La Otra Campaña en el Estado de Tabasco denunciamos a los gobiernos estatal y federal de los últimos 3 sexenios y al actual gobernador Andrés Rafael Granier Melo y Felipe Calderón Hinojosa por lo siguiente: La Conagua, la CFE, el gobierno estatal y federal son los responsables del mal manejo de las presas hidroeléctricas, por […]
La Otra Campaña en el Estado de Tabasco denunciamos a los gobiernos estatal y federal de los últimos 3 sexenios y al actual gobernador Andrés Rafael Granier Melo y Felipe Calderón Hinojosa por lo siguiente:
La Conagua, la CFE, el gobierno estatal y federal son los responsables del mal manejo de las presas hidroeléctricas, por beneficiar a las empresas particulares que generan energía eléctrica a través de gas. Este es el motivo por el que han retenido el agua de la presa Peñitas, lo que provocó que la presa no estuviera preparada para responder a la temporada de lluvias porque, si bien fue extraordinaria la cantidad de agua que recibimos, deberían prevenir esta situación considerando que vivimos en un estado que de por sí recibe elevados índices de lluvia en esta época, además del agua que baja de la sierra chiapaneca.
Denunciamos que el gobierno estatal, la Conagua y el gobierno federal son responsables de las muertes que esta inundación ocasionó, ya que mal informó a las comunidades y a las colonias, pues aunque dio voz de alerta no dijo de qué dimensiones sería la inundación, tampoco especificó qué sitios eran seguros, ya que hubo sitios ocupados como albergues que tuvieron que ser desalojados. No se especificó que la populosa colonia Gaviotas, con todos sus sectores, se inundarían (todo el primer piso de las casas en aproximadamente media hora y, en algunas zonas, alcanzó a cubrir hasta los segundos pisos) lo que provocó que mucha gente no pudiera salir a tiempo de sus casas poniendo en riesgo principalmente a niños y ancianos. Y aunque el gobierno niega que haya muertos en las colonias populares, en los albergues es común escuchar que hay personas fallecidas.
Los gobiernos estatal, federal y sus organismos ejecutores son responsables de la mala planeación de la ciudad ya que, a pesar de la denuncia de organizaciones civiles, comunidades indígenas, campesinas y personas de la sociedad civil, rellenaron vasos reguladores del agua y construyeron en zonas inundables instituciones de atención social como la clínica 46 del IMSS y el hospital Juan Graham Casasus. También centros comerciales para grandes empresas como Wal Mart, Soriana etc., carreteras que sirven de tapón del cauce natural del agua, condominios y colonias populares que son adquiridos a través de Induvitab o Infonavit, sin pensar en las personas pobres que por necesidad tienen que irse a vivir a estos lugares, sino que sólo les importan las ganancias que estos negocios le dejan a constructoras de muchas familias ricas y amigos del gobierno en turno y al mismo gobierno estatal.
También son responsables de no solucionar ni prever el asolve de ríos, lagunas y de la misma presa Peñitas, sino que, al contrario, contribuyen con sus obras al asolve de los afluentes.
Denunciamos la autoría y la complicidad de los últimos gobiernos estatal y federal, del robo multimillonario de los recursos destinados a solucionar estos problemas.
Los hacemos responsables de la pérdida del patrimonio de más de un millón de familias que han trabajado duro para tener los recursos necesarios para sobrevivir, de la perdida incalculable de la producción del campo, principalmente de los pequeños productores.
Denunciamos el daño ambiental y de salud que esto trae como consecuencia, denunciamos el daño a los pequeños y medianos comerciantes.
Muchas de estas pérdidas son irreparables.
Denunciamos la burla del bono de 5000 pesos para que las familias recuperen su patrimonio y la gran diferencia con el apoyo que le dan a las grandes empresas que, además de estar aseguradas en su mayoría, son las primeras en recibir la ayuda del gobierno, además de ser las beneficiadas con las compras que tendría que hacer la clase pobre por todo lo perdido.
El que pierde es el pueblo no el gobierno ni las grandes empresas. Muchos artículos subieron de precio. Las pérdidas las va a pagar el pueblo de Tabasco y todo el pueblo de México. no el gobierno ni las grandes empresas, pues éstos ya están planeando y calculando el negocio que para ellos significa la reconstrucción.
Denunciamos la militarización del estado para proteger las grandes tiendas y desproteger a la ciudadanía, ya que el ejército se ha dedicado a ser la policía de las transnacionales y a proteger los bordes de contención del lado donde están las empresas, fraccionamientos ricos. En los bordes del Río Grijalva, en su mayoría, fueron los civiles quienes trabajaron sin descanso llenando costales para tratar inútilmente de proteger el bordo de sus colonias, algunos no pudieron sacar nada por estar llenando costales, mientras el ejército tenía más presencia reforzando el bordo del lado del Centro. Y en el Río Carrizal, el ejército trabajó reforzando el bordo del lado de la zona lujosa y hotelera de Tabasco 2000, mientras del otro lado del río las colonias Bosques de Saloya, la Selva y demás asentamientos pobres se quedaban sin protección alguna.
Además, es común escuchar en las colonias populares y rancherías decir que el ejército y la policía, con el gobierno estatal y federal, se llevan los cadáveres que aparecen en los ríos y lagunas. Lo cierto es que se habla de más de 300 desaparecidos, pero el gobierno insiste en que no hubieron pérdidas humanas.
A pesar de que el ejército tiene el control de los albergues y de repartir la ayuda a las comunidades y colonias, hay una ineficacia total y humillante para la gente ya que, en muchas comunidades, la gente tiene que esperar más de ocho horas gritando en las carreteras y haciendo señales a los helicópteros que pasan para que alguno les lleve algo de agua y comida. Algunos reciben un garrafón de 3 litros para familias de más de 5 o hasta 10 personas; mientras que en la ciudad hay que estar todo el día y a veces parte de la noche en las colas interminables para las ayudas de comida y ropa.
Nosotras, nosotros, no sólo pedimos JUSTICIA para Tabasco sin explicar porqué, como lo hace el gobernador Andrés Granier Melo ante el gobierno federal y la ciudadanía lavándose él las manos, sino que responsabilizamos a Roberto Madrazo, Manuel Andrade, Vicente Fox Quezada, Felipe Calderón y Andrés Granier por este crimen colectivo cometido con todas las agravantes contra el pueblo tabasqueño.
Para solidarizarse con las comunidades de La Otra Tabasco y y la Zona Norte de Chiapas el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas pone a disposición la siguiente cuenta:
4915 6620 1630 3821 de Banorte a nombre de Blanca Isabel Martínez Bustos.
Tras depositar hay que enviar un correo de aviso a [email protected]