Una enrevesada maraña de datos, intereses y matices semánticos hace difícil responder a esta pregunta aparentemente tan sencilla. Las cosas se complican con sólo comparar las cifras de mujeres asesinadas de los diferentes organismos: más de 150 muertas en Ciudad Juárez en lo que va del año, según una reconocida red de Organizaciones No Gubernamentales […]
Una enrevesada maraña de datos, intereses y matices semánticos hace difícil responder a esta pregunta aparentemente tan sencilla.
Las cosas se complican con sólo comparar las cifras de mujeres asesinadas de los diferentes organismos: más de 150 muertas en Ciudad Juárez en lo que va del año, según una reconocida red de Organizaciones No Gubernamentales (ONG’s) locales, frente a las apenas 3 registradas durante los primeros seis meses de 2010 de acuerdo a la Procuraduría (Fiscalía) General del Estado de Chihuahua.
La diferencia entre los números de unos y otros es abismal, y hasta preocupante si se tiene en cuenta que hablamos de discrepancias de cientos de mujeres muertas a lo largo de los años.
Lo que sí está claro para todos los sectores es que los casos de «feminicidio» (asesinatos por razones de género) siguen manchando el historial de esta violenta ciudad mexicana, aún 17 años después de que salieran a la luz pública por primera vez.
«Sigue existiendo el feminicidio, no podemos negar la realidad», admitió Luisa Camberos, directora general del Instituto Chihuahuense de la Mujer.
Eso sí, han cambiado las formas. Varias activistas le dijeron a BBC Mundo que desde 1993 se ha ido diversificando la violencia contra la mujer y se ha ido haciendo mucho más compleja.
Critican, sobre todo, el proceso de «invisibilización» social y política que los feminicidios de Ciudad Juárez han tenido desde el inicio de la ola de creciente violencia por parte del crimen organizado.
La atención de instituciones y medios de comunicación está ahora puesta en otro tipo de muertos en Juárez: los del narcotráfico, que sólo durante los primeros seis meses de 2010 sumaron 1.700.
Esta ciudad de aproximadamente un millón y medio de habitantes, fronteriza con El Paso (Texas), es considerada la más violenta de México y es escenario de frecuentes enfrentamientos entre los cárteles de Juárez y de Sinaloa.
Feminicidios «camuflados» entre la violencia
Pero «la violencia contra las mujeres no se ha detenido»h, le dijo a BBC Mundo Imelda Marrufo, portavoz de la Red Mesa de Mujeres de Ciudad Juárez, que agrupa a 13 organizaciones locales que trabajan directamente con mujeres vulnerables y familias de víctimas.
Creciente violencia en Ciudad Juárez
En 2008 se registraron 1,600 asesinatos
En 2009 se registraron 2,650
En 2010 se contaron 1,700 sólo durante los primeros seis meses
Desde diciembre de 2006 México acumula 28.000 muertos por causa del crimen organizado
Según los cálculos de su organización, mucho más alarmantes que los de la Procuraduría del Estado de Chihuahua, el 2009 cerró con 130 asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez y en lo que va de 2010 suman ya más de 150.
«El feminicidio en Juárez no se ha erradicado», insiste Marrufo, que además sostiene que han aumentado también los casos de violación sexual y de violencia extrema contra mujeres.
Esta activista acusa al gobierno mexicano y a sus instituciones de querer «vincular el asesinato de mujeres a la violencia ligada al narcotráfico» con la intención de «minimizar el tema del feminicidio».
Según Marrufo, el problema de «las muertas de Juárez», que durante años acaparó la atención internacional e inspiró decenas de libros y documentales, es una espina clavada para el gobierno mexicano.
«Son más de 17 años de impunidad», dijo.
Marrufo sostiene que las mujeres que hoy en día mueren tiroteadas en Ciudad Juárez ahora se incluyen entre las víctimas de la guerra contra el narcotráfico.
