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Potosí: El Cerro Rico continúa dando minerales pero la ciudad vive en la miseria

Fuentes: EcoPortal.net

Ingentes riquezas dio Potosí al mundo en la colonia, en la república y en la actualidad siguen saliendo los recursos mineros, pero en Potosí no queda casi nada, ocupando los últimos lugares en desarrollo humano del país.

La ciudad de Potosí, Bolivia, debe su nombre al famoso Cerro Rico de Potosí, montaña de plata de la cual decían los españoles que arribaron a estas regiones, estaba poblada de arbustos y matorrales espinosos, muchas especies nativas constituían la flora nativa, las mismas que fueron utilizadas para el laboreo minero.

El conocido historiador boliviano Roberto Prudencio en su obra «Potosí y Charcas durante la colonia» dice: «Potosí nació en la colonia, pero fue el fruto de la savia misma de la tierra; fue el florecimiento singular de una planta autóctona nacida del mágico injerto del espíritu hispano. Potosí realizó en forma extraordinaria lo que los actuales hispano americanos buscamos y que la república ha perdido: el genio creador, como resultante de la fusión de dos espíritus, de dos mundos: lo hispano y lo indio. Por eso Potosí pudo lograr una vida propia, un estilo propio, vale decir, una cultura propia. Y esto que fue la conquista del singular destino es lo que ha perdido la república».

Ingentes riquezas dio Potosí al mundo en la colonia, en la república y en la actualidad siguen saliendo los recursos mineros, pero en Potosí no queda casi nada, ocupando los últimos lugares en desarrollo humano del país.

La asombrosa cantidad de minerales que han salido del Sumac Orcko (cerro hermoso) mas la historia y la cultura que se desarrollaron en esta ciudad, fueron la base para que organismos internacionales le hayan otorgado numerosos títulos, la OEA declaró a Potosí en 1979 Ciudad monumento de América, por su parte la UNESCO, en 1987 declaró a Potosí Patrimonio de la Humanidad, últimamente también la UNESCO declaró al cerro Mensajero de la paz. A nivel nacional, el Estado boliviano en 1990 lo nominó Monumento Nacional.

Todos estos honores no salvan a este cerro, prodigio de la naturaleza, de la ambición desmedida de los humanos, quienes siguen extrayendo la riqueza de sus entrañas, sin pensar que tanto horadar y horadar, algún momento puede colapsar. Su desaparición condenará a la ciudad de Potosí a perderse, también significará que el Estado boliviano y los organismos internacionales, se conviertan en cómplices de su desaparición, al cerrar sus ojos y anteponer intereses económicos, a los de la ciudad de Potosí y de sus habitantes que bien podría vivir dignamente gracias a otro tipo de actividades sostenibles.

En la actualidad el legendario Cerro Rico sufre una destrucción permanente, fruto de la ambición desmedida e irresponsable de las empresas mineras nativas, cuyas formas de explotación son tan rudimentarias como en el periodo colonial. Pero no solo son los nativos quienes extraen sus recursos, sino también empresas transnacionales que han puesto sus ojos en esta tierra, la empresa norteamericana Coeur d’ Alane, que opera en el Cerro Rico a través de la Empresa Minera Manquiri S.A., está en plena fase de implementación para explotar los pallacos existentes en la superficie del Cerro, trabajo que afectará al perfil natural de esta montaña de plata. El proyecto denominado San Bartolomé aprovechará plata y estaño.

Pese a la gran riqueza mineralógica que se extrae en grandes cantidades, Potosí no ha conseguido desarrollar otras actividades económicas y sus habitantes en épocas de baja cotización de minerales, tienen que migrar a otros departamentos, actualmente es el segundo departamento exportador pero es el que presenta los índices mas altos de pobreza, y es porque toda su existencia ha dependido económicamente de la extracción de sus recursos no renovables, como son los minerales que solo dejan contaminación ambiental, pérdida de otros recursos naturales y pobreza.

Ni el Estado boliviano ni los organismos internacionales han implementado políticas para salvaguardar este patrimonio de la humanidad, hoy propuesto para ser nominado como maravilla del mundo. Es necesario realizar una cruzada en todo el mundo a favor de la protección y conservación de esta extraordinaria montaña para que las futuras generaciones puedan disfrutar de su presencia y de esta manera, construir una base de desarrollo alentando una industria limpia y sostenible como es el turismo.