Desde el 14 al 16 de noviembre se está realizando en Buenos Aires el Jeber Haneemanim (Junta de Gobernadores) de la Agencia Judía para Israel (Sojnut), uno de los principales encuentros del sionismo a nivel mundial. Del mismo participan el viceprimer ministro de Israel Dan Meridor, los presidentes de esa entidad, Natan Sharansky, y de […]
Desde el 14 al 16 de noviembre se está realizando en Buenos Aires el Jeber Haneemanim (Junta de Gobernadores) de la Agencia Judía para Israel (Sojnut), uno de los principales encuentros del sionismo a nivel mundial. Del mismo participan el viceprimer ministro de Israel Dan Meridor, los presidentes de esa entidad, Natan Sharansky, y de la Organización Sionista Mundial, Abraham Duvdevani, y más de 250 centenares de líderes comunitarios de los Estados Unidos, Europa, Israel y Australia, además de referentes locales. Es la primera vez en 15 años que este organismo sesiona fuera del Estado de Israel. Al evento fueron invitados Cristina Kirchner, Héctor Timerman, pero hasta ahora sólo este último confirmo sus participación.
El presidente del encuentro destaco ante la Agencia Judía de Noticias: «es importante, sobre todo en esta época de creciente antisemitismo y de actividad anti-Israel en el continente, para fortalecer y revitalizar constantemente la lucha contra estos flagelos». Por su parte, Claudio Manaker, director de la Sojnut en el Cono Sur, le explicó: «Para el Estado de Israel, la comunidad judeoargentina es muy importante y Sudamérica es un jugador relevante en el escenario internacional».
La trayectoria del presidente permite conocer el signo del encuentro, Natan Sharansky nació en la URSS en 1948, llegado a Israel en los ’90s rápidamente se destaco como dirigente del ultraderechista partido Likud y ha sido varias veces ministro en el gabinete de los ex primer ministros Ariel Sharón y Ehud Barak. Siendo ministro de la Vivienda y Construcción, fue uno de los más decididos partidarios de la construcción de asentamientos de colonos sionistas en el Territorios Ocupado de Cisjordania (Palestina).
Sharansky, que se presenta a sí mismo como una víctima del «totalitarismo» no cree que los derechos humanos sean universales y sean aplicables a todos los seres humanos. Dimitió de su cargo de ministro del Interior en el gobierno de Ehud Barak en el año 2000, cuando se difundieron rumores que el primer ministro estaba dispuesto a efectuar algunas concesiones cosméticas a los palestinos en el tema de la devolución de territorios.
La junta de gobernadores fue precedida por un Congreso bajo el lema: «Enfrentando el antisemitismo moderno», en el hotel Etoile, organizado por el Departamento de Actividades Sionistas/Hagshamá y la Organización Sionista Argentina. Del mismo participaron intelectuales de la talla de Marcos Aguinis para denunciar «el antisemitismo islámico-árabe y el que se difunde a través de Internet».
Entre las actividades se destacó el megaevento en el teatro Coliseo donde presentó el Conjunto Coral de Tzahal, el Ejército de Defensa de Israel.
El jefe de gobierno porteño participó en la mañana del lunes de un desayuno con los miembros de la Junta con quienes más tarde reinauguró la Plaza Estado de Israel; «el símbolo y la conjunción de la presencia del KKL (Fondo Nacional Judío) en Argentina» declaró Macri en apoyo a las políticas sionistas. Los organizadores esperan la presencia de la presidenta y a su canciller para la cena de gala.
Desde que se dio difusión la realización de las actividades y su contenido distintas organizaciones y personalidades expresaron su repudio. «Manifestamos nuestra preocupación y repudio por esta escalada de penetración de la propaganda sionista en nuestro territorio nacional» escribió en un comunicado la red de Judíos Antisionistas de la Argentina (IJAN)1, en el se expresa «nuestro más enérgico rechazo a esta pretensión desfachatada de usar nuestro suelo soberano como campo de propagación del sionismo, el cual, lejos de representar una religión, constituye la ideología básica con la que se viene justificando y realizando desde hace decenios el expolio y expulsión del Pueblo Palestino de sus tierras (…) Como grupos formados por hombres y mujeres de diversas religiones y etnias, en particular judíos que nos oponemos al sionismo, denunciamos, rechazamos y repudiamos expresamente el uso por parte de los agentes sionistas del adjetivo «judío» o «judía» para describir instituciones racistas que perpetran el colonialismo y el apartheid en Palestina.»
Por su parte Fearab consideró al acto de la OSA como una «provocación» y rechazó: «El nuevo intento del sionismo argentino de importar el conflicto israelí-árabe a nuestro país». La federación de los árabes argentinos consideró que los contenidos del congreso: «evidencia una arabofobia e islamofobia evidente (…) denunciamos el intento negacionista de estas organizaciones acerca de la característica semita de los árabes», en el mismo sentido se manifestó Centro Islámico. Este último llego a enviar una carta documento donde se los intima a que de manera inmediata dejen de promocionar el congreso al considerar que dichos conceptos, alientan e incitan a la persecución o al odio, contra un grupo de personas a causa de su raza, religión y nacionalidad, específicamente dirigido a la comunidad islámica y árabe de nuestro país. Consultado por la Agencia Islámica de Noticias (AIN) por el contenido del acto el periodista y sociólogo, Pedro Brieger señalo: «Israel siempre ha utilizado el argumento del antisemitismo para silenciar las críticas por sus acciones contra los palestinos».
La presencia del Coro del Ejército de Israel, tampoco fue pasada por alto, La Juventud de Fearab fue categórica: «un Ejército torturador, ocupante y que utiliza maniobras militares que van en clara oposición a cualquier convención internacional. Ese Ejército es el mismo que ha producido terribles masacres en Palestina, Líbano, Siria; el mismo que ha dado la nota acribillando a una Flotilla Humanitaria Turca. Es el mismo que ha utilizado armas de destrucción masiva y no convencional contra población civil, que ha realizado múltiples crímenes de guerra, que encarcela ancianos, mujeres y niños, por el simple hecho de ser Palestinos».
Para las organizaciones y personalidades que rechazan el encuentro sionistas esté no es más que una forma de acercar el lobby israelí a estas tierras para intentar contrarrestar el progresivo debilitamiento de la posición internacional. La importancia que le atribuyen los organizadores a los eventos así como el despliegue llevado acabo debe ser leído en una forma más en el repicar de los tambores de guerra israelí, en este tono el viceprimer ministro de Israel Dan Meridor aseguró: «Irán es una amenaza para la paz mundial y hay que detenerla» y que «la Argentina puede sumarse a la presión internacional favor de sanciones adicionales». Los asistentes a los distintos encuentros no dejaron de escuchar argumentos legitimidad de atacar a Irán y así como el anuncio de acciones contra los miembros latinoamericanos del eje del mal, en particular Venezuela.
Un pequeños pero significativo grupo de manifestantes lograron acercarse el domingo hasta el vallado instalado por la policía federal y los servicios de custodia israelí, bandera palestinas y de las organizaciones flameaban mientras en los carteles se leían consignas: «antisionismo no es antisemitismo», «sionismo = limpieza étnica», «basta ya», «Estado de Israel = Genocidio», «sionismo =terrorismo de estado».
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