El pastor Aníbal Sicardi dirige la Iglesia Evangélica Metodista de la ciudad de Bahía Blanca, en el sur de la Provincia de Buenos Aires. Hace parte del sector de cristianos progresistas y en tanto periodista dirige la Agencia de Noticias Ecupres.
¿Cuáles han sido las causas principales de la derrota electoral del Gobierno en las primarias de septiembre?
Aníbal Sicardi: El equipo gubernamental abusó de su excelente gestión dirigencial durante la pandemia y la trasladó a la esfera político-social sin priorizar el contacto con la opinión popular. Si bien la población acompañó la gestión pandémica obedeciendo directivas, no recibió explicaciones adecuadas para aceptar la precaria situación económico-social que vivía. La dirigencia no se acercó a ella. La población se sintió abandonada, la propuesta inclusiva se rompió. La pandemia tuvo un impacto negativo, como en todo el mundo, ya que exigió y desvió fuerzas enormes que hubieran tenido que ir a la reconstrucción productiva y social del país luego de los cuatro años de neoliberalismo puro de Macri.
P: ¿Aparte de ese alejamiento que usted critica, ha habido errores gravísimos de gestión de parte del Gobierno como para recibir un voto castigo de esta dimensión en septiembre?
AS: No. Para nada. Es increíble lo que el Gobierno debió hacer dado que se encontró con un sistema de salud pública destruido por la administración anterior. Hizo esfuerzos enormes: como los beneficios otorgados a los jubilados y sectores postergados, los pagos para sostener a los desempleados. Todo esto, soportando la feroz y malsana crítica de la oposición. Y, por cierto, viendo como negociar la enorme deuda externa contraída por Mauricio Macri que sigue siendo una carga brutal para el país sin resolución definitiva, por el momento.
¿Es posible un cambio de la tendencia de las elecciones de septiembre pasado?
AS: Pienso que puede llegar a modificarse parcialmente lo ocurrido en las PASO. Especialmente si hay más votantes que concurran a las urnas. De todas formas, no tenemos herramientas ciertas para saber cuál es el actual estado de ánimo de la población. La oposición ha instalado una postura de odio feroz mientras que el Gobierno continúa con la proposición de un país distinto que tiene posturas nuevas como el valor de la justicia y el cuidado social, que habrá que ver que efecto tienen. Hablamos de dos proyectos muy distintos en disputa. Hay que ver si el electorado se da cuenta de lo que realmente está en juego este 14 de noviembre.
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