La dirección regional del Fondo de Desarrollo para la Mujer del organismo insta al Estado mexicano a adoptar las medidas necesarias para poner fin a dichas agresiones
La ONU expresó hoy su preocupación por la violencia contra las mujeres en el estado sureño de Oaxaca y las zonas fronterizas de México, y dijo que ese flagelo se ha extendido desde Ciudad Juárez (norte) hacia otras regiones del país.
La directora regional del Fondo de Desarrollo de la ONU para la Mujer (UNIFEM), Teresa Rodríguez, dijo que el patrón de violencia de género en el país ya no es exclusivo de Ciudad Juárez (frontera con EU), donde han sido asesinadas más de 350 mujeres en la última década, pues el flagelo se ha extendido a otras localidades, donde la situación es incluso más dramática.
En vísperas del Día Internacional para la eliminación de la violencia contra las mujeres, el próximo sábado, la oficina regional de la ONU también instó la Estado mexicano a «adoptar sin demora todas las medidas necesarias» para poner fin a dichas agresiones.
Rodríguez señaló en rueda de prensa que UNIFEM reconoce los «avances» de las autoridades mexicanas para prevenir y castigar la violencia, aunque señala que queda «mucho por hacer» en esa materia.
La funcionaria leyó un informe de observaciones finales del Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer sobre el caso mexicano, el cual subraya la «preocupación» por la violencia por razones de género en diversas regiones.
El Comité «está preocupado por la persistencia de la violencia generalizada y sistemática contra las mujeres, que llega incluso a desembocar en homicidios y desapariciones y, en particular, por los actos de violencia cometidos por autoridades en San Salvador Atenco y ahora en Oaxaca», dijo Rodríguez.
Los hechos de San Salvador Atenco, estado de México (centro), ocurrieron en mayo pasado, cuando lugareños se enfrentaron con las fuerzas antidisturbios, y varias activistas -incluidas una española y una chilena- aseguraron haber sido abusadas por los policías.
Rodríguez dijo este jueves que la oficina de la ONU en Ciudad de México recibió ayer un informe de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) que recoge presuntas violaciones de los derechos humanos y abusos sexuales en ese estado, centro de un conflicto socio-político.
El conflicto, que se inició en mayo pasado con una protesta de maestros que exigían mejores salarios, deja al menos once muertos y varias personas desaparecidas, según organismos independientes.
La APPO, un colectivo social que, junto con los maestros, exige la renuncia o destitución del gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, ha denunciado que las fuerzas federales y regionales han cometido numerosos abusos en la región, incluidos asaltos sexuales, lo que organismos humanitarios investigan.
Rodríguez señaló que el informe que la APPO entregó ayer a la ONU fue remitido a su vez a las autoridades mexicanas y a la sede del organismo mundial en Nueva York.
El director del Centro de Información de la oficina regional de la ONU, Paul Hoeffel, dijo en la rueda de prensa que ese organismo está dispuesto a ayudar en la solución del problema, aunque siempre a solicitud de las autoridades mexicanas.
La directora regional de UNIFEM señaló que la ONU «expresa su preocupación por el clima general de la discriminación e inseguridad reinante en las comunidades (campesinas mexicanas) y los lugares de trabajo, en especial las maquilas (ensambladoras)».
Añadió que también preocupa la situación «en los territorios (mexicanos) con presencia militar, como las fronteras norte (con EU) y sur (con Guatemala y Belice), que pueden poner a las mujeres en un peligro constante de sufrir violencia, maltrato y acoso sexual».