El representante de la oficina de México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Amerigo Incalcaterra, presentó el Diagnóstico de Derechos Humanos del Distrito Federal, que buscó identificar los principales obstáculos que afectan a las personas que pasan o viven en el Distrito Federal y que, por diversos motivos, dejan de […]
El representante de la oficina de México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Amerigo Incalcaterra, presentó el Diagnóstico de Derechos Humanos del Distrito Federal, que buscó identificar los principales obstáculos que afectan a las personas que pasan o viven en el Distrito Federal y que, por diversos motivos, dejan de ejercer y gozar de sus derechos.
Fueron analizadas las condiciones del medio ambiente, de la vivienda, del agua, de la infraestructura, de la educación, del trabajo, de la salud, y de los derechos sexuales y reproductivos. En relación con la salud, el Diagnóstico profundizó en lo que respecta a la mortalidad, las enfermedades que afectan a la población del Distrito Federal.
Además del nivel de contaminación del agua y del aire, los casos de VIH/Sida, la cobertura del sistema de salud y la calidad de los servicios prestados por el Estado. El Distrito Federal tiene la segunda mejor expectativa de vida del país, con una media de 75,9 años, un poco atrás de Quintana Roo, que tiene una media de 76,1 años.
La tasa de mortalidad de la región tiene sus principales causas en las enfermedades del corazón, la diabetes mellitus, los tumores malignos, las enfermedades cerebro vasculares, en las enfermedades de hígado y en los accidentes. Según datos de la Secretaría de Salud Federal, hasta noviembre de 2007, el país tenía 115 mil 651 personas viviendo con VIH, de las cuales 20 mil 881 vivían en el DF.
La tasa de mortalidad como consecuencia del VIH en la capital fue de 5,8%, y está aumentando ese porcentaje entre las mujeres. Entre 2001 y 2006, el mismo subió un 11,7%. Los recursos humanos y de medicamentos, tanto para atender a las personas que viven con el VIH, como para las que tienen otras enfermedades son insuficientes.
«No se tiene medicamentos, personal médico, estudios de gabinete y materiales suficientes y necesarios para tener una cobertura médica eficaz», dijo el Diagnóstico. Solamente entre 2005 y 2007, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) recibió 19 quejas de violaciones a los derechos humanos en la Clínica Especializada Condesa.
Los profesionales del lugar son acusados de conductas discriminatorias contra las personas con VIH/Sida, de negar la entrega de medicamentos por falta de abastecimiento y desatención médica. El Distrito Federal tiene el segundo índice más bajo en relación con la vacunación, prevención y control de diabetes mellitas e hipertensión arterial.
La población menos respetada en relación con los derechos humanos es la no heterosexual. Los gays son el 10% de la población del DF y las lesbianas son el 6%, en números absolutos son más de 870 mil hombres y 250 mil mujeres. Los transgéneros están entre los 83 mil 434 y 125 mil 150 habitantes.
De acuerdo con el Diagnóstico, la discriminación contra este grupo se presenta en gran parte de los grupos sociales, de las instituciones públicas y privadas, y en los hogares. «La legislación mexicana tiene serias deficiencias que afectan el disfrute de los derechos laborales de las personas no heterosexuales, y enfatiza la vulnerabilidad del derecho a la salud de las personas transgéneros y transexuales», dice el Diagnóstico.
Con informaciones de Notiese.
Traducción: Daniel Barrantes – [email protected]