Recomiendo:
0

Por qué Tuto Quiroga NO debe ser presidente

Fuentes: Rebelión

Seamos claros. Las próximas elecciones verán sólo dos contendores. Evo y Tuto. Ahora bien, sin ánimo de efectuar un análisis político – porque analista político no soy – y usando simplemente el menos común de los sentidos, el sentido común, tan ausente entre los bolivianos, comparto con mis lectores cinco razones por las cuales creo […]

Seamos claros. Las próximas elecciones verán sólo dos contendores. Evo y Tuto. Ahora bien, sin ánimo de efectuar un análisis político – porque analista político no soy – y usando simplemente el menos común de los sentidos, el sentido común, tan ausente entre los bolivianos, comparto con mis lectores cinco razones por las cuales creo que Tuto NO debe ganar las elecciones.

Primera. Porque Tuto Quiroga no es un líder sindical, no es un líder político; no es más que un agente de intereses extranjeros que ya debe tener un pasaporte «made in USA» en un bolsillo. Porque utiliza su razonamiento para discernir lo que le conviene más y actuar en desmedro del país todo. Porque no tiene la suficiente estatura para representarnos dignamente fuera del país: ya lo demostró. Porque su discurso promueve dos fórmulas ya fracasadas, el neoliberalismo y la globalización -recuérdese que los países que se han abierto al comercio internacional han aumentado la riqueza de los centros internacionales de poder, sepultando a sus pueblos en la miseria y la desesperación: mírese a México. Porque necesita repartir mensajes pro-imperialistas ante las multinacionales para lograr su aprobación. Porque no se opone al ALCA como el resto del Tercer Mundo latino. Porque se requiere insultar al FMI y al Banco Mundial para que se vayan y quedemos bien con nuestra conciencia.

Segunda. Porque Tuto Quiroga NO tiene el expertis (??) para administrar un Estado y ya lo demostró: es un vendedor de salares, y eso. Porque para administrar un Estado no basta haber logrado alguna popularidad, y menos pensar que puede comprarla. La administración de un Estado debe estar en manos de estadistas o de personas que hayan tenido experiencia en el manejo de la cosa pública, de las cuales no conocemos ni una, después del Mono Paz. Un dirigente sindical puede manejar un gremio y luego un país, como bien lo supo Juan Lechín, que de Dios goce.

Tercera. Porque Tuto Quiroga malvenderá hasta la última piedra de Tarija. No rescindirá los contratos con las empresas petroleras y menos confiscará sus bienes; les entregará gratis todo lo que pueda y más, para irse a vivir a Miami después, como buen sirviente de las internacionales. No pensará siquiera en racionalizar la producción de la hoja de coca, obedeciendo tradiciones milenarias de su pueblo. No pensará tampoco en entregar tierras a los «Sin Tierra» y a otros que quieren trabajarla en un país que necesita con gran urgencia otra Revolución Agraria. No pensará para nada en los salarios de los empleados públicos ni le importará un rábano el equilibrar la balanza fiscal. Será el Fox de Bolivia.

Cuarta. Porque Tuto Quiroga impondrá un sistema económico explotador y antinacional, se olvidará de que los bolivianos necesitan comer, educarse y avizorar alguna esperanza, se creerá un gerente improvisado de empresa y terminará haciéndose de una fortuna parecida a la que goza hoy la familia del dictador Banzer, su padre espiritual y político.