«Y cuando se trata de asesinatos por el crimen organizado, esos casos ya no se investigan», criticó.
La activista asegura que, si bien es cierto que cada vez hay más mujeres vinculadas a la venta de droga, con frecuencia éstas son obligadas o coaccionadas a participar en estas actividades ilícitas y después asesinadas por los cárteles, cuando ya no les son útiles.
Marrufo cuenta también que las ONG’s han sabido, por mujeres que sobrevivieron a ataques, que algunos hombres ordenan su asesinato de un balazo para que parezca una ejecución por parte del crimen organizado.
Pequeños progresos
La Procuraduría General de Chihuahua confirma que «la violencia que se presentó durante 2008 y 2009 por el enfrentamiento de grupos criminales causó un mayor número de homicidios de mujeres».
Sin embargo, los datos anuales que aquí se manejan distan mucho de los números de tres cifras que ofrecen las ONG’s locales.
Según los registros oficiales, en 2009 hubo 24 casos de homicidio de mujeres en Ciudad Juárez, mientras que durante el año anterior fueron 28.
Entre los logros, la Procuraduría destaca que de los 475 asesinatos de mujeres registrados entre 1993 y junio de 2010, 313 han sido esclarecidos, aunque sólo en 222 se dictó una sentencia.
Quedan, pues, todavía, 162 homicidios de mujeres pendientes de investigación, según las cifras oficiales.
De esos casos pendientes, 103 sucedieron hace más de seis años.
La activista Marrufo, si bien concede que ha habido una «cierta intención» por parte del estado de Chichuahua en avanzar en algunas de las investigaciones, sostiene que «siempre habrá dudas sobre los datos de la Procuraduría».
Por un lado, afirma, porque hay casos de feminicidio que no se denuncian y por tanto no están registrados oficialmente y, por otro, sostiene, «por la intencionalidad por parte de las autoridades de minimizar el problema».
La semántica de los asesinatos
Una de las grandes dificultades a la hora de interpretar y clasificar cifras de homicidios de mujeres en Ciudad Juárez es el propio concepto de feminicidio, que es únicamente un término sociológico.
«En términos jurídicos no existe el feminicidio», explica Marrufo.
Feminicidio en Ciudad Juárez
Entre 1993 y junio de 2010 la Procuraduría General de Chihuahua registró 475 asesinatos de mujeres, la mayoría presuntamente por razones de género.
313 homicidios han sido esclarecidos, aunque sólo en 222 se dictó una sentencia.
Quedan 162 homicidios de mujeres pendientes de investigación, de los cuales 103 sucedieron hace más de seis años.
Aunque los activistas por los derechos de la mujer han pedido que el término sea tipificado en el código penal mexicano, el feminicidio no figura como delito. El crimen se considera homicidio, aunque se dé por razones de género.
Muchos organismos de derechos humanos han calificado como feminicidios los cientos de asesinatos de mujeres que tuvieron lugar en Ciudad Juárez desde 1993 hasta la fecha.
Pero en el fallo que la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió en diciembre de 2009, por el caso conocido como «Campo Algodonero», en el que condenó al Estado de México por violaciones de derechos humanos en los casos de tres mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, se utilizó la expresión «homicidio de mujer por razones de género».
Se llame como se llame, es innegable que muchas mujeres en Ciudad Juárez continúan siendo objeto de abuso sexual y violencia de género antes de encontrar la muerte.
Es innegable también que en Ciudad Juárez persiste un contexto social de violencia contra la mujer, un fenómeno que el gobierno está tratando de revertir a través de programas de prevención, como los que desarrolla el Instituto Chihuahuense de la Mujer.
El gran desafío para instituciones y organizaciones es llevar un conteo riguroso de víctimas, confiable y libre de intereses, que permita conocer la verdadera magnitud del problema.
Y todavía no hemos hablado de las mujeres desaparecidas de Ciudad Juárez… pero eso quedará para otro día.