Para fines de año la empresa del magnate norteamericano de la informática Bill Gates espera presentar el nuevo sistema operativo de Windows traducido íntegramente al idioma mapuche, para lo cual se alió con el Ministerio de Educación, la Conadi y la Universidad de la Frontera de Temuco. Pero la iniciativa se topó con críticas en […]
Para fines de año la empresa del magnate norteamericano de la informática Bill Gates espera presentar el nuevo sistema operativo de Windows traducido íntegramente al idioma mapuche, para lo cual se alió con el Ministerio de Educación, la Conadi y la Universidad de la Frontera de Temuco. Pero la iniciativa se topó con críticas en el camino y ya se atisba un duro debate entre cibernéticos, machis y loncos. Incluso, el presidenciable mapuche Aucan Huilcaman no descarta iniciar acciones legales contra el gigante del software mundial por «piratería».
Microsoft lleva más de un año trabajando sin descanso en un sistema operativo de Windows en mapunzugun. La compañía de Bill Gates en acuerdo con el gobierno y la Universidad de la Frontera escogieron el albabeto Azünchefe. A juicio de Aucan Huilcaman esta elección no respeta la voz de la comunidad mapuche y entre los lingüistas tampoco hay acuerdo sobre qué es lo mejor para preservar la cultura mapuche.
Desde diciembre de 2004 Microsoft trabaja a toda máquina para desarrollar en Chile un proyecto de interfaz que fortalezca la educación intercultural bilingüe, la cual se trasformará finalmente en un sistema operativo de Windows que se podrá leer íntegramente en mapunzugun. La transnacional norteamericana firmó en noviembre de 2003 un protocolo de cooperación tecnológica con el Gobierno de Chile, por lo que la empresa de Gates cuenta con la asistencia del Ministerio de Educación, la Universidad de la Frontera (UFRO) y de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi).
Según explica Hernán Orellana, gerente general de Microsoft, esta iniciativa persigue lograr la inclusión digital de todos los mapuches (cerca de un millón) y reducir la brecha en el acceso al conocimiento. El ejecutivo adelantó que la interface de Windows y Office en mapunzugun servirá, además, para fomentar el desarrollo de sistemas informáticos y redes electrónicas tales como Internet.
La apuesta de Microsoft, contempla para su diseño la asistencia de un vasto equipo de lingüistas, hablantes mapuches y transcriptores nativos del mapunzugun, quienes actualmente trabajan en el Instituto de Estudios Indígenas (IEI) de la UFRO para traducir 150.000 términos de un pueblo que tiene más de 9 mil años de historia, pero que su forma de escriturarse aún no supera los 500 años. Los primeros en llevar su cultura oral al papel fueron los misioneros jesuitas a fines del 1597. Ellos idearon formas de representar el sonido lingüístico de esta etnia para evangelizarlos y conquistarlos.
En los últimos cien años se ha intentado decantar la oralidad de la lengua mapuche en un solo grafemario, pero sólo en el 2003 el consejo de la Conadi aprobó una política única para representar gráficamente la fonología de la lengua mapuche, mediante la creación del alfabeto Azünchefe. Ello, tras sortear cuatro años de investigación coordinada con organizaciones indígenas.
«Producto de la red de cooperación que existe entre el Gobierno de Chile y Microsoft, es que la nueva versión de Windows estará basada en el Azünchefe», revela a La Nación José Calfuqueo, jefe del Departamento de Cultura y Educación de la Conadi. «El proyecto ayudará a revitalizar la lingüística mapuche a nivel país, junto con incluirla dentro de la cultura digital global, lo que beneficia el desarrollo indígena», agrega Calfuqueo.
Según el vocero de la Conadi, el Azünchefe es el sistema escritural mapuche que prima sobre otros alfabetos, como el Ranguileo, el Unificado y el Wirilzugungue. Pero esta fusión entre sistema operativo y Azünchefe para un alfabeto único, tiene una lectura disidente con nombre y apellido: Aucán Huilcaman.
Profundo rechazo
Para quien hasta hace poco menos de un mes fuera miembro activo del Consejo de Todas las Tierras y hoy candidato presidencial la alianza con la transnacional es distinta: «Yo le resto validez al Azünchefe, creo que debe primar el Ranguileo, pues es el más próximo a la lengua originaria y está desmarcado de intereses políticos».
Consultado su parecer sobre la versión Windows y Office, el adalid mapuche manifestó su malestar: «Dejo en claro mi más profundo rechazo a lo que está haciendo Microsoft, y emplazo a la empresa a que no continúe con el proyecto de piratería que afecta a la identidad del pueblo mapuche, de lo contrario se arriesga a enfrentar un recurso legal en su contra de parte de machis y loncos representantes del Consejo de Todas las Tierras», sentenció.
