede ser sancionado por la vía penal o civil», sostuvo.
La postura del Ejército se basa en lo establecido por la Constitución en su artículo 108 donde se establece que las Fuerzas Armadas tienen por misión fundamental defender y conservar la independencia nacional, la seguridad y estabilidad de la República y asegurar el imperio de la Constitución Política, garantizar la estabilidad del Gobierno legalmente constituido y cooperar en el desarrollo integral del país.
En tanto, el artículo 210 de la Carta Magna indica que «las Fuerzas Armadas dependen del Presidente de la República y reciben sus órdenes, en lo administrativo, por intermedio del Ministro de Defensa Nacional, y en lo técnico, del Comandante en Jefe».
No obstante esas prohibiciones, la prefectura cruceña tiene previsto conformar brigadas civiles para resguardar su referéndum. El diputado por el opositor Poder Democrático y Social (Podemos), Fernando Messmer, afirmó que el diálogo entre el Gobierno y la oposición será luego de la consulta popular.
El referendo cruceño será el primero de una serie de consultas autonomistas en varias regiones opositoras al Gobierno de Morales, ya que Beni y Pando prevén celebrar los suyos el 1 de junio y en Tarija -donde se concentra el 85 por ciento de las reservas de gas de Bolivia- tendrá lugar el 22 del mismo mes.
En tanto, bajo la consigna «todos contra el MAS», el comité interinstitucional que coordina la oposición al gobierno del presidente designó a Sabina Cuellar, una campesina de origen quechua, como candidata para la elección de gobernador en Chuquisaca.
El anterior gobernador, David Sánchez, renunció a raíz de las protestas contra la Constituyente por la demanda de capitalidad para Sucre. El gobierno designó como prefecto interino a Ariel Iriarte, pero los dirigentes cívicos rechazaron ese nombramiento y un cabildo designó después a Cuellar, acción considerada ilegal para el gobierno.