Senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) manifestaron que su partido no puede renunciar a su planteamiento opositor y su programa alternativo sólo por concretar una alianza que saque al Revolucionario Institucional (PRI) de los gobiernos que encabeza. En entrevista, el senador Pablo Gómez dijo que el carácter opositor del PRD no es un […]
Senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) manifestaron que su partido no puede renunciar a su planteamiento opositor y su programa alternativo sólo por concretar una alianza que saque al Revolucionario Institucional (PRI) de los gobiernos que encabeza.
En entrevista, el senador Pablo Gómez dijo que el carácter opositor del PRD no es un capricho, sino producto de una divergencia de fondo con la forma cómo el presidente Felipe Calderón y Acción Nacional (PAN) han conducido al país.
De ahí que, señaló, lo que hay actualmente por parte del núcleo dirigente del PRD es un acuerdo político con el gobierno federal y con el PAN, y «eso es justamente lo que estamos combatiendo, ya que es algo muy lesivo para la izquierda, pues la desnaturaliza».
Consideró que la actual dirigencia del partido, en manos de Jesús Ortega, con sus pretensiones de ir en alianza electoral con el PAN en el estado de México y en otras entidades «echa a la basura» la posibilidad de que los mexicanos se den cuenta de que la izquierda es la alternancia en el país.
Gómez comentó que en la historia de Europa y de América Latina, las izquierdas y derechas han hecho pactos políticos, pero cuando están en la oposición y no cuando la derecha está en el gobierno y la izquierda la apoya, lo cual no se ha visto nunca.
El legislador perredista dijo no estar de acuerdo con la alianza en Coahuila ni en Nayarit ni en el estado de México, ya que el PRD debe ir con sus propios candidatos y programas, pues no se gana siempre y ningún partido está obligado a hacerlo siempre.
Más adelante señaló que «tenemos en el PRD unos dirigentes que son ágrafos: no escriben nada, no opinan sobre la situación de México, sólo están en los asuntos internos y en las alianzas con el PAN, pero el país no existe para ellos», es una vergüenza.
En su oportunidad, el senador Carlos Sotelo expuso que las corrientes perredistas a las que se ha bautizado como G-8 harán todo lo posible para detener la consulta en el estado de México, ya que el acuerdo no puede ser con la derecha.
Resaltó que si algo preocupa al actual gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, es que Alejandro Encinas sea postulado, ya que con la unidad de las izquierdas se puede derrotar al PRI y al PAN, y ya se ha logrado, concluyó.