Cada uno d elos artículos de la nueva Constitución Política del Estado se aprobará por mayoría absoluta en la Asamblea Constituyente y sólo el texto final de la futura Carta Magna se refrendará por dos tercios de votos, determinó hoy el el pleno de la Asamblea, luego de un intenso debate de las tres propuestas […]
Cada uno d elos artículos de la nueva Constitución Política del Estado se aprobará por mayoría absoluta en la Asamblea Constituyente y sólo el texto final de la futura Carta Magna se refrendará por dos tercios de votos, determinó hoy el el pleno de la Asamblea, luego de un intenso debate de las tres propuestas que se habían puesto a consideración. Los artículos conflictivos que no logren el respaldo necesario, que no podrán ser más de tres, serían sometidos a referéndum popular.
El planteamiento del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) fue aprobado por 140 constituyentes, mientras que la propuesta del opositor Podemos recibió 88 votos a favor. Cinco asambleístas se abstuvieron y ocho representantes no emitieron su voto.
La redacción del Art. 71 del Reglamento de Debates referido al sistema de votación propuesta por el MAS dice: «Las decisiones de la Asamblea Constituyente se aprobarán, por regla general, por mayoría absoluta en comisiones y en plenaria».
Según la propuesta oficialista aprobada hoy, la Constituyente sancionará por dos tercios de votos de los miembros presentes el texto final de la nueva CPE presentado a la plenaria por el comité de concordancia y estilo, mientras que los artículos del proyecto de la nueva Constitución que sean observados con la presentación de una redacción alternativa y reuniendo un tercio del voto de los miembros presentes, pasarán a un segundo debate, el cual se llevará adelante una vez aprobados todos los artículos no observados.
Según el Art. 71 aprobado, la observación de las minorías podrá darse sobre un máximo de tres artículos, los cuales, si no llegan a obtener los dos tercios de los votos en el segundo debate, serán puestos a consideración del pueblo soberano en el referéndum de aprobación de la nueva Constitución.
La propuesta de las ocho fuerzas opositoras encabezadas por Podemos (UN, MNR, APB, AAI, MNR A-3, MIR, CN) que perdió en la votación dice: «El texto de la Nueva Constitución Política del Estado será aprobado en plenaria por dos tercios de votos de los miembros presentes, en sus tres estaciones en grande, detalle y revisión, conforme a la Constitución Política del Estado en vigencia y la Ley Especial de Convocatoria a la Asamblea Constituyente».
Anuncian una catástrofe
Las fuerzas políticas conservadoras mostraron un panorama catastrófico tras su derrota en la Asamblea Constituyente. Roy Moroni y Óscar Zamora Medinaceli (MNR), David Vargas (ASP) y Néstor Torres (MOP) vaticinaron que el país se «fracturará». Mauricio Paz, representante de Podemos en la mesa directiva, bajó de la testera al hemiciclo advirtiendo que no participaría de la «tragedia de la Asamblea Constituyente», según un reporte de ABI.
Varios asambleístas de Podemos repudiaron la decisión mostrando cintillos negros, Gamal Serham de Podemos vaticinó enfrentamientos en el país por culpa del MAS, mientras que el constituyente de UN Emilio Gutiérrez se paseó por Sucre con medio cuerpo desnudo protestando contra el «autoritarismo» oficialista.
Samuel Doria Medina, de Unidad Nacional (UN), convocó a los ciudadanos a que se sumen a la huelga de hambre iniciada por 20 militantes de su partido en el Parlamento de La Paz; en el Teatro Gran Mariscal de Sucre, sede de la Asamblea; en oficinas de la brigada parlamentaria de Chuquisaca con seis militantes de UN, encabezados por Dayler Andrade; en oficinas del Comité Cívico de Pando, en Cobija, a la cabeza de Heriberto Do Nacimiento; en Santa Cruz a la cabeza del diputado Edmundo Soruco Núñez; en la Catedral de Oruro con Ana María Gómez a la cabeza, y en la Catedral de Cochabamba.
Este viernes al mediodía cuando algunos militantes de UN intentaban instalar un piquete en ambientes de la Iglesia de San Francisco, partidarios del MAS los agredieron. La gente de UN envió una carta al Defensor del Pueblo para denunciar «esta clara represión antidemocrática contra de nuestro derecho a expresarnos». Por otro lado, el diputado Rene Ramos del MAS intentó sacar a los huelguista del Congreso acusándolos de estar consumiendo te y café.
Según el MAS, la gente de UN sólo trata de buscar protagonismo político al realizar una huelga de hambre en defensa del «respeto a las leyes». El viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales Alfredo Rada opinó que la huelga de Doria Medina es un intento desesperado por mantener vigencia política porque en realidad la presencia numérica de su partido en la Constituyente es pequeña, apenas el tres y medio por ciento de toda la Asamblea.