Huilcaman sostiene que aquí se ha tomado una decisión al margen de la voluntad del pueblo mapuche y de los hablantes, lo que según sus palabras «daña la soberanía indígena sobre este recurso intangible por atropellar sus derechos colectivos y de autodeterminación».
Una visión menos categórica pero igual de disidente es la de Desiderio Catriquir, investigador en Ciencias Sociales de la Universidad Católica de Temuco y docente del Programa de Educación Intercultural Bilingüe, quien lleva décadas de enseñanza y reflexión acerca de la lengua mapuche. Frente a la validez en términos lingüísticos del Azünchefe, el académico sostiene: «Es un esfuerzo mayormente técnico por escribir el mapunzugun, pero al agregar otros elementos, se distorsiona la lengua mapuche originaria. Desde el punto de vista pedagógico, el Azünchefe, no es la gramática óptima, pues no representa la realidad sonora del idioma».
El académico cree que la iniciativa de divulgación del Azünchefe por parte de la Conadi es precipitada, porque más allá de incrementar el conocimiento y revitalización del mapunzugun, se debe reflexionar, estudiar y analizar mas profusamente su complejidad.
Unificación lejana
Muchas han sido las instancias y personas que han generado formas de escrituración del mapunzugun. Es el caso de Anselmo Ranguileo, quien al alero del Movimiento Social Mapuche, desarrolla en 1982 una propuesta de alfabeto desde la perspectiva de su pueblo, no obstante, fue criticado y rechazado por el mundo academicista por tratarse de un documento ideológico y por no permitir una correcta escrituración de esta lengua.
Debido a la necesidad de superar las citadas falencias y a la circulación hasta mediados de la década de los ’80 de más de 30 alfabetos no oficiales, un grupo de lingüistas y grafólogos de la Universidad Católica de Temuco, condensó doce de estos textos para dar forma a un grafemario unificado en 1986.
Pero a pesar de este significativo esfuerzo, quedó una veintena de propuestas de alfabetos pululando dentro y fuera de las comunidades indígenas, lo que mermó el cultivo y transmisión de este arcaico idioma. En medio de este caos, se conformó a fines de 1989 la Comisión Especial de Pueblos Indígenas (CEPI), para mediar una salida a la crisis. Fue así como en 1993, esta entidad en medio de una batahola de intensos debates, logró reducir las propuestas de alfabetos mapuches de diecisiete a siete.
Pese a los múltiples avances en los últimos doce años, lo cierto es que actualmente existen en uso cerca de una veintena de formas de hablar el mapuche entre Chile y Argentina, siendo cinco en nuestro país las formulas sociales más «aceptadas» de transliterarlo. (ver infografía). Destaca el aludido alfabeto mapuche de distribución marginal propuesta por Ranguileo; también la versión académica creada por la Universidad Católica de Temuco, conocido desde 1992 como el grafemario Unificado, aunque con posterioridad proponen otro denominado Wirilzugunwe, y que nace en 1998 como una alternativa de acercamiento entre el grafemario Unificado y el Ranguileo, para fundirlo en uno solo.
Le sigue el polémico Azünchefe, reconocido por la Conadi y por el propio Ministerio de Educación, pero rechazado por influyentes comunidades indígenas. En este sentido, Eliseo Cañulef, lingüista del Instituto de Estudios Indígenas de la Universidad de La Frontera, postula que en Chile aun está lejana la unificación de la escritura mapuche, porque todavía se está viviendo la proliferación de diversas manifestaciones gramaticales, tanto así, que hace un par de años terminó por sugerir un nuevo alfabeto, el cual denominó NICE, que fue pensado principalmente para escriturar el idioma para ser reconocido en Internet, ya que ciertas consonantes y vocales son leídas como basura gráfica.
Paradójicamente, Cañulef actualmente trabaja en el desarrollo de los materiales bases para traducir la interfase de Windows y de Office utilizando el Azünchefe y no el NICE. «Proyectos como el de Microsoft son herramientas útiles y válidas para el pueblo mapuche, ya que a estas alturas lo que se debe hacer es comenzar a dialogar con las nuevas tecnologías, y que es lo que la Universidad de la Frontera hoy en día está haciendo».
Pero otra cosa es lidiar por el consenso de un alfabeto único. Cañulef postula lo que debiera ocurrir en adelante. «Surgirán más y nuevas proposiciones de escritura, ya que aun el idioma está en evolución. Pero creo que no es la hora de unificar esta lengua en una sola. Esa será una tarea legada a las próximas generaciones»
– Eric Bellido, Gulumapu / Periódico Mapuche Azkintuwe: